Capítulo 16

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Semanas después

Klaus camina de un lado a otro desesperado,  nadie salía a darle noticias y la esperaba se sentía como la peor de las agonías. Su hermano, le ofreció un café que el rubio miro sin ganas de beber.

Habían pasado al menos tres horas desde que llegaron al hospital y un par desde que Elijah llegó a acompañarlo. Apenas La doctora se asomo por el pasillo y klaus no dudo, en ir a alcanzarla. Necesitaba respuesta, necesitaba saber que estaban bien. Que Caroline estaba bien.

—¿Cómo están? ¿Cómo está Caroline? —Pregunto angustiado

—La señora forbes, ha perdido mucha Sangre, y su ritmo cardíaco cada vez es más bajo. En cuanto a los mellizos, su pronóstico es delicado, si nacen ahora en una incubadora hay esperanzas de vida, pero no le mentire señor Mikaelson, también hay muchas posibilidades de que haya complicaciones. Como sea no tenemos mucho tiempo.

—¿Entonces nacerán hoy?

—De eso quiero hablarle. No pueden permanecer un día más en el vientre de su madre. Pero la señora Forbes, no resistirá la intervención. Su cuerpo está muy débil..

—¿Que es lo que tratando de decir?

—Si tratamos de detener la hemorragia ahora hay grandes posibilidades de que se salve, pero los mellizos no tendrán oportunidad. Pero si decide adelantar el parto entonces es la señora Caroline quien no resistirirá. Tiene que decidir a quién salvar.

—Tiene que salvar a Caroline... Salvar a los tres!.

—Siento que sea una decisión tan difícil, pero debe tomarla ahora. El tiempo es vital para salvar a quien usted decida.

Klaus dejo de escuchar a la doctora y a todo a su alrededor. Todo parecía ir demasiado rápido, y él demasiado lento. Su mundo se desmoronó, todo lo que tenía y lo único que le importaba en la vida estaba en peligro de muerte. Y en sus manos decidir quién vivía y quién no.

Paso de tenerlo todo a no tener nada. De amar su vida, a querer cambiar de lugar con Caroline. Todo lo que amaba, estaba a punto de perderlo, y se negaba a ser el quién decidiera eso.

—Niklaus!  —Llamo su hermano, sacándolo de su aturdimiento.

—Les daré unos minutos. —Informo la doctora alejándose con la enfermera que la acompañaba.

—Tienes que decidir. —insistió Elijah, klaus negó con la cabeza en repetidas ocasiones.

—No puedo hacerlo, Elijah.

—Se que es difícil hermano, pero debes saber que es lo que querría Caroline si pudiera elegir.

—Ese es el problema, hermano. Ella elegiría a nuestros hijos. Pero yo, la amo demasiado, como para perderla, yo no quiero perderla Elijah, Pero se que igual lo haré por qué si hago lo que ella quiere, la pierdo, y si la elijo a ella también la perdere. Porque en el momento que ella se entera que la elegí sobre nuestros hijos va a odiarme. Lo se.

—¿Que harás entonces?

—Puedo condenarme a vivir sin ella, pero no a estar en un mundo sin ella el.

Comenzaron a llamar la doctora por todo el hospital, enfermeras iban y venían corriendo, la doctora se acercó nuevamente a ellos, ahora con más prisa que antes, miro a Klaus.

—Necesito una respuesta ahora. Señor Mikaelson.





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Los gritos de klaus despertaron a Caroline, la rubia trato de despertarlo, mientras klaus lloraba y gritaba diciendo algunas cosas que Caroline no comprendió.

Amor a segunda vista Donde viven las historias. Descúbrelo ahora