Un Ash Más Preparado

¡Adiós Butterfree!

Después de los intensos eventos en el SS Anne, Ash y sus amigos llegaron a una ciudad costera donde se encontraban con un problema inusual: un Tentacruel gigante causando estragos. El grupo decidió investigar y ayudar a los habitantes de la ciudad.

La situación era crítica, con Tentacool y Tentacruel atacando edificios y barcos. Misty, preocupada por los Pokémon y las personas, se adelantó con determinación.

"Misty, ten cuidado," advirtió Brock, mirando cómo Misty se adentraba en el caos.

"¡Debemos hacer algo para calmar a ese Tentacruel!" exclamó Ash, sacando a su Pikachu. "Pikachu, usa Rayo!"

El Rayo de Pikachu impactó al Tentacruel, pero solo logró enfurecerlo más. Justo entonces, Misty notó un pequeño Horsea intentando defenderse de los Tentacool.

"¡Horsea, ven aquí!" gritó Misty, lanzando una Pokébola. El Horsea se dejó capturar sin resistencia, agradecido por la ayuda.

"¡Gran captura, Misty! Ese Horsea va a ser un gran miembro de tu equipo," elogió Ash con una sonrisa.

"Sí, definitivamente. Ahora tenemos un nuevo amigo en el grupo," añadió Brock, asintiendo.

Con la ayuda de los entrenadores locales y sus Pokémon, lograron calmar al Tentacruel y devolverlo al mar. Los habitantes de la ciudad agradecieron a Ash y sus amigos por su valentía y ayuda.

Mientras el grupo descansaba después del caos, Misty miraba a su nuevo Horsea con una sonrisa. "Te prometo que te cuidaré bien, Horsea."

Horsea respondió con un feliz burbujeo, mostrando su gratitud.

"Este lugar es increíble," comentó Brock, observando la costa serena después del caos. "Pero será mejor que sigamos nuestro camino si queremos llegar a Ciudad Azafrán a tiempo."

"Sí," dijo Ash, aún preocupado por la reciente actitud de Charmeleon. "Espero que podamos resolver las cosas con Charmeleon antes del próximo gimnasio."

"Lo haremos, Ash. Solo necesita tiempo para adaptarse a su nueva forma," le aseguró Misty.

Continuando su viaje, el grupo decidió que su próximo destino seria Ciudad Azafran, al ser la ciudad más cercana. Sin embargo, en el camino se encontraron una zona llena de entrenadores liberando a sus Butterfree.

Después de haber pasado un rato en ese lugar junto a su pokémon, Ash pensó seriamente y sintió un nudo en el estómago. "Butterfree, creo que es hora de que encuentres una pareja y seas feliz aquí."

Butterfree miró a Ash con tristeza, pero también con gratitud. Sabía que Ash quería lo mejor para él.

"Es difícil decir adiós, pero sabemos que Butterfree estará feliz aquí," dijo Misty, poniendo una mano en el hombro de Ash.

Brock asintió. "Ash, has hecho lo correcto. Siempre recordaremos a Butterfree como un miembro valioso de nuestro equipo."

Ash abrazó a Butterfree una última vez, sus ojos llenos de lágrimas. "¡Adiós, Butterfree! ¡Cuídate mucho!"

Butterfree se alejó volando hacia el horizonte, uniéndose a su nueva pareja. El grupo permaneció en silencio por un momento, sintiendo la ausencia de Butterfree. Pero sabían que debían seguir adelante.

"Fue un buen compañero," dijo Misty suavemente, rompiendo el silencio.

"Sí, siempre será parte de nuestro equipo," agregó Brock.

Finalmente, después de una emotiva despedida, nuestros héroes llegaron a Ciudad Azafrán. La ciudad, conocida por su poderoso gimnasio psíquico y la Torre Silph, se extendía ante ellos, llena de oportunidades y desafíos.

"¡Ciudad Azafrán! Finalmente estamos aquí," dijo Misty con entusiasmo.

"Sí, hay mucho que explorar y aprender aquí," añadió Brock, observando la gran ciudad con interés.

Ash, con renovada determinación, miró hacia el gimnasio. "Vamos a enfrentarnos a nuevos desafíos y seguir mejorando. ¡No puedo esperar para enfrentar el gimnasio psíquico!"

"Pero antes, deberíamos ir al Centro Pokémon y asegurarnos de que todos nuestros Pokémon estén en plena forma," sugirió Brock. "Nunca sabemos cuándo nos enfrentaremos a otro desafío."

"Buena idea, Brock. Además, así podemos pedir más información sobre el gimnasio psíquico," dijo Misty.

En el Centro Pokémon, la Enfermera Joy los recibió con una sonrisa. "¡Bienvenidos al Centro Pokémon! ¿Cómo puedo ayudarles hoy?"

"Hola, Enfermera Joy," saludó Ash. "Nos gustaría que revisara a nuestros Pokémon y nos diera algunos consejos sobre el gimnasio de Ciudad Azafrán."

"Por supuesto," respondió Joy. "Déjame ver a tus Pokémon primero."

Mientras la Enfermera Joy cuidaba de sus Pokémon, el grupo conversaba sobre sus próximos pasos.

"He oído que la líder de gimnasio de aquí es muy poderosa," comentó Brock. "Se especializa en Pokémon psíquicos."

"Eso significa que tenemos que tener mucho cuidado," dijo Misty. "Los Pokémon psíquicos pueden ser difíciles de enfrentar."

Ash asintió. "Lo sé, pero con la ayuda de todos, sé que podemos hacerlo."

"Además, siempre podemos entrenar un poco más antes de enfrentarnos a ella," sugirió Brock.

Con el ánimo renovado y nuevos desafíos por delante, Ash, Misty y Brock se prepararon para lo que les esperaba en Ciudad Azafrán. La aventura continuaba, llena de emoción, amistad y nuevas metas por alcanzar.