별명 4: Consulta 별명

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Sabían que era la hora de acostarse y de levantarse debido a que, las luces en el techo se apagaban y se encendían. Y no volvían a apagarse hasta que era nuevamente la hora para dormir.

La comida llegaba diariamente tres veces al día. En la mañana había un tazón de arroz con carne fría, al medio día había arroz solo con caldo, y a la noche arroz con verduras.

La rutina era aburrida, ya que allí no había nada que hacer. Los primeros días eran de adaptación, o eso dedujo Cheonsa una vez se le pasó el pánico de lo desconocido.

Tenían ropa limpia, ducha, baño, comida, camas realmente cómodas. Estaba claro que buscaban algo de tenerles allí, por lo que no bajo la guardia a pesar de que el silencio era horrible.

Scoups eventualmente comenzó a hacer algunos ejercicios básicos, trotaba por la habitación, hacía flexiones y sentadillas. Cheonsa leía libros distópicos y pensaba en mil cosas.

Entre ellos había poca conversación, casi nula.

Cuando el de cabello largo calculo que era la séptima noche, y las luces se apagaron, se quedó más rato del habitual mirando el techo. No tenía sueño, ya que estaba seguro de que algo aquella noche iba a pasar.

Su compañero había ido bajando la guardia estos días, y se le hacía sospechoso, ya que era el que había tenido mente fría al primer instante en el que llegaron allí.

Pero repentinamente comenzó a sentir un sueño extraño que lo dejo aplastado contra las sabanas. En dos minutos sus ojos se cerraron y cayó en un profundo y extraño sueño.

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-¿Esta.... seguro.... de.... eso.... no es.... proceda...sujeto A1.... Yoo.... eong.... an.... sujeto A2.... oi...eung... eol.... análisis...

Su cabeza daba vueltas y sentía que estaba en un limbo entre estar despierto y estar dormido. Sabía que volvía a estar en un lugar que no recordaba por las voces a su alrededor y la sensación de adormecimiento.

Sabía que no debía estar parcialmente despierto al notar la camilla dura a sus espaldas y las cintas que apresuraban sus manos y tobillos. Pero no podía hacer nada contra ello, ya que estaban bien sujetas.

Cerro los ojos y se obligó a seguir respirando para poder aclarar las voces a su alrededor.

-No puede seguir ayunando...- logro reconocer la voz de un hombre.

-Insertaremos suero en las visitas.- aseguro la voz de una mujer, un poco más lejos.

Su plan era seguir quieto y averiguar quienes eran aquellas personas que los habían secuestrado a el y a su compañero de habitación, pero nuevamente se dejó arrastrar por el pánico al notar como estaba colocado su cuerpo en la camilla.

La posición de litotomía solo podía significar cosas malas, por lo que tiro inconscientemente de las ataduras y llamo la atención de aquellas personas. Al saber que había cavado su propia tumba, abrió los ojos y borrosamente pudo distinguir una consulta médica y un hombre con mascarilla.

-Duérmelo de nuevo.

Aquello fue lo último que escucho después de ver al supuesto doctor ponerse entre sus piernas y de que la enfermera le pinchara algo en el brazo.

별명

Nickname // JeongcheolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora