IT'S JUST A LOVE

Las hamburguesas y el llanto

Jack:

Bajar del avión y ver a todas las personas que habían decidido darle una oportunidad a nuestra música hizo que mi corazón se acelerara. No pude evitar sonreír cuando Teddy me puso una mano sobre el hombro.

—¿No se suponía que nadie sabría de nuestra llegada?—le susurré a Miri, quién me dedicó una pequeña sonrisa de costado y soltó un suspiro.

—La disquera no lo había anunciado—respondió y los gritos de nuestros fanáticos comenzaron a hacerse más fuertes—. Supongo que alguien se chivó.

—Estaba un poco decepcionado por no poder ir a Manchester este año, pero creo que España podría gustarme—soltó Eldon y cuando levantó una mano para saludar, se oyó un grito de emoción.

—Creo que nada podría compararse con Manchester—susurró Teddy a mi lado.

—Al mal tiempo, buena cara—dijo Lando y le pasó un brazo sobre los hombros a Miri.

Me gustaba su relación, a pesar de que Miri era la hermana mayor de Lando y prácticamente había crecido con nosotros, se tomaba muy en serio su trabajo de representarnos.

—Pongan una muy buena cara y posen para las fotos con sus fans, este es un maravilloso recibimiento—nos advirtió ella y tomó su móvil para hacer una llamadas, me imaginaba que estaba asegurándose de que los autos hayan llegado por nosotros y de que la seguridad del hotel fuera buena.

Y aunque yo amara a las personas que me habían dado una oportunidad en la música, en este momento no sentía muchos ánimos para mostrar una sonrisa, el solo hecho de forzarla me parecía agotador. Fue bueno que Teddy no me dejara fumar antes de venir, por lo menos ahora mis ojos no saldrían rojos y los programas de chismes no tendrían como destrozarme ni juzgarme.

—Es hora de irnos—nos avisó Miri varios minutos después y los de seguridad nos ayudaron a que las fans pudieran soltarnos.

Todos nos burlamos de Eldon, que tenía la silueta de un beso dibujada con labial rojo en la mejilla.

—Vaya, no tenía idea de que aquí nos apreciaran tanto—dijo, pero no se lo limpió.

—Les parece ir al hotel primero o prefieren ir a cenar —preguntó Miri cuando se subió a la camioneta.

—Pues yo tengo hambre ahora—opinó Lando.

—Sí, yo igual preferiría comer antes de ir al hotel—agregó Teddy.

—Yo también—dijo Eldon.

Y los cuatro me miraron.

Yo no tenía hambre, justo en este momento tenía muchísimos deseos de fumar, pero tampoco iba a amargarles la noche, así que asentí.

—Muy bien, hice una reserva en un buen restaurante por si les apetecía—agregó Miri mientras le limpiaba la mejilla a Eldon y él hacía muecas—. Me dijeron que es uno de los restaurantes con los mejores platillos en Barcelona.

Los cuatro asentimos.

Olivia:

Estacioné al frente del restaurante para después darle las llaves a uno de los chicos que trabajaban ahí. Mi móvil no dejaba de vibrar y cuando miré la pantalla me di cuenta de que todos y cada uno de los mensajes que había recibido en el lapso de diez minutos eran de Kate, no me dio tiempo de revisarlos porque Axel llegó a mi lado y me puso una mano en la cintura.

—¿Estás listo?—le pregunté mientras guardaba el móvil, ya revisaría sus mensajes luego.

—Estoy listo para ganarme a tu familia—intentó bromear antes de soltar un suspiro y entrar—. Aunque creo que al único que no podré conquistar es a Nic.