Fabricante de Deseos

Capítulo 6 - Hogar.

La vida es buena, pero no siempre fue así, Alastor aún recuerda cuando Thomas nació, la sensación pesada de su cuerpo temblando mientras sostiene a su pequeño hermano con brazos que apenas podían sostenerlo.

Sus ojos sin lágrimas que derramar y el olor a sangre en la habitación. Su hermano frágil y pequeño, ignorante de todo lo que pasaba a su alrededor, durmiendo tan pacíficamente.

Y el hablo mucho con su madre sobre cómo ser un buen hermano para Thomas, su madre estaría feliz mientras le decía que sería un buen hermano.

Pero esto no es lo que espero, el día que Thomas nació fue el día en que Alastor perdió a su madre y quería odiar a Thomas por quitarle a su madre pero sencillamente no pudo.

— Escucha bien Alastor… en esta vida solo tendrás a tu hermano y a ti mismo, ambos cuídense unos a otros. Se un buen hermano mayor. Te amo, los amo a ambos… mis pequeños, lamento ser una mala madre y tener que dejarlos.

El corazón de Alastor aún tiembla al recordar a su madre y sus últimas palabras. Es doloroso que el día que nació Thomas sea el más feliz y el más triste de su vida.

Perdió a su madre pero obtuvo a Thomas, lo último que su madre dejó en este mundo y Alastor lo iba a cuidar.

Ahora un poco más grande sabe que lo que pasó no fue culpa de Thomas, eso fue culpa de su padre, el hombre que le prohibió a su madre ir al médico y pedir ayuda, el hombre que aún golpeó a su madre embarazada sin pensarlo dos veces, se da cuenta de lo afortunado que es por qué Thomas haya nacido bien, su madre fue una mujer muy fuerte.

Cuando Thomas desapareció su mundo cayó en un espiral muy oscuro y se da cuenta que no quiere vivir en un mundo donde no esté su hermano menor.

— Estoy aquí. — La pequeña voz de Thomas lo hace reaccionar, este lo mira con cuidado, como si pudiera saber que piensa y lo consuela, Alastor no puede evitar abrazarlo.

Thomas devuelve el gesto.

— No dejaré que nadie más te haga daño, te lo prometo.

— Está bien, confío en ti. — Alastor sonríe, es afortunado de tener a Thomas a su lado, a pesar de saber que hace cosas malas aún sea capaz de mirarlo como siempre, hace que el corazón de Alastor se caliente de cariño por su hermano.

Después de rescatarlo Thomas no parecía afectado, Alastor temía que su hermano aparentaba estar bien para no preocuparlos, incluso Louis se le quedaba viendo por ratos.

Thomas se volvió más apegado a ellos. Alastor no sabía cómo asegurarle a su hermano que todo estaba bien. Por otro lado extrañamente se acerca a Louis ahora e incluso este parecía sorprendido por esto.

Thomas no veía nada en sus acciones, literalmente fue salvado de ser usado como los demás niños, estaba demasiado agradecido como para no mostrar gratitud de alguna manera.

Si puede ayudar de alguna manera lo hará, un trauma menos para este niño.

Mientras baja las escaleras Thomas mira a la misma chica de tiempo atrás, está un poco confundido del por qué sigue viva aún. Pensaría que Louis la había matado ya pero no lo hizo, fue sin duda muy extraño.

La chica se asustó al verlo hasta que lo reconoció y sus ojos brillaron, parecía querer llorar.

Thomas miró su cuerpo muy lastimado y a él no le gustaba la tortura en exceso aunque el también recurrió a ella en su vida pasada.

— Espera, déjame ayudarte. — Thomas curó sus heridas, había algunas infectadas y parecían dolorosas.

— M-mátame… — dijo ella y Thomas la miró.