Gabriel me lleva de vuelta al auto, entra y arranca el motor sin decir nada.
- Oye, ¿por qué nos estamos marchando así? ¡Ni siquiera hemos esperado a Ace!
Ignora mi pregunta y empieza a conducir.
- Esa mujer ha sido bastante grosera. Lo que es correcto para una persona, no siempre lo es para otra -mascullé.
Gabriel me mira, pero no dice nada. En todo caso, parecía confuso por primera vez.
- ¿Estás bien?
Aprieta la mandíbula, pero no dice nada.
- Gabriel, por favor háblame. ¿Qué pasa?
- No es asunto tuyo.
Esa respuesta fría y cortante es lo único que me dice durante el resto del trayecto. La cena es igualmente silenciosa. En cuanto termina de cenar, sale del comedor sin decir nada.
¿Por qué me molestaba tanto? No es que fuera su prometida. Ni siquiera éramos amigos, sin embargo, que no me hablara para nada.... dolía.- ¡Ey!- Ace entra con una sonrisa amarga -¿Gabriel te está ignorando?
- Apenas me habla desde que dejamos el circuito de carreras.
- No te preocupes, se le pasará. Además, no está enfadado contigo.
- Entonces, ¿con quién lo está? ¿Sabes a qué va todo esto?
Aparta la mirada y se frota la nuca.
- No me corresponde hablar de ello. Seguro que te lo contará cuando esté preparado.
Esa noche, me quedo mirando fijamente el techo.
- Giulia.... Angelo.... están relacionados de algún modo.... ¿podría ser su hija? Si es así, tal vez forma parte de los esfuerzos de Angelo por desestabilizar el control de Gabriel sobre la familia Bennet.
Estos pensamientos llenan mi cabeza mientras doy vueltas en la cama toda la noche. Por la mañana, busco a Gabriel con la esperanza de hablar con él sobre lo ocurrido. Cuando estaba a punto de doblar la esquina del vestíbulo, lo escucho hablar con alguien.
- Pero ¿estarás bien? -Me acerqué silenciosamente- Sé que a tu familia no le ha ido muy bien últimamente. Si hay algo que pueda hacer...
- No se preocupe señor. Este trabajo ya es bastante bueno -dijo uno de sus hombres- Puedo poner comida en la mesa y pagar las facturas médicas de mi esposa gracias a usted.
- Rezo porque se mejore pronto. Salúdala a ella y a los niños de mi parte.
- Se lo agradezco. Nos vemos mañana por la mañana.
El hombre cierra la puerta tras de sí, y Gabriel deja escapar un profundo suspiro.
- Gabriel parece preocuparse de verdad por los miembros de su familia. Me he dado cuenta de que ellos lo admiran- susurré para mí misma.
En cuanto doblo la esquina, Gabriel endereza la postura.
- Veo que te has levantado temprano.
- Quería hablar contigo.
- Eso tendrá que esperar. Tengo asuntos que atender.
Se marcha y le sigo con la mirada.
- Estás preocupada por él, ¿verdad?- Veo a Ace dirigiéndose hacia mí.
Suspiro y me froto la cabeza- No puedo evitarlo.
- ¿Quieres seguirle?
- ¿Qué?
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Aliada con la Mafia #1
RomanceKatherine Bailey, una joven que anhela que en su aburrida y patética vida suceda algo impactante. Tan grande fue su deseo que el destino la puso en el camino de Gabriel Bennet, un joven y apuesto mafioso quien le propone un trato "Hacerse pasar por...