MANDRÁGORA

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Taehyung había llegado a su mansión después del trabajo, no había podido concentrarse como los últimos días en que necesitaba algo, pero se negaba a aceptarlo.  Se molestó demasiado al ver que su esposo no estaba, le había enviado dos mensajes con su hermano SeokJin y no había regresado a la casa. Le estaba haciendo quedar como un completo idiota, en realidad le veían como idiota porque había golpeado a su esposo cuando este solo había hecho lo que la mayoría había deseado hacer que era eliminar a Lee. 

NamJoon le veía sin poder creer lo que estaba pasando en la controlada vida de su hermano, que se divorciara no era el problema, sin embargo el heredero si. — Ve por él, tú. No mandes a mi esposo que él no puede con ese mocoso y para rematar enfadaste a los  Jung, Yoongi está a punto de retirar sus acciones de la empresa.

— Él no sabe obedecer y hace todo lo que le pido que no haga. 

─ Hermano, son dos semanas y tres días que llevas separado de él, has estado de un humor de la mierda, todos están temblando porque cada vez que pasas pareciera que vas a matar a alguien. 

─ No es cierto, solo me enoja que que nadie haga lo que pido.

─ Deja de mandar a intermediarios, dile que lo sientes. 

─ Se lo advertí y me toma como estúpido, no voy a caer en su juego.  ¿Cree que le tengo miedo? Que se olvide de eso... — Se detuvo al ver a Dongpyo con una maleta, este se tensó al ver que Taehyung lo había descubierto. — ¿Qué demonios haces?

— Mi Hyung me ordenó llevarle sus cosas al complejo Jung.

— Tú no te llevarás nada, es más... Dile a tu Hyung que si está dispuesto a seguir con esta estupidez que venga el mismo a ver si puede hacerlo.

— Jefe, yo que usted no lo retaría... Él es una persona muy difícil y...

— ¡Me importa una mierda lo que sea!— interrumpió al pequeño, este se asustó y de pronto un escolta de los Jung entro mostrando una cara enojada.

— Joven Son, es hora de irnos. — dijo llevándose a Dongpyo. Taehyung iba a ir tras él, pero NamJoon lo detuvo.

— Es Lee Junhyuk, es el pupilo de Jungkook, no te atrevas a hacer una estupidez.─ Taehyung  se soltó con fuerza y le vio a los ojos, este le sostuvo la mirada, pero su hermano era un demente y decidió alejarse negando con la cabeza, se sentó en el sofá y le señaló el sillón individual frente a él. Taehyung se dejó caer en el sillón y luego recostó su cabeza en el espaldar y cerró los ojos. 

─ No soporto su irreverencia, su atrevimiento y su poco sentido del compañerismo entre pareja. 

─ Taehyung, tú fallaste primero, debiste decirle lo que ellas estaba haciendo, pero sé sincero... ¿Prefieres a las chicas? ¿Te atraía demasiado esa mujer?

─ No me gustaba, nunca tuve sexo con ella, pero si uno que otro coqueteo y beso... ─ Se quedó pensativo y luego prosiguió. ─ No le di importancia a esa mujer, pensé que... que si ella me besaba tendría una razón para matarla, pero fui estúpido al pensar que... quería verlo celoso, quería saber si en verdad siente algo por mi o es igual que la otra puta.

─ Entonces, ¿Tú lo provocaste? ─ Taehyung asintió sin abrir los ojos. ─ Él te gusta, te has enamorado del chico irreverente, vulgar y atrevido. 

─ Me saca de mis casillas y no sé... No sé cómo lidiar con él y lo que siento. Me es más fácil asesinar a cien hombres con mis manos que poder comunicarme con él. Soy el maldito Capo de esta ciudad y no logro resolver esto. ─ dijo poniéndose en pie, luego se sirvió un vaso con coñac y lo tomó de un solo trago. 

Soy Yerbatero, el dios de las pócimasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora