Un nuevo día iniciaba y con ello, el sol comenzaba a salir para calentar e iluminar todo lo que estuviera a su alcance. Y desde luego aquella tienda al centro de la calle no era la excepción.
Dentro de la tienda, más específicamente en el segundo piso, se encuentran todos dormidos con una aparente tranquilidad. Sin embargo aquel sueño estaba a punto de terminar para poder volver al mundo real, el apocalíptico mundo real.
El primero en despertar fue (T/N), esto gracias a que un pequeño rayo de sol había encontrado la manera de entrar en la habitación y colocarse justo en su rostro. Aunque algo adormilado, (T/N) se sentó para después estirarse un poco y boztesar.
Tan pronto cómo estuvo en sus 5 sentidos se levantó del suelo para después acercarse con cuidado hacia una de las ventanas, al asomarse por esta pudo ver a un grupo pequeño de muertos vivientes avanzado por la calle de manera errática mientras gruñían ocasionalmente.
-Carajo, no puedo creer que este sea nuestro mundo ahora. Quien iba a imaginarse que aquellas películas de zombies se harían realidad.- pensó (T/N) mientras varios pensamientos surcaban su mente, al igual que diversas emociones.
Mientras veía al grupo alejarse lentamente de ellos, (T/N) suspiró pesadamente para después darse la vuelta, al hacerlo pudo ver al resto durmiendo pacíficamente. Cómo si realmente nada estuviera pasando y todo estuviera como antes de que ellos se fueran a dormir por quien sabe cuánto tiempo.
Después de contemplar aquella vista durante unos breves segundos más, (T/N) sonrió levemente para después bajar al primer piso. Una vez ahí se encaminó hacia el sótano y tras bajar encendió el generador, con eso hecho volvió arriba y tan pronto cómo llego comenzó a revisar los anaqueles en busca de algunos elementos que pudieron hacer un buen desayuno o al menos, uno decente.
Mientras buscaba tranquilamente lo necesario pudo oír un par de pasos bajando las escaleras, por lo que rápidamente llevó su vista hacia estás y al hacerlo pudo ver qué se trataba de nada más y nada menos que Rita Loud, la cual baja las escaleras lentamente mientras frotaba uno de sus ojos, al mismo tiempo que bostezaba.
Al llegar al final de las escaleras y llevar su vista hacia los anaqueles se llevó un pequeño susto al ver a (T/N) ahí parado viéndola. Ambos intercambiaron miradas durante varios segundos antes de comenzar a reírse sobre la situación y así se quedaron hasta que la risa finalmente se detuvo y (T/N) procedió a hablar.
-Lo siento, no quería asustarte.- dijo (T/N) en un tono alegre.
-Descuida, no pasa nada. No esperaba verte aquí, pensé que estabas dormido, ¿Llevas mucho tiempo despierto?.- dijo Rita con una sonrisa y con un tono alegre Pero curioso a la vez.
-Solo un par de minutos, un rayo de sol golpeó mi cara y me despertó agresivamente. Así que baje a buscar algo para el desayuno.- dijo (T/N) tranquilamente mientras hacia algunos ademanes con las manos para apoyar su explicación.
Rita soltó una breve carcajada por la forma en la que (T/N) se explicó y posteriormente procedió a hablar.
-¿Y ya encontraste algo bueno?.- pregunto Rita con curiosidad y una leve sonrisa.
-Pues de momento solo he visto sopas instantáneas y algo de huevo, así que supongo que podemos preparar algo de huevo.- dijo (T/N) tranquilamente.
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El harem del último Gear
Hayran Kurgu(T/N), es un joven que entra en sueño criogénico junto a la familia Loud con el objetivo de sobrevivir a una crisis mundial. solo que, cuando ellos despierten no tendrán idea sobre crisis alguna ni estarán preparados para el nuevo mundo que había ah...