Luis no creía que fuera buena idea que le pusieran flores en el pelo, de hecho, después de todas las humillaciones que había sufrido desde que llegó al Nuevo Mundo, o incluso desde que vulgarmente empezaron a llamar a su familia los "McGreen" y trató de escapar de ello al embarcarse en aquella aventura, resultaba evidente que, aunque no fuera con mala intención, aquello lo incomodaba por dentro.
Pocos minutos después, Ángela y María estaban adorando con flores sus largos mechones negros y Olivia y Paul lo miraban fijamente, aguantando la risa entre dientes y viéndolo avergonzarse totalmente, cubriendo su rostro por completo con las manos. Ana limpiaba las flores y les quitaba las espinas o los tallos de las flores para poder decorar sus cabellos.
- Te queda bien, no sufras...- aquello lo avergonzó todavía más.
- No me ayudas, Paul.- ahogó su voz. Este se rio entre dientes.- ¿Acaso se están burlando de mí o qué?
- Para nada...- meneó su mano para restarle importancia al asunto y se rio entre dientes.- Se puede interpretar como que compartimos lecho la noche anterior...- el rostro de Luis se ruborizó por completo.
- ¡E-Eso es burlarse de mí!
- No me estoy burlando...- ahogó una carcajada.
- Te estás riendo.- se quejó.
- En realidad no tiene nada que ver con compartir lecho...- musitó Ana entregándole una flor blanca a Ángela después de quitarle las hojas y las espinas.- Estamos aprovechando tus largos cabellos para acicalarte un poco, no eres capaz de imaginar lo lindo que te ves ahora mismo...- Luis desvió los ojos hacia otro lado.
- Ahora mismo solo me siento humillado...- apartó la cabeza.
- Bueno...- Olivia agarró una de las flores y la acomodó detrás de su oreja.- Pues nos adornamos todas el cabello.- Ángela, María y Ana asintieron con la cabeza al mismo tiempo como si fuera una coreografía.- Y tú también...- sonrió radiante la de mechones jengibre mirando a Paul.
Este se rio entre dientes.
- Si eso ayuda a Luis a calmarse, está bien...- el azabache de ojos grises se lo quedó mirando fijamente.
- ¡Una corona de flores!- exclamó María repentinamente.
- ¡Sí! ¡Sí! ¡Sí! ¡Hoy llevarás una corona de flores en vez de la diadema de oro!
Paul asintió con la cabeza lentamente, y después de acabar de añadir las flores al cabello de Luis, comenzaron a realizar una corona de flores hermosa y de todos los colores que había en aquella pequeña cesta trenzada, mientras el azabache de ojos canela se retiraba a corona de oro con aquellas astas doradas tan majestuosas y que posiblemente pesaran bastante y relajaba el cuello con un par de crujidos y suspiros aliviados. Si ya las muñequeras y las tobilleras de oro que llevaba en su propio cuerpo tenían un peso, que si bien no molestaba, sí se notaba, así como el oro rodeando su cuello y el collar ancho de oro en sus hombros por encima del poncho... No quería imaginar lo que era llevar aquella corona de oro todo el día desde que amanecía hasta que anochecía.
- ¿Qué tal?- despertó de sus pensamientos, enfocando los ojos de Paul, con una bella corona de flores rodeando su frente, con bellos colores verdes de las hojas que no fueron retiradas, blancos, naranjas y rojos de los pétalos...
- Es bonita...- admitió avergonzado.- No está mal...- Ana y Olivia se rieron entre dientes por el rubor en sus mejillas.- No se me da bien halagar...- Paul lo rodeó en un abrazo al que luego acercó al resto de las chicas.
- Me conformo con eso...- besó su frente.
Luis sonrió enternecido por esto y devolvió el abrazo.
Conforme la mañana avanzó, Luis se sentía considerablemente más cómodo con la cuestión de su cuerpo tan descubierto sin el poncho y con aquellas flores en su cabello.
Junto a Paul, Ana, Ángela, Olivia y María, recorrieron el bello contorno de las murallas naturales del territorio. Era la primera vez que hacían aquello todos juntos y se le hacía un poco extraño, aunque ellas juraron que echaban de menos aquellos paseos y recorridos, porque no querían presionarlo a hacerlos hasta que no se sintiera cómodo con el ambiente del imperio.
- Lo que me extraña es la falta de seguridad...
- Oh, Paul puede protegernos perfectamente.- dijo Olivia con completa seguridad, sus ojos verdes centellearon con confianza.
- Sigue herido...- acentuó la cuestión.
- No seas tan exagerado...- murmuró Paul rodeando uno de sus hombros.- Estoy perfectamente, me puedo mover para protegeros.- también rodeó a Olivia.
Ella sonrió, sus cabellos jengibre se acomodaron cuando ella frotó su sien contra Paul.
- ¡Además!- Ángela sonrió ampliamente.- Desde que los invasores se fueron ya no hay peligro. Y dudo que vuelvan.
- Siempre volvemos...- susurró Luis apartando los ojos.- Sobre todo cuando nuestro orgullo es herido... Por alguien a quien se considera débil... No sé dan cuenta del verdadero potencial que hay aquí...
- Y por eso tuvieron que salir por patas...- respondió María.- Como un montón de cobardes...
Paul se rio entre dientes, pero su sonrisa se borró por completo en el mismo momento en el que una fuerte explosión movió todo el suelo como si de un terremoto se tratase, por un momento creyendo que algo iba a caerles encima. Olivia se arrimó un poco más por inercia, María, Ángela y Ana se miraron entre ellas, luego clavando sus ojos en Paul, quien estaba tenso y apretando los labios, revisando a su alrededor, como si pudiera escuchar o ver mas allá de la maleza que los rodeaba. Luis palideció.
- Siempre volvemos...- susurró de manera apenas audible.- Y siempre volvemos con violencia...
- ¿Qué fue eso?- preguntó Ana entrecerrando los ojos.
- Un cañón... Están en la costa...
- ¿En la costa? ¿Y se escuchó así?
Paul rechinó los dientes y emitió un gorgoteo gutural como el de un felino.
- Volvamos. Tengo que encargarme de esto.
No hubo ninguna clase de reproches. En aquellos momentos lo único que podría hacerlos sentir a salvo sería tras los muros imperiales y con el ejército listo para pelear una vez más.
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Con lo bonito que estaba quedando el momento y tuvieron que llegar Jara, Aleix y Bull a arruinarlo 🥺😔
Aquí las opiniones ----------->
Espero que os haya gustado, hacédmelo saber con un voto y nos vemos en el próximo capítulo
Bye~
By Silvia Line
[1043 Palabras]
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75.- No puedo hacerlo (Gay/Homosexual)
RomanceSolo en el momento en el que encontrase a alguien que lo aceptase tal y como era y que no quisiera cambiarlo como todo el mundo estaba dispuesto a hacer. Solo en el momento en el que Luis consiguiera decir que estaba orgulloso de sí mismo y de sus a...