-¡¡ABUELO NO VAS A ENTRAR A MI MADRIGUERA CON ESA ESCOPETA!!- Gritabas desde la ventana de tu casa.
Tenías un pañuelo en la cabeza y tu ropa de construcción, llena de tierra, llevas todo el dia cambiando la altura de tu casa para que Leona no necesitará agacharse y pueda caminar, cuando escuchaste al asistente de tu abuelo gritarle que no se volviera una liebre loca.
-¡¡SOLO QUIERO SALUDAR A ESE ROEDOR BASTARDO!!- Dijo un señor con lentes redondos, bigotes pronunciados de unos respetables 100 centímetro, unas orejas largas largas de estatura y una escopeta se escucha que recargaba.
-¡¡ABUELO NO!! ¡¡SE TE SALIO LO DE LIEBRE LOCA!! ¡¡REGRESA A TU CASA Y GUARDA TU ESCOPETA!!- Dijiste aun gritando, mientras que Leona estaba sentado detrás tuyo ayudándote con la mezcla de recubrimiento para la casa.
-Herbivora si quieres salgo y hablo con el anciano- Dijo sin saber qué hacer en esta situación.
-¡¡NO, SE SUPONE QUE NI SIQUIERA DEBERÍAS AYUDARME CON LA CASA!! ¡¡ES MALO PARA TU RECUPERACIÓN!!- Dijiste mientras volviste a asomarte -¡¡Y TU ANCIANO LOCO SI LE DISPARAS A TAN SIQUIERA UNO DE MIS ADORNOS DEL JARDÍN TE CORTO LA OTRA PATA DE LA SUERTE!!-
-¡¡_____ SOY TU ABUELO, TUTOR Y ALCALDE!! ¡¡ASÍ QUE HAZME CASO CHAMACA ALOCADA Y SACA A ESE BASTARDO ROEDOR PARA QUE LO DEJE COMO QUESO!!- Dijo ya enojado reclamando a su nieta preciosa.
-¡¡QUE NO, TAMBOR LLÉVATE AL ANCIANO CON KROLIK!!- Dijiste ya cerrando la ventana enojada -¡Tsk esa liebre loca! Bueno sigamos con lo que estábamos cariño…. ¿Cariño? ¡¿LEONA?!- Viste como la puerta estaba abierta y asustada saliste para defender a tu esposo de tu abuelo.
Aunque no hizo falta, ya que el conejo anciano que estaba dispuesto a dispararle a un desconocido, más no se esperó que saliera de la madriguera fuera un alto, fuerte y aterrador león carnívoro de piernas de felino grande que asomaban sus garras, con cara de pocos amigos que se notaba que aunque estuviera lastimado era fuerte, ya que no llevaba camisa por el trabajo pesado que los dos estaban haciendo, también dejando ver las cicatrices de batalla que llevaba, dando a entender que es un soldado.
-...... ¿T.. Tu eres el marido de mi querida nieta?- Dijo el abuelo conejo que aún tenía la escopeta, el pobre asistente Tambor se quedó mirando a Leona y se cayó para atrás desmayándose, nunca antes vio una persona más alta del pueblo media 1.70 comparados con 2.05 del chico era un gigante para todos de esa pequeña comarca tranquila.
-Así es señor, soy Leona, un gusto- Dijo el León inclinándose lo suficiente para estar a la altura de su ahora suegro y extendió su mano.
El viejo conejo se quedó sin palabras antes el imponente león, estaba tan asustado que comenzó a temblar inconscientemente y tragó en seco, pero aun así se envalentono, inflo el pecho y tomó con firmeza la mano de Leona para saludar enérgicamente.
-¡Mu.. Mucho gusto!! ¡¡Soy Willy D’March!- Exclamó el conejo mayor sacudiendo con energía la mano de leona y apretando con fuerza.
-...- Leona se quedó un poco extrañado por la reacción actual del conejo, hasta hace un instante era estaba todo agresivo y enojado, pero ahora actúa nervioso, sin embargo entiende de donde sacaste tu lado valeroso, este señor aunque parece asustado aun lo toma de la mano, no iba a despreciar ese gesto así que estrechó la mano del anciano también -Gracias y… ¿Para qué es la escopeta?- Preguntó mirando de reojo la rústica arma.
