El Majutsu-Shi Itsushiro Saiko y Las Bestias Sagradas

Capitulo 39

Tres días pasaron y Himeko, Yue, Judai, Yusei y los demás se sorprendieron (excepto Atem) al ver que Yugi ya estaba cargando las cajas con las cartas y los libros que estaba analizando en el vehículo para llevarlos a Isao.

- ¿Que está pasando? -pregunto Himeko extrañada.

- Nada, solo le devuelvo las cosas a Isao -contesto Yugi metiendo otra caja a la camioneta mientras Adley le ayudaba con la otra.

- ¿Y...? -pregunto Yue esperando que Yugi dijera algo más.

- Ah, disculpa ando un poco distraído -dijo Yugi tallandose los ojos- ya encontré la información que necesitaba -.

- ¿Enserio? -pregunto Himeko sorprendida por lo que Yugi asintió- Creí que tardarías más -.

- Lo sé pero tuve algo de ayuda -dijo Yugi viendo disimuladamente a Atem, sin embargo, Yue y Himeko notaron está mirada por lo que rápidamente supieron que esa ayuda fue Atem.

- Oh -murmuro Yue para después carraspear- ¿Se las vas a llevar a Isao ahora? -.

- No, Isao salió por unos negocios y regresa hasta mañana -dijo Yugi cerrando la camioneta- Solo las guarde para que la familia no las vea -.

- ¿Y ahora que sigue? -pregunto Yusei.

Yugi les hizo una seña para entrar a la casa nuevamente.

Lo siguieron y entraron al estudio.

- La ventaja es que ya sé cuales son las empresas que Itō utiliza para sus actividades ilegales -dijo Yugi- Sin embargo... -.

- Falta recopilar las pruebas -dijo Adley y Yugi asintió.

- ¿Y que es lo te detiene? -pregunto Judai.

- Las pruebas se tienen que recopilar desde adentro -dijo Yugi para posteriomente sacar una especie de chip y jugar con el entre sus dedos- Mokuba me proporciono un programa que puede hacerlo, sin embargo, alguien tiene que ponerlo en el sistema operativo de dichas empresas para que funcione -.

- Y obviamente no puedes ser tu o ninguno de nosotros ya que Itō ya sabe de nuestra existencia -dijo Yue y Yugi asintió.

Se quedaron todos en silencio hasta que Adley hablo.

- ¿Por qué no se los pides a tus otros amigos? -pregunto Adley llamando la atención de Yugi y los demás- Los que ahora se dedican a ello -.

Yugi, Yue y Himeko después de unos segundos supieron a quienes se refería Adley.

- Tienes razón -murmuro Yugi- Gracias Adley -agradecio para después seguir murmurando- ¿Cómo no se me ocurrió antes? -.

Saco su teléfono para posteriormente realizar una llamada.

- Chicos Hola... oh, me alegro... Una pregunta ¿Se encuentran en Tokio ahora?... Verán, tengo aquí un problema y se que es mucho pedir pero quisiera saber si me pueden ayudar en esto, es demasiado urgente e importante... Si está bien, aquí los espero...-dijo Yugi para posteriomente colgar la llamada.

- ¿Que te dijeron? -pregunto Himeko preocupada ya que puede que sea su única esperanza.

- Ya vienen para acá -dijo Yugi suspirando.

25 minutos en los que tanto Yugi, Yue, Himeko y Adley estaban esperando impacientemente mientras que los demás estaban intrigados por saber quienes eran esas personas.

El teléfono de Yugi vuelve a sonar por lo que este contesta.

- Ya están aquí -dijo Yugi colgando por lo que Yue salió a recibirlos.