Capítulo 19: Sentimientos de culpa

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¡he vuelto! y con ello una actualización 

Narra Eijun:

Observar desde la distancia a mi contraparte era en ciertas ocasiones bastante entretenido, pero verlo actuar patéticamente frente a Furuya Satoru era otra historia completamente diferente, porque aparentemente no es consciente del hecho de que se estaba enamorando de la contraparte de su rival, así que tenía que intervenir de una u otra forma para evitar un desastre aun mayor, así que después de hablar con Kazuya sobre mí "no tan brillante plan" como lo llamo él, volvió primero y yo me quede en las gradas viendo como ambos idiotas corrían de la manera más vergonzosa posible, así que decidí dejarlo por un rato, no podía seguir viendo semejante ridiculez, fui hasta mi habitación y busque mi celular, no pensaba sentarme ahí y verlos actuar como si fueran parte de una absurda comedia romántica, cuál fue mi sorpresa cuando regrese y no había ni un alma en el campo.

¡Solo esto me pasa a mí! - Grite frustrado, ya no importaba si alguien me escuchaba, me fui de ahí sin un rumbo fijo al que dirigirme, atravesé los pasillos de los dormitorios, pero recordé que probablemente estuvieran en el área donde se guardan todo lo que utilizamos durante los entrenamientos, así que tuve que dar vuelta y regresar por donde vine, rezando mentalmente porque mi otro yo no metiera la pata como lo había hecho hasta ahora.

Cuando llegue a la bodega, los escuche hablar, un poco dramático si me lo preguntan pero no podía entrar, primero tenía que tranquilizar mi respiración para aparentar que todo estaba completamente tranquilo y no levantar sospechas, no me llevó mucho tiempo pero tenía que ser una interrupción oportuna, me quede afuera tratando de escuchar lo mejor posible, intente abrir la puerta pero había algo bloqueándola, bueno tenía que abrirla ahora antes de que todo se fuera al carajo, así que empuje con todas mis fuerzas, todos en la habitación nos quedamos en silencio y en un shock momentáneo, porque no esperaba que lo que estaba bloqueando la puerta fuera Sawamura, y al momento que abrí este cayo hacia el frente, la parte buena, Furuya evito que besara el piso, la parte mala, esto se volvió completamente incómodo.

-lo lamento- les dije tratando de aligerar la tensión e incomodidad que nos rodeaba, mi otro yo aun en los brazos de Furuya me miraba entre molesto y sorprendido- yo no quería interrumpir, pero me temo que tomare a Sawamura por el resto de la noche- fue cuando ambos decidieron alejarse- lo que tengo que hablar contigo es importante- ambos me miraron con incredulidad -lo que sea que tengas que hablar con él será para otro día- mire a Furuya quien parecía aliviado por mi intervención- así que si me disculpas- mi otro yo me miraba molesto, pero no le preste atención, lo tome del brazo y lo saque de ahí, al principio, por la sorpresa no hubo resistencia, pero entre más caminábamos más difícil fue hacer que me siguiera, estábamos debajo de las gradas lejos de todos los oídos chismosos de mis compañero cuando se soltó

- ¿QUÉ DEMONIOS ESTÁS HACIENDO? -me grito, estaba molesto y me dedico una mirada enojada

-salvando tu patético trasero de lo que pudo ser la mayor humillación, ASÍ QUE "DE NADA"- le grite de vuelta, a él no pareció gustarle eso, pero se contuvo camino de un lado a otro tratando de calmarse

- mira aprecio la intención, pero estoy tratando de arreglar las cosas con Furuya- yo negué con la cabeza, ese gesto hizo que se molestara más – es tu culpa que justo ahora haya empeorarlo más-

- ¡mi culpa! -esto era cada vez más ridículo -Ustedes ya tenían problemas desde antes ¿Cómo es esto mi culpa? -

- interrumpiste, yo estaba tratando de disculparme-

-hasta donde yo escuché, eso era todo menos una disculpa-no pude contener mi voz y eso pareció herirlo- te recuerdo que hace no más de 5 horas me pediste ayuda para solucionar lo de tus múltiples pretendientes, ¡te estoy ayudando!, tu mejor que nadie sabe que no puedes seguir dándoles motivos para enamorarse de ti, tu sabías que tenías que dejarles en claro que nada te impedirá regresar tu universo-

¡Vayan Pasando Señoras y Señores!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora