Tenías que ser tú

Chapter 1

Hoy es mi primer día en la universidad; en la zona de los riquillos, ya en mi escuela, bachillerato me humillaron y estoy segura que aquí también harán lo mismo y todo por ser una pobretona.

Me bajo del bus y lo primero que me encuentro es una gran universidad, está muy bien cuidada y claro que tiene que estarlo, su patio es hermoso hay árboles y el césped podado la hace ver hermosa.
Subo las escaleras para entrar al instituto y al poner un pie encima todos se quedaron viéndome, se que me criticaban por qué murmuraban entre ellos, eso me hizo sentir muy nerviosa, recojo un mechon de mi corto cabello y lo pongo detrás de mi oreja y sigo caminando tratando de disimular el nudo en mi garganta y la falta de oxígeno y, eso solo significa una cosa "un ataque de pánico".
Al estar dentro me recuesto de la pared, chicos y chicas pasan y se quedan viéndome, mi visión se nubla, mi respiración es agitada, me siento mareada, tengo mucho miedo, lo unico que pasa por mi mente es que me voy a morir, voy a morir aquí y sola, busco como puedo mi celular en mi bolsillo pero no logro tomarlo por qué de pronto si me falta mucho más el oxígeno, llevo mi mano al pecho y apreto el suéter que llevo puesto, ante mi vision nublada puedo ver que alguien se acerca.

—Oye ¿Te encuentras bien?. —es una voz masculina. Niego ante el miedo de que me vea así, casi muriendo.

—A ver, trata de mantener la calma, respira conmigo.

—N-no no puedo r-respirar.
Pronto el se posiciona a mi lado y empieza a sobar mis hombros, inhalaba y exhalaba y me alentaba a hacerlo también, inhale y exhale con el, poco a poco mi cuerpo se fué relajando y mi respiración se reguló.

Al sentirme un poco más calmada me levanto del suelo con vergüenza por qué todos me estaban mirando con desprecio como si fuera un bicho raro.

No me despido del chico que me ha ayudado, llego al salón donde me toca mi clase de arquitectura y, por suerte todos están centrados en sus celulares, la o el docente que nos va a dar clases no está aún, por lo tanto me siento en mi asiento un pupitre donde puedo quizás hasta acostarme ahí ok, solo exagero es espacioso y cómodo, saco mis pocas cosas y las dejo en el pupitre para así esperar al profesor.
Observo a todos escondida en mi posición de descanso, hay una chica pelirroja que está en la esquina ella nota que la estoy viendo y me saluda con una gran sonrisa, le devuelvo la sonrisa de la manera más amable que puedo.

Entra al salón un señor alto con lentes y una barba canosa, lleva en su mano izquierda un maletín negro.
Todos se levantaron de sus asientos, hice lo mismo ellos hacen una pequeña reverencia y yo copié su acción.

El profesor nos da un asentimiento de cabeza y nos sentamos, el profesor me vio por encima de sus lentes y me sonrió para darnos la espalda y comenzar a anotar en el pizarrón gigante.

— Bueno hoy veremos diseño arquitectónico, pueden ir anotando y pronto les explico, si tienen alguna duda háganmelo saber.

Asentí aunque no pudiera verme, empecé a anotar en mi libreta todo sobre diseño arquitectónico, ordené todo perfectamente siempre me ha gustado hacer mis trabajos ordenados e impecables.

Pronto el profesor empezó a explicar caminando de un lado a otro, todo sobre los diseños, cuántos tipos de arquitectura existen y así, siempre presté atención a eso.

Sonó el timbre de salida, recojo mis cosas y salgo del salón.
La chica pelirroja camina a mi lado y me sonríe.

— ¡Hola! — saluda emocionada.

— Hola — le respondo tímidamente.

— No debes tener pena, también soy nueva, por cierto me llamo Nicolle Koch, es un placer conocerte — estrechamos manos.