Como cada mañana, Jungkook se despertaba apenas el sol comenzaba a salir, aún había demasiado debate en su cabeza.
Miró por las ventanas de la habitación como el aire hacía danzar los girasoles, mientras Jimin descansaba aún. Llevaba días decidiendo que podía ser más prudente en esos momentos de incertidumbre. Aquella mañana, mientras veía el amanecer bañando las enormes flores e iluminando poco a poco el rostro dormido de su omega, lo decidió.
Se sentó en la orilla de la cama y acarició la piel
nivea de Jimin. El omega era todo un dormilón, hacía falta mucho más para despertarlo, así que acercó su rostro y plantó pequeños besos en el.Jimin comenzó a removerse, hubiera estado molesto si el aroma adictivo del alfa no hubiera llegado intensamente a su olfato. Sonrió con los ojos aún cerrados y disfrutó de las caricias mañaneras que estaba recibiendo.
—Solo un poco más—se quejó haciendo pucheros. Estaba cansado, llevar a un enorme cachorro dentro de él, era un trabajo arduo.
—Despierta dormilón.—murmuró Jungkook atacando su cuello con besos. Jimin comenzó a reír, su cuello era muy sensible.
—Está bien, está bien. Ya estoy despierto.—musitó entreabriendo los ojos.—Es demasiado temprano.
—Tengo que ir a casa de Nam.—dijo Jungkook aún enterrado en su cuello.
—No. Quédate conmigo.—Jimin lo rodeó con sus brazos y lo apretó fuerte contra el.
—¿Eso quieres?
—Si.—asintió apretándolo más.
Jungkook salió de su escondite y acercó sus labios al omega.—Te amo.—dijo metiendo su lengua y succionando los rechonchos labios.
—Yo también te amo mucho.—musitó el omega cuando su boca fue liberada.
—Entonces, cásate conmigo.—pidió finalmente el alfa mirando sus ojos miel.
Jimin se quedó embelesado con aquella propuesta.
Jungkook metió la mano debajo de su almohada y sacó una pequeña caja.
—Pronto. Cásate conmigo.—murmuró abriendo la pequeña caja y mostrando un anillo platinado.
—Jungkook...—balbuceó el omega conmovido mientras sus ojos se llenaban de lágrimas.
—Tengamos una enorme familia. Voy a protegerte con mi vida Jimin. No voy a garantizarte nada, solo que voy a protegerte con mi vida. Por favor...se mío.
—¡Si!—sollozó el rubio.—Tuyo.—y se abalanzó al alfa desbordando más lágrimas de felicidad.
—Anda, usa tu anillo.—dijo el pelinegro sacando la joya de la caja y acomodándola en su dedo.—Tenemos que ir a decírselo a todos.
—¡Sí!—brincoteo en su lugar el rubio mientras se limpiaba las lágrimas con el dorso de la mano.—Iré a ducharme.
Jimin salió disparado de la cama.
Bien, lo había hecho. Finalmente después de días de debatirse el asunto, Jungkook decidió que no había vuelta atrás. No estaba dispuesto a dejar ir lo que más lo hacía feliz en la vida. Quería que Jimin fuera suyo y no iba a renunciar a él. Así que escondió el anillo que había estado guardando por días, debajo de la almohada y después de meditarlo mientras veía el amanecer inundar la habitación. Lo hizo.
Tiempo más tarde, se dirigieron a casa de los Kim tomados de la mano.
—Amo mi anillo.—dijo Jimin emocionado extendiendo su mano—pero te amo más a ti.
—Me costó 15 mil dólares.
—¿¡Queeeeeeeé?—Jimin se detuvo atragantándose con su propia saliva.
El alfa carcajeo fuerte.
—¡Jeon Jungkook!—pataleo el rubio.
—Es broma nene, es broma. No te pongas gruñón.
—Menos mal.—Jimin tocó su pecho con la mano aliviado.
