-¿Por que te aventaste de la ventana como un mono? -pregunta serio, cruzándose de brazos ignorando el ardor de su espalda baja observando el cuerpo del menor de ariba a bajo.- ¿ Que acaso no conoces las puertas? -alza una ceja, mientras lo mira a lo...
Me encontraba en el jardín sentado en una banca que queda justo enfrente de la impresionante fuente de la hacienda, descubrí que este es un lugar muy lindo, me gusta "Ademas que es un buen lugar para esconderse".
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— Este lugar es muy tranquilo, no es así —la voz del abuelo me trajo devuelta a la realidad.
— Si lo es —lo veo acercarse— ¿Te puedo acompañar pequeño Osito? —me pregunta con una sonrisa tranquila— Claro que si abuelo —le devuelvo la sonrisa.
—¿Como te has sentido estos días en la hacienda?
— Muy bien, la verdad es que ya no extraño tanto el alboroto de la ciudad —una risa se escapa de mis labios.
— Me alegra oir eso —sonrie al igual que yo— Ammm e querido preguntarte ¿Cómo te ha ido éstos días con Jungkook?, ¿Tu que piensas de el? — Su pregunta me tomo por sorpresa poniéndome nervioso, regresando a mi mente todos lo pensamientos que con tanto esfuerzo trato de evitar —yo c-creo que está bien —respondí lo primero que se me vino a la mente.
— Esta bien —murmura el abuelo repitiendo mis palabras— sabes te noto algo distraído estos dias, como si trataras de esconderte, para evitar algo... o a alguien tal vez.
— Nooo n-o yo no me escondo abuelo —una sonrisa nerviosa se me me escapa, nervioso agacho la vista empezando a jugar con mis dedos.
"Soy un asco para mentir"
— Sabes, te parces tanto a tu abuela -me dice mientras devuelve su vista a la fuente.
— ¿De verdad? —lentamente levanto la vista.
— Asi es, al igual que a ti le gustaba mucho meterse en problemas —veo como una sonrisa melancólica se le escapa.
— Abuelo... ¿Como s-supiste que la abuela te gustaba? —pregunte en un murmullo apenas audible.
El me voltea a ver algo sorprendido pero con una sonrisa devuelve su vista al frente— Cuando vi por primera vez a tu abuela lo supe, siempre que sus ojos me miraban yo quedaba paralizado, tenía una mirada que me hacia olvidar todos los problemas y ni hablar de su personalidad cualquiera que la conociera quedaba maravillado con tan encantadora mujer, era imposible no amarla.
— Mi abuela era increíble y por eso me parezco a ella —lo volteo a ver con una gran sonrisa— jajaja asi es mi pequeño osito —con su mano me despeina mis rizos.
— Pero a todos nos llega de forma diferente mi Taehyunge. El amor es como una rosa que florece en el corazón, es hermoso lleno de color, te llena de vida, te da tranquilidad, alegría, pasión, es calido y brillante, pero al igual que una flor tiene sus espinas, sus momentos de dolor, sombras que intentaran apagar su brillo, pruebas que tendrás que superar, pero no tengas miedo mi pequeño osito, el corazón nunca se equivoca y cuando encuentres a la persona correcta los sabras, lo sentirás aquí —señala con su mano su pecho.
