Aproximadamente trece horas después, el jet privado había aterrizado en Nueva York, Estados Unidos, a las cuatro de la tarde del día viernes.
En una de las tantas áreas de aterrizaje privada que tenía Yoongi en Estados Unidos. Los primeros en salir del jet fueron Namjoon y Jin, camionetas cadillac escalade color negro se encontraban esperando por ellos.
Jungkook fue el último en salir portando un aura dominante.
— Maldita diferencia horaria.— dijo entre dientes.
Uno de los hombres que se encontraba en ese lugar se acercó a él.
— Sr. Killer.— hizo una reverencia.— Bienvenido nuevamente a Estados Unidos. Es un gusto recibirlo.
— Sí gracias.— respondió tranquilamente.— ¿Dónde está Wang?.
— En aquella camioneta señor. Espera por usted.— Jungkook asintió.
No quería perder tiempo, quería ir al grano y acabar con toda esa situación.
— Perfecto, gracias.— respondió y empezó a caminar a una de las camionetas.
Jin y Namjoon habían subido a otra de las camionetas. Todos esperaban por Jungkook, quien apenas subía a la camioneta.
— Sr. Killer, es un placer para mí volver a verle.— Jungkook hizo un asentimiento con la cabeza.— ¿Todo listo señor?.
— Así es, llevanos a la base de investigación.— aquel hombre asintió.
— como ordene señor.
— Wang, dame toda la información que tengas.— le miró.— Ponme al tanto.
Cuatro camionetas en total salieron de ese lugar, la primera y la última eran hombres que trabajaban para Agust D y Killer.
— Al parecer el joven Yugyeom es ágil, se ha estado escondiendo estos días, son contadas las veces que lo han visto y la última vez fue cerca al Central Park. Respecto a Christopher, tiene hombres acá y tiene el mismo propósito que nosotros.
— Maldito idiota, piensa que esta a la altura de nosotros. Al llegar a la base necesito que busques la ubicación exacta de Yugyeom, sabe perfectamente que todos estarían al pendiente de su departamento.— Jungkook suspiró pasando su mano por su cara.
Vió la hora en su celular, en Seúl eran las cuatro de la tarde del día sábado. Después de pensarlo un poco abrió el chat de Jimin.
Tú.
Acabo de llegar a Estados
Unidos. Cuídate mucho,
te amo.Espero unos minutos a que Jimin le respondiera, pero no lo hizo, así que guardó nuevamente su celular. Eso sería una tortura.
Media hora después, habían entrado a si base de investigación. Yoongi y él la habían preparado con tecnología de alta calidad, así asegurando su mercancía tomara rutas seguras a la hora de exportarla o importarla.
Todos bajaron de las camionetas y fueron directo a la sala de investigación, Jungkook era quien camina al frente de todos, con su aura dominante. Todos al verlo pasar hacían reverencias, así mostrando respeto ante su presencia.
Luego de que Jungkook se fuera Jimin fue llevado a su casa, se acostó en su cama, buscando poder dormir, no manejaba el horario de América, no sabía que hora podía ser allá, además tampoco quería enviarle mensajes a Jungkook, pensaba que podría interrumpirlo. Y a los cortos segundos se quedó dormido.
Unas horas después, despertó y vió que ya medio día, así que empezó a preparar su almuerzo, al terminar se sentó en la sala a comer mientras miraba la televisión, en ese momento recibió una llamada, pensó que podría ser Jungkook, pero era Hoseok.
— Hola hobi.— dijo después de tragar.
— Hola minnie, quería decirte que aún no llegaré con taehyunnie, hoy tiene unos exámenes, así que lo más probable es que vayamos pasadas las cinco.
— Oh, está bien hobi, no hay problema, que todo salga bien.— respondió y llevó otro bocado de comida a su boca.
— Ah, por cierto taehyunnie quiere hablar contigo.— Jimin sonrió.
— Está bien.
— Hola tío minnie bonito, no estés tiste pol que taehyunnie no puede ir ahola. Pometo que iré una vez telmine mi cita. ¿Sí?.— Jimin rió.
— Está bien pequeño, te esperaré. Cuídate mucho.
— Tú también cuídate mucho tío minnie bonito.— miró a su papi.— Y no le hablas la puelta a d-desconocidos.— susurró.— Papi hobi dice que debemos sel plecavidos.— Jimin rió.
— Está bien pequeño, pero vienes inmediatamente para acá una vez salgas de tú cita médica, ¿bien?.
— Está bien tío minnie. Nos vemos luego.— colgó.
Jimin rió, aquel pequeño no le había dado tiempo de despedirse adecuadamente de él. Sonrió, de verdad quería tener una familia con Jungkook, pero... ¿en esas circunstancias?.
Al terminar de comer, Jimin se levantó a lavar los platos y utensilios que había utilizado, al terminar fue nuevamente a la sala.
Horas después vió la hora en su celular, eran las cuatro y media. Suspiró porque todavía faltaba una hora para la llegada de Hobi, no sé molesto en leer todos aquellos mensajes que tenía e. su celular.
Por otro lado, Taehyung aún no salía de su trabajo hasta las ocho, así que seguiría solo, eso pensó, hasta que el timbre de la casa sonó. Rápidamente se levantó, dejando su celular en la sala.
Por poco y cae su barbilla al suelo del asombro al ver a aquel hombre. Se sorprendió demasiado, pero lejos se sentirse molesto, se sentía feliz por su presencia.
Abrió la puerta sin dudar y medio sonrió. En ese momento se sintió un poco incómodo, habían pasados años desde que no lo veía. Tomó una bocanada de aire.
— Hola.— saludo nervioso.
— Hola jiminnie.— sonrió.— Me alegra poder volver a verte a está distancia.
Jimin ladeó la cabeza al no entender a lo que se refería.
— Y-yo...— le miró.— No sé qué decir...
— Está bien, el que debe hablar soy yo.— tomó una bocanada de aire.— Lamento mucho todo lo que pasó.— le miró fijamente.— Lamento que no haya tomado mejores decisiones en el pasado y que apenas ahora haya tomado el valor de venir hasta acá... a tú casa, a disculparme.
Jimin sonrió, lejos se sentirse molesto con aquel hombre, le contentaba el hecho de que haya tomado la iniciativa de ir a disculparse. No le tenía rencor en lo más mínimo, solo no podía pasar sobre la palabra de su prometido, aunque a veces lo hiciera.
— No se preocupe Sr. Jeon, me alegra verlo de nuevo.— suspiró tranquilamente.— Todo eso quedó en el pasado, de igual manera acepto tus disculpas, entiendo que hayas tenido tus razones.
Jimin ya conocía el carácter de los Jeon, eran hombres orgullosos que no se retractaban fácil. Que Minho haya dado ese paso le alegraba, aunque hubiesen pasado casi cinco años desde su partida de la mansión Jeon.
— Tontas a decir verdad.— sonrió.— Y-yo vine porque quería saber de ti y... de Jungkook.
Fue en ese momento en el que Jimin cayó en cuenta de ese detalle, Jungkook no estaba en casa y sabía que no podía dar detalles de lo que estaba pasando.
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Sin Límites - [Kookmin] [Ideas Rotas II] (Pausada)
Teen Fiction[HISTORIA M-PREG: DE LA TRILOGÍA "IDEAS ROTAS"] Jimin ahora con veintiún años de edad realiza sus estudios universitarios, siendo el joven de mejor promedio de su grado. Jungkook por su parte logró posicionarse como uno de los empresarios con más di...