Por supuesto que el anillo le había costado un poco más, pero eso Jimin no tenía que saberlo. Jungkook estaba dispuesto a darle todo a su lindo omega, aunque este se negara.
Desayunaron con los Kim y Jungkook les anunció que era oficial, se casarían lo más pronto posible.
—¡Felicidades!—chilló Jin emocionado.—Tenemos que organizar una hermosa boda. Buscaré un organizador de bodas. Ji Ah lanzara flores por todo el camino con un hermoso vestido lleno de tul.
Jimin no creyó poder sonreír más, la felicidad se desbordaba por cada célula de su cuerpo. Al carajo con una enorme boda, el solo quería una con Jungkook pero no se atrevió a quitarle la emoción al omega castaño.
—Anda, vamos. Podemos comenzar a buscar la temática, los colores.—Jin levantó a su pequeña hija y luego tomó de la mano al omega para llevarlos consigo.—¿Qué colores te gustarían Jimin?
—Entonces te decidiste.—musitó Nam dándole un sorbo al café cuando el murmullo de los omegas desapareció del lugar.
—¿Qué se supone que debo hacer? Tú mismo lo hiciste, te arriesgaste y ahora tienes una familia. Eso quiero yo.
Nam asintió.—Si lo piensas detenidamente, ambos estamos quitándole el poder a Do Yun de controlar nuestras vidas. Ese pensamiento ha rondado mi cabeza desde que me decidí por mi esposo. Ya nos ha quitado antes algo valioso y crecimos creyendo que no debíamos tener algo más en nuestras vidas que pudiera quitarnos. Vivo cagado de miedo, no voy a mentir.
—Lo estoy, por primera vez he tenido miedo. Incluso de morir.
—Si lo piensas bien, yo le arrebate algo valioso. Lo único bueno que ha podido hacer en toda su miserable vida.
—Lo hiciste, ahora ese hijo de perra está completamente solo.
—Hazlo Jungkook, quítale el poder. Me levanto todos los días con ese mantra. Los pensamientos de perderlos no se irán de tu mente pero cuando veas la cara de tu omega y la de tu hijo, todo mejorará. Si Jimin quiere quedarse a tu lado, entonces tómalo.
—Jimin quiere tener una familia enorme. ¿Sabes lo ansioso que me pone eso?—Jungkook sonrió.
—Puedo imaginarlo. Hubiera renunciado a la necesidad de venganza, pero esto se convirtió en una cacería. Si nosotros no lo jodemos, él vendrá a hacerlo. No podemos hacer nada para resolverlo.
—Lo haremos. Pagaría por ver la cara de ese bastardo ahora.
—Buscará la forma, estoy seguro de que está buscando la forma de devolvernos el golpe.
—El maldito limpio todo para no levantar sospecha. La compañía de transporte que llevaba a los omegas estaba asociada a él. Si tan solo Yoongi hubiese hecho volar ese tráiler, no le iba a ser tan fácil.
—Por eso se está tomando el tiempo. Do Yun le teme más a que descubran que es un maldito traficante de personas y podrirse en la cárcel.
—Retomaré el trabajo a partir de mañana.
—¿Tú omega estará bien? Seguro estará molesto.
—Hablaré con él, es algo que tiene que hacerse.—dijo levantándose de la mesa—Además, no pasará de que enseñe sus colmillos molesto a todos. Si eso sucede, dale a Hoseok un pequeño tip...dile que corra. Afortunadamente Jimin no podrá alcanzarlo ahora que su vientre está más grande.
Ambos alfas estallaron en risas.

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Monster in love
FanfictionJimin sueña con ir a Disney, es un omega sencillo y optimista con una vida tranquila y llena de color. Hasta que conoce a Jungkook, un alfa misterioso con muchos secretos oscuros. ¿Podrá Jimin sacar a Jungkook de la oscuridad o serán sus colores dev...