BELEÑO NEGRO

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Taehyung observaba el cuerpo desnudo de Hoseok sobre su cuerpo, acababa de liberarse en dentro de su delicioso cuerpo, sus manos estaban acariciando los glúteos de Hoseok quien tenía su cabeza recostada en el hombro de Taehyung. Subió sus manos por la espalda, luego acarició su cabello, amaba el aroma de Hoseok y su cuerpo cálido, vio como sus hombros tenían sus mordiscos pues era inevitable no desear devorarlo.

─ ¿Quieres dormir más?

─ Obvio sí... Solo un poco más... Me gusta sentir como tu miembro va saliendo de mi. 

─ Eres un pervertido. ─ dijo dándole una palmada en el glúteo izquierdo. Hoseok sonrió pues con el tiempo había logrado que su esposo hiciera cosas muy atrevidas, Taehyung era muy reservado y en el sexo nunca había sentido la explosión de emociones que sentía con Hoseok. Lo colocó sobre la cama y salió de él, Hoseok estaba dormido, así que decidió ir a trabajar. Su esposo tenía un hermoso vientre y quería que se cuidara, seis meses de embarazo y a veces se ponía muy intenso con el sexo. 

Se duchó y luego se vistió adecuadamente para ir a trabajar, cuando llegó a la cocina para pedirle a las empleadas que le llevaran el desayuno, entonces las escuchó conversar entre ellas. ─ ¿Escuchaste? La señorita Hana está en Seúl... Tal vez el amo vuelva  a tener una aventura con ella.

─ Pueda ser, tal vez así se deshace de ese monstruo y del niño ese recogido. ─ decían hablando de Hoseok y Dongpyo, Taehyung se molestó por aquellas palabras pues para él Hoseok era todo lo que necesitaba. ─ Él se veía feliz con la señorita Hana, en cambio con ese niño siempre debe estar alerta. 

─ Es cierto, el Amo Kim merece una mujer sofisticada y hermosa no a ese chico. 

─ Ustedes necesitan un poco de respeto a sus amos. ─ dijo Taehyung entrando a la cocina. Las mujeres se tensaron y se giraron hacia él. ─ Si no las despido es porque mi mayordomo les recomendó, además tienen años sirviendo a la familia Kim, sin embargo espero que cuiden de mi esposo y mis hijos, Dongpyo no es un recogido. Agradezcan que no les escuchó, ahora preparen el desayuno de mi esposo y llévenlo a la habitación, si algo les pasa yo las mataré. 

Las dos mujeres asintieron y empezaron la preparación del desayuno, cuando Taehyung salía vio a Dongpyo subiendo las escaleras, se preocupo que hubiese escuchado algo así que se acercó a él. ─ ¡Buenos días, hermano mayor!

─ ¡Buenos días! ¿De dónde vienes?

─ Del jardín... Estaba recolectando hierbas. 

─ ¿De dónde?

─ Pues del invernadero de mi hermano mayor. Desde que vino aquí empezó a plantar diferentes hierbas. ─ Taehyung sonrió pues su esposo era una caja de sorpresa. Se despidió de Dongpyo y fue a la empresa, más no sabía que su esposo recibiría una visita muy especial. 

Taehyung iba con sus escoltas cuando Jungkook le llamó, sonrió al escuchar la noticia y le ordenó a su chófer. ─ Vamos al club. 

─ Si, Señor Kim. 

Taehyung fue al club que poseían en los barrios bajos de Seúl, cuando llegó observó a los hombres atados a las vigas del techo. Jungkook le entregó unos documentos donde estaban los informes de los movimientos de sus empresas y los nombres de sus socios. SeoJoon y Woo se colocaron en sus posiciones por si habían ataques sorpresas. ─ Esto se lo iban a entregar a Mackenyu,  tienen la lista de los socios y solo pudo haber sido entregado por alguien cercano. 

Taehyung asintió y se acercó a uno de los hombres, lo agarró del cuello y este tembló pues la fama del Capo Kim de tener una fuerza sobre natural le precedía. ─ Dime, ¿Crees que puedes solo quedarte callado?

Soy Yerbatero, el dios de las pócimasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora