Sea of love. [Armin Arlet]

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V I O L E T
Probablemente no lo vuelva a ver, ya sabía que tenía que evitar aquellos lugares que significan algo para nosotros, pensé mientras ponía la mesa.

—Yo digo que te quedes una temporada más Vio—Jack me hizo un pucherito causando que apreté sus mejillas.

—Papá terminaré de estudiar y volveré te lo prometo— sus ojos se llenaban de lágrimas mi corazón se estaba destrozando. —Papá aún me falta mucho tiempo para irme no te pongas triste antes de— el me abrazó.

—¿Y si nosotros vamos contigo mientras estudias u cuando termines tus estudios regresamos juntos?— Ellionor servía la cena junto a Hanna y su esposo.

—Tienes que consultarlo con Ellie— sonreí enternecida mientras Adrien dormía en el sofá rodeado de cojines por si se giraba y Jack no estaba cerca para sostenerlo.

—Yo apoyo la moción, debe ser excitante conocer un país nuevo— sonrío ella.

—Bien, entonces haré todo lo que esté en mis manos para que vayan conmigo esa temporada ¿vale?— Jack como un niño pequeño se emocionó y me estrujó entre sus brazos.

Pasamos a la mesa Adrien dormía en los brazos de Ellionor mientras cenábamos, Hanna se veía algo tensa y de pronto cuando casi todos estábamos terminando de comer habló.

—Se que es repentino— ella tomó la mano de su esposo. —Pero queremos compartir la noticia con ustedes ya— yo la miré confusa.

—Pronto seremos padres— anunció su esposo causando que Jack los felicité al igual que Ellionor yo me quedé en shock unos segundos procesando todo lo que había escuchado.

Sonreí cuando me di cuenta que unas lágrimas cayeron de mis ojos, me sentía orgullosa de Hanna, mi pequeña Hanna de pronto todo lo que pasamos juntas comenzó a correr por mi mente eran recuerdos nostálgicos pero felices.

—Serán unos excelentes padres— Note las lágrimas en los ojos de Hanna ella parecía que había conectado con mis sentimientos.

De pronto la charla giraba en los antojos, en los cambios en el cuerpo, las náuseas remedios caseros mientras meditaba que Hanna había crecido junto a mi ¿Acaso estoy muy atrasada? ¿O ella muy adelantada? Me cuestione.

Me quedé sentada allí, mirando cómo se ponía el sol, y no pude evitar sentir una fuerte punzada de tristeza y arrepentimiento. Todos estaban avanzando con sus vidas, casándose y teniendo hijos, mientras yo seguía atrapada en mi pasado, aferrada a Armin, a pesar de que él me había hecho tanto daño. No podía evitar hacerme preguntas y repasar todo lo que había sucedido entre nosotros. ¿Estaba desperdiciando mi vida? ¿Había perdido oportunidades por aferrarme a alguien que quizás ya no me quería? Me sentía sola y confundida.

Atrapada entre los recuerdos de lo que solíamos ser y la incertidumbre del presente. Me sentía como si estuviera perdiendo los mejores años de mi vida, atrapada en un círculo vicioso de dudas y arrepentimientos. Lo peor de todo era que no sabía cómo salir de esta situación. Sentía que no tenía control sobre mis emociones hacia Armin.

Aunque lo odiaba con todas mis fuerzas por cómo me había tratado, todavía seguía queriéndolo. Seguía pensando en él a todas horas, reviviendo en mi mente todas mis experiencias con él. Era como si estuviera atada a él por algún tipo de hilo invisible. Sabía que necesitaba superarlo, pero no sabía cómo. Se sentía como si estuviera en un callejón sin salida...

De pronto unos golpes en la puerta me sacaron de mis pensamientos, una invitación yacía en la mano de Jack.

—Violet ha llegado esto para ti— me la entregó y yo la tomé. —¿Estás bien hija?—

—Claro papá, estoy feliz por Hanna, me ha tomado por sorpresa es todo— sonreí abriendo el sobre.
Era una reunión para los soldados activos para el momento del retumbar estaban invitados a oír en primicia aquel discurso de paz con un banquete de cortesía.

—¿Te llegó a ti esta invitación?— se la entregué a Jack.

—Si, aunque no sé si participé— respondió Jack. —Muchos de mis compañeros ya murieron ese día  Ellionor no irá al menos, quizás sea bueno que vayas muchos de tus amigos de seguro participarán y te aseguro que será un capítulo a concluir con esto— miré a Jack nerviosa.

—Tienes razón, iré— quizás era un capítulo que merecía cerrar de forma apropiada.

Me puse de pie abrace a Jack y el acaricio mi cabello su cabeza se apoyó sobre la mía y compartimos un momento en silencio pero fue suficiente para sentirme recargada.

—Si tienes que regresar llorando de esa fiesta para que puedas seguir adelante papá te esperará para limpiar tus lágrimas—

—Ya no soy una niña Jack...—

—Siempre serás la niña de mi calendario que nunca crece— beso mi mejilla y acomodo un par de cabellos tras mis orejas.

—Te amo papá— el apretó mi nariz.

—Y yo a ti mi princesita—