Al siguiente día, Jimin se había despertado temprano, había prometido llevar al pequeño Taehyun a su preescolar y así lo haría.
Miró al lado derecho de la cama, el lado donde Jungkook dormía, al sentir unos piececitos tocando su cintura y vió a su sobrino acurrucado al costado de Jungkook, quien aún se encontraba dormido. Suspiró y dejó un beso en sus cabellos, fue al baño a echarse un poco de agua en la cara para quitar el sueño que aún sentía y salió de la habitación a la cocina.
El pequeño Taehyun en ocasiones se escapaba de su habitación para infiltrarse en la de ellos. Con el tiempo notaron que al pequeño le gustaba dormir pegado a Jungkook, quien al notar su presencia, le rodeaba con sus brazos. Y Jimin era bastante consciente de la tierna imagen de ese par.
Una vez estuvo en la cocina empezó a preparar el desayuno para todos. No acostumbraban a desayunar juntos ya que sus horarios no se lo permitían, siendo claros, el de Jungkook.
— T-tío minnie hola.— escuchó una vocecita.
Giró y vió a su pequeño sobrino de pie junto a él, ya listo para irse.
— Hola bonito.— se agachó dándole un beso en sus cabellos.— ¿Y tú tío Kook?.
— S-se esta vistendo.— Jimin se levantó, empezando a guardar su comida en su lonchera.
— Que bien, ¿se bañaron juntos?.
— Así fue tío minnie bonito.— Jimin sonrió.
— Bien.
Jungkook iba bajando las escaleras, miró a su prometido junto a su pequeño sobrino. Así que camino a ellos.
— Bueno días bonito.— dijo dejando un casto beso a Jimin en sus labios.
— Buenos días kook.— le sonrió.— Bien.— miró a su sobrino.— Iré a bañarme rápidamente.— ambos Jeon asintieron.
Jimin nuevamente subió a su habitación, se baño y alistó rápidamente. Bajó, encontrando a su sobrino viendo la televisión y a Jungkook hablando por teléfono.
— Descuida, voy para allá... sí, llevaré a Jimin a su universidad y nos vemos... si, está bien. Perfecto.— colgó.
Jimin solo se limitó a mirarle, no quería entrometerse en los negocios a los que ahora sabía que Jungkook estaba asociado, no quería abrumarlo, ni mucho menos abrumarse con eso.
— ¿Estás listo minnie?.
— Sí kook.— dijo tocando el morral y la lonchera de Taehyun.
Jungkook apagó el televisor y tomó a su sobrino en brazos, el pequeño no se molesto, al contrario le gustaba compartir tiempo con su tío. Jungkook se encargó de cerrar la puerta principal, fueron a su camioneta y emprendieron camino.
Primero llevaron al pequeño a su escuela, quien amargamente se despidió porque quería trabajar con su tío Jeon. Ambos jóvenes rieron por las ocurrencias de su sobrino. Cuando el pequeño ya estuvo en manos de su maestra se marcharon, camino a la universidad de Jimin.
— Minnie. No creo poder venir por tí, estaré ocupado con Yoongi, asegurando los planes para el viaje.— Jimin le miró.
— Está bien.
— Nos vemos en casa, llegaré temprano. No cenes sin mí.— pidió.
— Kook, no es necesario que te sobreesfuerces, si no tienes el tiempo está bien...
— Minnie, cenaré contigo.— le miró rápidamente.— ¿Bien?.— Jimin suspiró.
— Está bien.— Jungkook volvió a poner su atención al camino.
Al llegar al lugar, Jimin besó sus labios antes de bajar.
— Te amo.— susurró sobre los labios de Jungkook.
— También te amo.— respondió y luego besó sus cabellos.
Jimin bajó y entró a aquel lugar, se sentía extraño, saber todo lo que sabía le confundía, como de la noche a la mañana sentía tanta preocupación, y no por su seguridad, sino por la de Jungkook.
Jungkook fue a la empresa de Min Yoongi, le había pedido reunirse en ese lugar para aclarar todos los puntos de aquella situación.
Al llegar, bajó de su auto y fue directamente al ascensor saludando a todos los presentes. ¿Sabían del negocio ilegal de Min?, por supuesto que sí, trabajaban encubiertos en ese lugar.
Al estar frente a la puerta de Min, tocó dos veces a la puerta. Un "Puedes pasar" se escuchó del otro lado y así lo hizo.
— Min.— saludo Jungkook caminando al mueble frente al escritorio de Yoongi.
— Bienvenido JK. Disculpa que te haya llamado tan temprano, pero era necesario que habláramos esto, así tenías más libres.— Jungkook asintió.
— Bien, necesito que el sábado en la madrugada salgas rumbo a Estados Unidos. Llamé a uno de mis líderes de allá y te recibirá, la información te la envié por correo electrónico privado.— Jungkook asintió.
— ¿Ya saben dónde se encuentra el dispositivo?.
— Aún no hay una ubicación exacta, pero no te preocupes, tengo a mis hombres trabajando las veinticuatro horas del día.
— Eso significa que aún no sabes sí el dispositivo esta en América o Europa.— mencionó. Yoongi bufó.
— Es así, sabes que ese aparato bloquea líneas de rastreo. Es casi imposible que lo encontremos. Por ello, es importante que encontremos al chico antes que cualquier otra persona, él es el único que podría ubicarlo.
— Entiendo, solo espero que sea así.— suspiró.— Si no, estaremos en serios problemas. Y eso de jugar al gato y al ratón lo detesto.
— No te alteres, centrémonos en encontrar al chico.— Yoongi carraspeó.— Jeon, puede que tengas que quedarte algunos días más allá hasta saber donde esta con exactitud.
— Maldita sea...
El sonido de su celular interrumpió su conversación. Miró a ver de quién de trataba y era Taehyung.
— ¿Dónde estás?.
— En la empresa de Yoongi, ¿qué ocurre?.
— Acá esta el encargado del grupo Yakusa, quiero corroborar la mercancía enviada de Colombia, antes de transportarla a Japón.— informó.
— Está bien, dile que voy en camino.
— Bien.— se limitó a responder y colgó.
— Como decía...— siguió hablando Jungkook.— Solo espero que esto no nos quite más tiempo, es lo que menos tenemos.
— Escucha, mantente con la cabeza fría. No puedes dejarte llevar por pensamientos negativos, no permitas que tu mente tome el control. ¿Está bien?.— preguntó con seguridad.
Jungkook asintió.
— Sí.— se levantó.— Me tengo que ir, Yakusa se encuentra en la empresa.
— Entiendo, dile que al terminar pasé por acá, necesito hablar con él sobre el negocio en Japón.— Jungkook asintió.
— Se lo haré saber.— camino a la puerta.— Envíame lo que tengas a la mano.
— Dalo por hecho, inmediatamente le pediré a Wang que te envié la información.— Jungkook hizo ademán de salir.— Por cierto Jeon... necesito que me des nombre de los que te van a acompañar.— Jungkook le miró.
— Namjoon, Seokjin, Jackson, Bangchan, Bambam, Mingyu.— Yoongi asintió.
Jungkook sin más, salió. Ese día tenía mercancía que verificar, además de algunas reuniones importantes con posibles aliados de su empresa de electrónica.
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Sin Límites - [Kookmin] [Ideas Rotas II] (Pausada)
Jugendliteratur[HISTORIA M-PREG: DE LA TRILOGÍA "IDEAS ROTAS"] Jimin ahora con veintiún años de edad realiza sus estudios universitarios, siendo el joven de mejor promedio de su grado. Jungkook por su parte logró posicionarse como uno de los empresarios con más di...