¿Qué Te Sucede?

16

—¡¿Tweek, dónde estás?!

Trent arrugó la cara con enfado, reconocía esa fastidiosa voz. El de ojos claros levantó la cabeza, viendo como Kyle corría hacia ellos con alguien más detrás de él.

— Tweek...— Craig apareció detrás del pelirrojo, con la respiración agitada y pequeños mechones de su cabello saliendo de su gorro. Sus miradas se sostuvieron por un momento, después pudo ver como observaba el panorama y se avergonzó. Un chico estaba arrodillado frente a él, con una mesa decorada románticamente y aún sostenía sus manos. Le dieron unas inmensas ganas de dar alguna clase de explicación, pero fue interrumpido.

—Ustedes no deberían estar aquí.— Trent se levantó del suelo para ponerse frente a él, cubriéndolo con su cuerpo de las miradas de los intrusos. Su voz era más áspera y ruda en comparación del tono cariñoso y suave que había estado utilizando antes.

—¡Tú eres el que no debería estar aquí con Tweek!— El de ushanka gritó, acercándose con intención de alejar a su amigo del ex-convicto.

—No te metas en esto, judío. Dejé pasar lo que hiciste desde hace tiempo, así que vete antes de que cambie de opinión — amenazó.

—Tiene razón, Kyle — puso su mano sobre su hombro, mirando fijamente a Trent. —Soy yo quien tiene asuntos que arreglar con este cabrón.

Tweek miraba todo sin entender nada ¿Cómo se conocían ellos y por qué decía Craig que le debía algo? Kyle por su lado, se acercó con rapidez a su amigo, aprovechando que Trent estaba haciendo lo posible por no perder la cabeza, agarró a Tweek por el brazo y lo jaló lejos de los otros dos. 

—Creo que estás confundido amigo, no te conozco personalmente. No tenemos ningún asunto que atender, así que si me disculpas, estaba en medio de algo importante.— Craig apretó los puños.

—¿Oh, de verdad? Yo estoy muy seguro de que sí, pero no vengo por exactamente por explicaciones.— Se quitó el gorro y lo tiró al suelo. Trent entendió que de nada serviría mentirle, él lo sabía. Si no lo callaba, Tweek se enteraría de la verdad.

—Bien, arreglemos esto.— Subió las mangas de su camisa, revelando a medias los tatuajes que cubrían sus brazos.

—¿Qué está pasando?— murmuró Tweek.

Kyle sostuvo a Tweek por los hombros y lo hizo mirarlo a los ojos.

—¿Viejo, por qué estás aquí? Prometiste que te alejarías de él si te lo encontrabas.

—Yo, yo no sabía que era él. ¿Pero por qué es peligroso? Mencionó que te dejaría en paz, a ti y a los demás.— Estaba confundido.

Craig y Trent habían comenzado una pelea a golpes, el azabache descargaba toda la furia que tenía contenida desde que recibió ese primer maldito mensaje. 

—Tweek, no te dejes engañar por él, ha estado manipulando todo desde prisión a su gusto. No es alguien de fiar.

—¿Qué...?— volvió a mirar en dirección a los jóvenes peleando.

Aunque Craig le había proporcionado varios golpeas a Trent, era evidente que no podía igualar la fuerza que tenía un hombre que había pasado la mayor parte de su vida peleando. Terminó cayendo al suelo después de un golpe en el vientre que lo dejó sin aire. Tweek vio la intención de Trent de darle un golpe en la cara y todo pareció ir en cámara lenta por un momento. No comprendía nada, el porqué Craig lo golpeaba con ese afán aunque era evidentemente que estaba en desventaja, por qué Kyle decía que era peligroso y que los había estado manipulando. Quería respuestas, ya. Corrió hasta Trent y lo sujetó por detrás antes de que pudiera estrellar su puño en la cara de Craig.