TMNT 2007 (Tú/Raphael). Actualizando :)

Capítulo 29.

(...)

- Vivo más adelante. - señaló Olive.

Donnie sonrió y la dejo caer con cuidado al suelo.

- ¿Dónde estamos?

- En la librería de New Amsterdam.

Donatello introdujo un código en su T-móvil que logró controlar la seguridad del lugar. Abrió la puerta dejando entrar a Olive, quién con una sonrisa entendió lo que hacía.

Miró el mostrador principal de libros que estaba adornado con globos y un gran cartón de El caballero morado.

- Seremos de las primeras personas en adquirir el libro. - dijo Donatello dejando el dinero en el mostrador.

- ¡No puede ser! - gritó mientras brincaba de felicidad y tomaba uno de los libros.

Donatello dejó salir una risa llamando su atención. Olive miró aquel cartón de El caballero morado para luego volver a ver a Donnie, finalmente había encontrado a su caballero.

(...)

Cuando comenzó a besarme entendí la sumisión de la que tanto hablaba papá sobre los seres humanos, había sido una sensación extraña, me sentí tan desmadejado.

Era una lastima que tuviera que irme, por mi habría podido besarla aún más. Pero no mentiré sobre algo, me sentí completamente extraño después de eso, sentía un calor en mi cuerpo y una clase de nerviosismo al pensar en ella.

Mikey se había dormido, a lo lejos podía escuchar a Leo hablar con Splinter y Donatello parecía estar en su laboratorio, podía verse la luz saliendo de el.

Dejé la bolsa con la caja de galletas en la mesa encontrando una carta que llevaba mi nombre escrito.
Mire a mi alrededor y la tomé, entré a mi habitación y cerré mi puerta.

"Raphael:
Gracias a ti y a tus hermanos por su hospitalidad, tuve que irme, uno de mis guardias logró llegar al planeta para buscarme y juntos buscaremos pistas sobre el Krang. En cuanto tenga información espero poder hacértela llegar a ti y a tus hermanos.
Cuídate mucho y suerte
- Mona Lisa".

Me senté en la orilla de mi cama, pasaba mis manos por mis brazos tratando de tranquilizarme.

Un golpe en mi puerta me sacó de mis pensamientos.

- Rapha, es hora de entrenar. - escuché la voz de Leo.

- Ya voy. - respondí.

(...)

Raphael era mi primer beso, jamás había besado a un chico. Antes de Raphael, la idea de besar a un chico me parecía algo asquerosa y es que la mayoría de chicos que había conocido, me parecían insuficientemente maduros.

Pero Raphael era distinto, con el me sentía débil y pequeña, pero a la vez protegida. Esa noche solo me deje llevar por un pensamiento que no podía sacarme de la cabeza, besarlo.

Después de cenar fui hacia mi habitación y me acosté, no podía dejar de pensar en nuestro beso, no me causaba ningún desagrado. Me causaba sentimientos extraños que revolvían mi estómago, solo quería volver a verlo.

- ¡___! - escuché a mi padre gritar desde la cocina - Contesta, es tu amiga Olive.

Con un gateo sobre mi cama me acerqué al teléfono de mi pequeña mesita y contesté.

- ¡Olive!

"- ¡___, dime qué todo lo que sucedió ayer no fue un sueño mío!