-¡¿Es.. Esto?!.. Esto no es nada de nada, es solo para espantar ratas- Se apresuró a responder el abuelo conejo y la lanzó el arma a su pobre asistente Tambor que recién despertaba del desmayo y este apenas alcanzó a atajarla -Pero aquí no hay ratas asi que no tendre que usarla ¿Verdad?- Dijo el señor tratando de sonar amenazador para intimidar aunque sea un poquito a Leona y que no fuera malo con su adorada y única nieta.
Sin embargo hizo un esfuerzo para no soltar una pequeña carcajada, era una imagen ver a este conejo anciano hacerse el valiente, parece que lo tierno es de familia también, pero si va a ser parte de esta familia no iba a ser irrespetuoso con el abuelo.
-... Nop, no hará falta- Dijo Leona con una pequeña sonrisa incómoda -¿Supongo que si vino hasta aquí es para conocerme y ver si soy buen marido?- Agrego recuperando la actitud seria que demanda la situación
-Así es, no me gusto enterarme por terceros que mi nieta se casó con un completo desconocido- Dijo Willy muy serio, cruzándose de brazos y golpeteando el suelo con una pata con fuerza.
-Si te decía no me hubieras dejado salir de la comarca…- Dijiste haciendo puchero ya saliendo.
-¿C.. Cómo crees mi adorada bolita de algodón?- Dijo el anciano nervioso por la mirada juzgadora de su nieta, tú por otro lado te abrazaste al brazo de Leona aun con intención de protegerlo de tu abuelo la liebre loca.
“Que adorable mi herbívora, ¿Cree que necesito protección?” Pensó el chico moviendo algo la cola y miró al anciano que hacía puchero queriendo decir algo, pero su miedo lo detenía en decir algo indebido.
-Pero bueno ¿Tu que haces fuera de la alcaldía? ¡Tienes papeleo que hacer! ¡¡ANDA!! ¡Saltando al agujero!- Dijiste ya haciéndole señas a tu abuelo para que se retirará -¡Ando remodelando la madriguera!- Dijiste esperando finalizar con esta discusión de tu abuelito sobre-protecto.
Ya tomaste la mano de Leona y este sonriente se dejó arrastrar por su mujer -Nos vemos señor, hablamos después- Y con eso entraron a la madriguera para seguir con el trabajo.
-.... ¡Tambor!… Es idea mía ¿O mi adorable, esponjocita y pequeñita _____ se casó con un carnívoro?- Dijo el anciano con ojos llorosos.
-Me temo que sí señor- Dijo ya el chico conejo de pelaje gris, suspirando sabiendo que esto iba a pasar un dia hasta preparó el hombro ¿Porque? Bueno…
-.... ¡¡BUAAAAA!! ¡¡MI NIETA SE CASÓ NOOOOOO!! ¡¡APENAS ES UNA BEBÉ BUAAAA!!- Y Con eso el señor cayó en el hombro de su asistente empezando a llorar a mares mientras lo arrastraban a la alcaldía.
-.... Tu abuelo es…. - Dijo Leona aun asomándose por la ventana viendo como el anciano era llevado de regreso al trabajo.
-¿Apasionado? Si, desde joven- Dijiste tomando de nuevo tus herramientas para seguir escarbando -Bueno parate en el centro tengo que ver si ya te puedes parar en la sala- Pediste señalando el punto
-Ya voy, Ya voy…. Aun siento qué me voy a golpear la cabeza- Dijo el chico.
-Mmmmh.. Otros 5 centímetros más…- Dijiste y te pusiste a trabajar escarbando, mientras Leona soltó una risa y siguió ayudándote con lo que podía, si iba a ser su hogar también iba a cooperar para volverlo más espacioso.
Sin imaginarse cómo su sola presencia en la pequeña y pacífica comarca iba a causar mas revuelos de que lo él o tú imaginan.
Continuará…
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EL VILLANO CON AMNESIA CREE QUE SOY SU ESPOSA -TW
FanfictionCuando yuu llega y arruina la historia original te toca a ti repararla y como lo haras... cuidando del villano