4 | Relaciones

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Omnisciente

Después de esa charla entre Ushijima y Harada, Semi se empezó a dar cuenta que su compañero de equipo mirabas más a su amiga y alguna que otra vez lo veía susurrando algo con Tendō mientras la miraban.

Así que en un entrenamiento decidió preguntarle a él peli rojo si es que estaba pasando algo.

—Satori —dijo Semi acercándose a él mientras tomaban agua—. ¿Puedo preguntarte algo?

—Ya lo hiciste —bromeo—. Dime.

—¿Pasa algo entre Ushijima-san y Harada? Últimamente los veo susurrar sobre ella.

Tendō no esperaba esa pregunta, de hecho, se quedó pensando en que responder.

—La verdad... —Semi mira atento—. Es que dentro de poco es mi cumpleaños y la quería invitar a Harada, ya sabes yo estoy bien con ella, pero quería preguntarle a Wakatoshi si no le molestaba —dijo con una sonrisa.

—Ah, perdón por preguntar —dijo mirando al suelo.

—No pasa nada, sé que quieres que Harada este bien —Tendō puso su mano en el hombro del colocador—. De todas maneras, ella decide que hacer, ¿no?

—¿Estas insinuando que yo no dejo que hable con Ushijima-san? —pregunta Semi molesto.

—Solo es una observación —dice Tendō serio, eran muy pocas las veces que este estaba así, daba miedo.

Por suerte el entrenamiento transcurrió normal, Semi decidió no comentarle a Harada nada de lo que había ocurrido. No quería quedar como un sobreprotector, aunque lo fuese.

—¡Harada-chan! —grito Tendō.

—Satori —dice calmada—. ¿Qué pasa?

—Te quería invitar oficialmente —parecía que estaba en una publicidad— a mi cumpleaños —tenía una sonrisa muy amplia—. Va a ser en mi casa, va a ser una fiesta así que habrá alcohol y eso.

—Sabes que no puedo tomar mucho alcohol —le dice Harada mirándolo mal, sabía que la quería emborrachar.

—Tomaras lo que quieras —dice levantando las manos de manera inocente—. Luego te mandare un mensaje con la hora y eso, espero que me subas una historia de feliz cumpleaños.

—Sí —dijo riendo. Tendō se fue.

—¿Ese era Satori? —Semi apareció detrás de Harada.

—Sí, me invito a su cumpleaños, ¿a ti igual? —Semi asintió—. Tendré que comprar ropa.

—¿Qué? ¿Iras? —pregunta sorprendido.

—Sí —dice mirándolo raro—. Es su cumpleaños, ¿por qué no iría?

—No por nada —responde nervioso.

Luego de eso tuvieron matemáticas, Semi estaba reprobando esa materia por lo cual se quedaba en los recreos para pedirle ayuda a los profesores.

Harada quien tranquilamente estaba sacando algo de la máquina expendedora es interrumpida por una gran sombra detrás de ella que le tapa el sol.

—Harada —dice aquella voz que alguna vez la volvió loca, bueno tal vez la seguía volviendo loca, (de otra manera) ¿quién sabe?

—Ushijima, no vengas así de repente —dijo con el ceño fruncido y sin el apodo del otro día.

—¿Iras a la fiesta de Satori? —pregunta sin mirarla, tenía miedo de que dijese que no, tal vez ahí tendrían más chances de hablar... si hablar.

—Obvio —respondió—. Supongo que tú también iras —que incomoda que era esta conversación.

—Sí... Estoy feliz de que vayas.

—Bien. Me alegra —se miraron a los ojos por un instante, como si volvieran al año pasado a aquellos momentos donde todo estaba bien, si tan solo—. Nos vemos —dio media vuelta para irse.

—Sí —respondió tarde, se había quedado embobado viéndola.

Tal vez después de todo podían ser buenos amigos, bueno si no fuera porque...

—¿Qué hacías hablando con Ushijima? —pregunta Semi molesto, Harada había tardado en notar que estaba ahí.

—Me pregunto si iba a ir a la fiesta —respondió tranquila, no quería decirle que se habían "amigado".

—¿Y por qué hablaste con él? —dijo molesto, Harada lo miro sorprendida.

—Yo puedo hacer lo que quiera Semi —respondió con cara de asco—. Hablamos y arreglamos las cosas, nada del otro mundo, yo me preocupo de mis relaciones, no tienes por qué meterte.

—Harada... —dice con miedo—. Perdón yo no quería.

—Déjalo Semi, nos vemos —dijo para subir al salón a buscar su mochila e irse a casa, no quería discutir con él, menos por otra persona.

Mierda.

Semi no la fue a buscar, no insistió, sabía que su intervención le había molestado a su amiga y que si iba a buscarla sería peor, él sabía que a Harada le gustaba estar sola después de una discusión, no sería bueno que hablen enojados y se digan cosas que no deberían.

Por otro lado, Harada había tomado su mochila con furia, "¡¿Qué mierda le importa?!" se preguntaba molesta, odiaba que cualquier persona se meta en su vida y en sus decisiones. Si ella quería volver a hablar con Ushijima lo haría. Camino a su casa a paso fuerte, estaba enojada y quería mandar a la mierda a su amigo.

—Llegue —dijo desanimada entrando en su casa, no obtuvo repuesta, eso significaba que estaba sola. No era algo fuera de lo común.

Ushijima le había enviado un mensaje por Instagram, lo había desbloqueado.

"Vi que discutiste con Semi, lo siento"

Se preocupo, no quería que Ushijima piense que había sido culpa de él (aunque de cierto modo lo era).

"No te preocupes, es un imbécil"

Decidió ir a su gimnasio y golpear aquel saco de boxeo hasta que estuviese satisfecha, se puso su ropa de entrenamiento y vendo sus manos, no quería lesionarse antes del torneo, sería algo muy malo.

Mientras golpeaba el saco pensaba en todas las veces que Semi le había reprochado algo, ya fuese de Ushijima o de otra cosa que a él no le gustase, pero en medio de todo eso también recordó lo mal que la hizo sentir Ushijima. Golpeaba el saco cada vez más fuerte, la música de sus auriculares no le permitía escuchar nada de afuera así que estaba despreocupada de todo, hasta que alguien le quito el auricular.

—Te estoy hablando —era su padre, estaba molesto porque no la había escuchado, tenía auriculares, ¿acaso no sabe que es imposible que lo escuche?

—Estaba escuchando música —contesta con un tono de obviedad—. ¿Que necesitas? —trata de preguntar amablemente.

—Que dejes de practicar, va a venir gente a casa, no hagas ruido y ve arriba —dice devolviéndole el auricular.

No hay día que no venga gente a esta casa, parece hotel.

Y así subió a su cuarto, se dio un baño y se recostó en la cama, Ushijima no le había respondido. Se quedó mirando su fondo de bloqueo, era una foto de ella de frente parada en el ring mientras levantaba la mano victoriosa, la foto se la había saco Ushijima, jamás se lo había dicho a Semi sabía que se iba a enojar, solo la tenía porque era una muy buena foto...

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Hasta acá el capítulo de hoy!!

Si les gusto dejen una ⭐️.

—H.

𝐍𝐎 𝐄𝐍𝐓𝐈𝐄𝐍𝐃𝐎 - Ushijima Wakatoshi ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora