El Majutsu-Shi Itsushiro Saiko y Las Bestias Sagradas

Capitulo 40

El ambiente en la habitación se sintió más pesado debido a las palabras de Belmont.

Yugi no era tonto, sabía por qué Belmont había dicho esas palabras...

Lo hizo por esa rivalidad que tenía con Adley, sin embargo, se suponía que los de el Consejo no revelarían esa noticia hasta que todo el asunto de Tetsu y Kenta hubiera terminado.

Estaba demasiado molesto, tanto que sus manos comenzaron a picar como si se estuviera quemando.

Mientras tanto, Belmont sabía que había sido un error el haber dicho eso ya que la mirada de Yugi se volvió muy fría.

Jin al ver la actitud de su hijo, puso una mano en su hombro por lo que Yugi se tranquilizo aunque no del todo.

- Adley ¿podrías llevar a los guardianes a su territorio? -pidio Yugi con voz tranquila y firme.

Los guardianes guardaron silencio ya que sabían que si Yugi utilizaba ese tono de voz, significaba que las cosas no estaban bien por lo que se compadecían de Belmont aunque sabían que se lo merecía.

Adley volteo a ver Jin y Tadashi quienes asintieron.

- Andando -ordeno Adley con vos firme a los guardianes.

- Tu no Belmont -ordeno Yugi por lo que los guardianes se detuvieron un segundo, incluyendo Belmont.

Después de unos segundos reanudaron la marcha.

- Andando -ordeno Yugi a Belmont comenzando a caminar.

- Yugi -hablo Himeko tratando de saber que era eso que pasaba.

- Ahora no Himeko, luego se los explico pero primero tengo que arreglar este asunto -dijo Yugi con una mirada que no daba lugar a réplica.

Una mirada que muy rara ves los demás, incluso Atem, vieron pocas veces.

Himeko asintio por lo que Yugi y Belmont salieron del salón de los portales.

- ¿Que vas a hacer ojichan? -pregunto Jin llamando la atención de los demás en la habitación ya que Tadashi estaba saliendo de la habitación.

- Convocar una reunión de El Consejo urgente ya que se suponía que esto no se sabría hasta que toda esta guerra pasará -explico Tadashi- Quiero saber que explicación me darán a este asunto -.

Dicho esto, Tadashi salió.

Mientras tanto, Anzu volteo a ver a Atem, notando que este estaba demasiado callado al igual que como aquella ves en el tren después de perder el alma de Yugi por lo que supo que no la estaba pasando nada bien.

Yugi y Belmont llegaron al estudio.

- Majutsu-shi...- comenzo a hablar Belmont tratando de disculparse pero Yugi lo detiene.

- Ahórrate tus disculpas por qué en serio estoy muy pero muy molesto... -comenzo a hablar Yugi sin cambiar su tono de voz- La rivalidad que tengas con Adley es una cosa entre ustedes dos pero meterme a mi en medio es ya pasar los límites. No me molestó que la noticia del compromiso entre Adley y yo se supiera si no para los fines en que la utilizaste... -.

Belmont solo guardaba silencio.

- Así que te lo advierto Belmont, que sea la última vez en que me metes en esa rivalidad que tienes con Adley por qué hablaré con El Consejo para que te quiten tu puesto como guardián y hablo muy enserio -dijo Yugi por lo que Belmont supo que Yugi no estaba jugando.

Y más por qué el Consejo le haría caso ya que era el Majutsu-shi por lo que tenía casi más poder que el Lenaga (Tadashi).

- Entiendo, no volvega a pasag -dijo Belmont.