K.M.L.VP

Extra 3. Parte 4.

Se produjo un silencio impresionante. Este silencio era mucho más pesado e incómodo que antes. Pete estaba preocupado por si Vegas respiraba bien. Ni siquiera podía parpadear debido a la excesiva conmoción. Tal vez si un extraño lo viera, podría pensar en él como un muñeco de cera bien hecho. Hasta ese punto, Vegas estaba completamente endurecido.

-Qué...

Después de un largo rato, habló con voz presionada.

-¿Qué? ¿Qué? ¿Ahora mismo?

Ni siquiera podía hacer una frase adecuada. Pete abrió la boca, desconcertado por la reacción de Vegas, que parecía estar más sorprendido de lo esperado.

-Estoy embarazado... Eso dijo el médico, así que fui a la clínica de obstetricia y ginecología a la que fui antes y me hice un chequeo. Estoy seguro, estoy embarazado. ......5 semanas

Pete añadió tímidamente y comprobó sus sentidos. Vegas abría la boca como si fuera a decir algo, pero no emitió ningún sonido. Ni siquiera podía hacer un simple gesto con los labios. La expresión de Pete, inexpresiva como si le hubieran golpeado fuertemente con un instrumento contundente, hacía imposible saber cómo continuar sus siguientes palabras.

Vegas no habló durante mucho tiempo, como si se tragara lo que Pete decía con el estómago y le obligara a digerirlo. Cuando Pete no pudo soportar más el continuo silencio y quiso presionarlo, Vegas finalmente abrió la boca.

-¿Cómo?

Apenas dijo una palabra, volvió a preguntar.

-¿Cómo...? ¿5 semanas? ¿Qué quieres decir con embarazo? ¿Tienes un bebé? ¿Cómo?

Como si no pudiera entenderlo, repitió lo mismo. Pete estaba avergonzado, pero trató de hablar como si nada hubiera pasado.

-Ese día... .¿Te acuerdas? En el trabajo, cuando me esposaste...... Fuimos un poco...... Lo has hecho muchas veces. Tú, hasta el punto de que vino el Rutt

-Sí, estuvo bien

Era Vegas quien normalmente se contenía pensando en el cuerpo de Pete, pero ese día era diferente. Vegas, que involuntariamente recordó su memoria, hizo una pausa. Al ver su reacción avergonzada, Pete inclinó la cabeza.

-En ese momento... Creo que fue

Ha, Vegas suspiró como si fuera increíble. Al ver su expresión como si hubiera perdido su espíritu, Pete no pudo soportarlo más.

-Di algo

Se obligó a sonreír y a mirar a Vegas, pero éste seguía sin responder. Pete no se dio por vencido y continuó deliberadamente hablando con viveza.

-¿Será un hijo o una hija? Me gustaría que fuera una hija, pero no me importa si es un hijo ¿No es increíble que me quede embarazado? El médico dijo que es realmente un milagro. Aunque me empeñara en quedarme embarazado, había una alta probabilidad de que no pudiera. Pero tener un hijo así no es un milagro....

Cuando estaba a punto de decir: "¿Debería llamar al niño...?", de repente Vegas agarró el brazo de Pete y se lo quitó bruscamente. Sujetando a Pete, que perdió el equilibrio y tropezó con fuerza, preguntó con cara fría

-Ahora, ¿qué has dicho?

-¿Eh?

Pete parpadeó avergonzado. Vegas le miraba fijamente con la cara pálida. A Pete, que no podía responder a la inesperada respuesta, le instó de nuevo.

-¿Ni siquiera puedes quedar, pero vas a tener un hijo?. ¿Cómo?

-No lo sé

Pete sacudió la cabeza apresuradamente.