Mi lindo demonio

XX

Rober se encontraba en la iglesia, rezando de rodillas al Jesús crucificado que se encontraba colgado perfectamente.

Vista divina para algunos y para otros algo sin importancia.

Pero el hombre que se encontraba solo en la iglesia oraba, cosa que nunca había hecho.

Robert tenía pesadillas constantes con el demonio, incluso con sólo cerrar sus ojos lo podía llegar a ver.

Pero el sacerdote de la iglesia en la que se encontraba le había ayudado.

Le había dicho cómo destruirlo, como matar a Lucifer.

Tenía todo listo en su casa, solo debía de buscar el momento adecuado.

Y matar al hombre que traicionó a su padre, el que nunca debió salir del infierno.

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Francisco estaba estresado, no encontraba ningún trabajo, por alguna razón siempre le decían que ya estaba ocupado el puesto o que no necesitaban a nadie.

Visitaba por ratos a su hermana la cual seguía en el coma inducido.

Lo único bueno era que Francisco seguía siendo responsable de él económicamente, pero tampoco era tan agradable.

Lo que no sabía el humano era que el demonio se había encargado de que nadie lo contratara, al no contar con un trabajo no se podría ir de su casa.

Y lentamente estaba convencido a Francisco de que debía volver a sus estudios.

Así sería mucho más fácil encontrar un trabajo a futuro, él no tenía problema en pagar la carrera y mucho menos tenerlo en casa.

Pero no dejaba de sentirse un abusivo mientras estaba ahí.

Recompensando lo que hacía Esteban, el humano se levantaba temprano, le hacía de desayuno e incluso limpiaba la casa.

Bueno eso era antes de que Esteban contratará personas para el aseo, recalcando que él debía cuidar esas lindas manos.

Los sentimientos que habían desarrollado ambos se encontraban en una burbuja a punto de explotar.

Ellos lo sabían.

Los roces de manos, las caricias, incluso llegaron a bailar en mitad de la sala y cuando estaban a nada de besarse se escuchó el golpe seco de Rafael en el segundo piso, Francisco salió corriendo en la ayuda de su hermanito el cual ya estaba llorando a mares y con un chichón en la frente.

Esteban apretó el puño con frustración, estuvo a nada de besarlo.

Subió y ayudó a calmar al niño el cual quiso dormir con Francisco esa noche.

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Juani estaba enojado, ¿Motivo? En medio de su clase de psicología orgánica 1, le llegó una notificación de su novio, alias “el tacaño” besando a una mujer en una fiesta.

Odiaba ese maldito perfil de Twitter, malditas niñas sin vida que solo hacían joderle la vida a los demás.

Ahora mientras caminaba por los pasillos de la enorme universidad donde se encontraba, solo miraban como algunos se reían en su cara o lo miraban con lástima.

No le dolía para nada el engaño, se sentía humillado y abandonado.

Francisco dado de baja y Matías yendo cuando le daba la gana, [Enzo le pagó a la maestra para que me pasará las respuestas del examen.] Matías había sacado la lotería con ese hombre.

Blas iba a ir por él y le urgía que cuando saliera de la universidad el ya se encontrará ahí.

Pipe gritaba su nombre,pero él solo se dedicaba a caminar más rápido e ignorarlo.

Al llegar a la puerta no encontraba ningún auto lujoso que diera indicios de que fuera Blas.

Iba a seguir su camino cuando siento como jalaban su mano y lo giraba con fuerza.

El puño que se estampó en la cara de Pipe no solo le dolió a Pipe.

Sus nudillos dolían al igual que su muñeca.

—— Con qué derecho vienes a tocarme. ——

—— Déjame explicarte las cosas. ——

—— Y quien te las pidió. Olvídalo, tú y yo terminamos. ——

—— Mi amor. ——

—— No me llames mi amor, yo no soy tu amor. ——

—— Juani, solucionemos esto, ¿Si? ¿Quieres que me arrodille y te pida perdón? —— sin dar tiempo a respuesta el hombre se arrodilló y abrazó las piernas de Juani.

Caruso no encontraba palabras para expresar el enojo y la terrible humillación que sentía en esos momentos.

—— No, ¿Qué haces? Ponte de pie, recoge la poca vergüenza que te queda y pierdete. ——

—— Pero yo te amo. ——

—— Menos mal lo haces. ——

—— Lo digo enserio. ——

—— Yo también. ——

El rugido de un carro se escuchó, lo cual llamó la atención de todos los que se encontraban viendo la escena.

Un Rolls-Royce Droptail rojo se estacionó frente a la multitud y de inmediato Juani se soltó del agarre de Pipe y salió corriendo hacia el carro.

Prefirió saltar la puerta y entrar al carro.

—— Tenemos prisa. —— más que una pregunta era una burla lo cual solo se ganó una mala mirada de Juani.

Mientras el carro marchaba a gran velocidad por las calles argentinas una figura sospechosa entraba al hotel donde se hospedaban los tres demonios.

Pero ninguno de los demonios se encontraba ahí.

O pero es que ese ángel no va por un demonio, va por los humanos que sacaron a los demonios del infierno.

Va por Matías quien se encontraba en la azotea del edificio viendo el lindo atardecer que bañaba las calles de Argentina.

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Chaito
Mua 💋