Soy Yerbatero, el dios de las pócimas

DULCAMARA

─ Ya te dije, yo también puedo decidir. ─ Hoseok se arrodilló frente a él y quitó las manos de Taehyung, abrió la cremallera y sacó el miembro que amaba tanto. ─ ¡Mierda! Eres demasiado grande y exquisito.

─ Hoseok...

Hoseok sonrió apretando el miembro de su esposo, este gimió cuando sintió la brusquedad del tacto de su pequeño esposo. Luego Hoseok lamió la punta y le preguntó: ─ ¿Estás listo para esto?

─ Sí. 

─ ¿Entonces por qué esperar?

Hoseok engulló el miembro de Taehyung, sus manos cubrían lo que no alcanzaba, además apretaba sus testículos. El mayor sentía que iba  a morir de placer cuando vio sus ojos brillantes que le veían mientras chupaba la punta de su pene, lo soltó pasando su lengua sensualmente por la punta y luego bajó a sus testículos, los lamía y succionaba luego volvía a su pene. 

Taehyung amó aquella felación, jamás nadie le había dado tanto placer, amaba ver como tomaba más de lo que podía y sus ojos le veían con aquel deseo como nunca lo habían visto. Hoseok sintió el semen de Taehyung en su boca y lo tragó completo, pero siguió masturbándolo mientras su mejilla descansaba en el muslo de Kim.  ─ Eso fue... Intenso. 

─ Delicioso, pero ahora tengo ganas de que me tomes. 

Taehyung sonrió, lo tomó del cabello y lo besó, sus lenguas se enredaron. Lo levantó hasta lanzarlo a la cama, ver a Hoseok desnudo era un aliciente demasiado grande, vio su vientre más grande y fue más excitante saber que él había embarazado a aquel chico tan hermoso. Taehyung sonrió y lo puso en cuatro, Hoseok se agarró fuerte de las sábanas cuando la lengua de su esposo y sus dedos empezaron a preparar su ano. ─ ¡Aghhh! ¡Así más!

Taehyung sonrió y siguió en su labor hasta que estuvo listo para recibirlo, entonces alineó su miembro y empujó con fuerza en su interior. Sus manos agarraron sus caderas con fuerza y vio como sus dedos quedaban pintados en su piel, empujó más dentro de él torturando un punto en su esposo que lo hacía gemir y lloriquear pidiendo más. 

Ambos cuerpos sentían las descargas de energía placenteras, el miembro de Kim era apretado deliciosamente por el interior de Hoseok, parecía que estallaría en su interior en cualquier momento. Sus cuerpos estaban cubiertos de sudor y chocaban uno con otro, los sonidos obscenos de sus cuerpos enredados se escucharon en la habitación. Hoseok gemía amando aquel sonido placentero y cuando no pudo más se liberó sobre las sábanas. 

─ ¡Aghh más fuerte! ¡Lléname todo por dentro!

─ Es lo que más deseo. 

Dijo mientras sentía que ya no podía más, se liberó en su interior y Hoseok cayó en la cama rendido. Taehyung no dejó de llenarlo hasta la última gota, después lo besó por toda la espalda hasta morder sus glúteos. ─ Estos son deliciosos. 

─ Pero no puedes comerlos mientras duermo. 

─ Siempre duermes después del sexo.─ Taehyung fue por unas toallas húmedas y le limpió las piernas y el vientre. Taehyung lo acomodó en la cama y luego regresó para acostarse junto a él, le vio dormir y por fin respiró con tranquilidad. Hoseok era alguien que se había metido en su sangre y no podía dejar de pensar en él. 

Al amanecer, Hoseok estaba sentado en el balcón solo con una camisa blanca de Taehyung, sus pies estaban sobre su silla lo cual dejaba ver sus hermosas piernas. Tomaba café mientras veía el hermoso campo que habían creado para él. Taehyung se levantó solo en bóxer y se acercó, le tomó del cabello para verle el rostro y lo besó. Hoseok sonrió y mordió sus labios mientras se separaban.