ENTRE SANGRE Y VENGANZA [#2 LEY Y CAOS]

CAPÍTULO 6

— ¿Con qué cara vienes aquí después de dos años? — dijo sin ella sin prestarme atención, Matteo estaba serio, más de lo normal.

— Necesito ayuda.

— Vete a la mierda — le respondió ella con furia en los ojos.

— Yo no hice nada malo, lo hiciste tú.

El ambiente estaba muy cargado

— ¡Me dejaste sola con un bebé! — dijo ella llorando.

— El niño no era mío — respondió él.

— Matteo — dije para que notaran mi presencia.

— ¿Quién es? — preguntó ella.

— No hay tiempo para esto.

— ¿Quién es? — preguntó ella mucho más enfadada — ¿Es tu nueva puta? ¿Enserio has venido a pedirme ayuda con tu novia? ¿Piensas que yo te voy a dar un sitio para vivir con la fulana por la que me has cambiado? — dijo ella muy, pero que muy enfadada.

— Ella es Valentina Cascio, y nos persiguen, te lo puedo explicar todo, pero por favor, lo necesito.

— ¿Valentina?

Parecía confusa al mirarme.

— Sabes que no te lo pediría si no fuese importante.

Ella asintió, nos dijo con la mirada que esperaramos en las sillas gastadas de la mini sala de espera.

Nos sentamos y Matteo se llevó los dedos a la frente.

— Matteo...

Levantó la cabeza para mirarme, pero yo no entendía nada, la verdad, ¿Ellos habían tenido algo? ¿Ella había tenido un hijo? ¿Que pasaba?

— ¿Quién es ella? — pregunté acercándome a él.

— Ella es mi exmujer.

Me quedé paralizada, no solo habían estado juntos, sino que habían estado casados.

—¡Hey! — nos gritó Katherina —. Ya tengo un lugar para vosotros.

Nos guió por dentro del lugar, había habitaciónes con numeros escritos.

Llegamos a un pasillo, a la última puerta, nos abrió la puerta con las llaves y se las dió a Matteo, dentro había una pequeña sala con un sofá pequeño y una pequeña cocina, después habían dos habitaciones.

—Aquí huele a... — comencé a decir.

— ¿A la princesa no le gusta el olor a humedad? Disculpa que esto no huela bien, aquí la gente no me tiene respeto alguno y no pagan — dijo ella dirigiéndose muy enfadada hacía mí.

Decidí no decir nada, ella nos explicó cuanto sería por noche, entraba dentro de nuestro presupuesto, claro que sí, habíamos parado a sacar efectivo, solo que no sabíamos cuánto tiempo podríamos aguantar, estas cosas solían ir para largo.

Se fué y me metí en mi cuarto, necesitaba asimilar todo, no me apetecía habla con Matteo, por alguna razón estaba un poco enfadada, bueno, no, ¿Celosa? ¿Porque? Si tan solo lo conocía de hace unas semanas.

Joder, solo necesitaba dormir, seguro que es eso.

Me estiré en la cama, y no me costó cerrar los ojos y empezar a soñar....

Me volví a despertar agitada después de volver a soñar el mismo sueño, esto me hacía estar muy nerviosa.

Miré la hora en mi teléfono, no había comido nada desde que paramos en aquel restaurante de carretera, salí a buscar comida, me encontré con Matteo hablando agitadamente por teléfono.