Capítulo 5

365 66 94
                                    

Mucho gusto - Canserbero



¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.



Capítulo 5: Te digo un secreto, Osmel, me tienes harta.


El avión aterriza en medio de la pista en yo no sé dónde. El Sol ya se escondió en su totalidad, un cielo lleno de estrellas me recibe.

Cuando llego al piso unos guardias me escoltan hasta una limusina. Chamo en serio, me siento una celebridad.

El camino es algo largo, una hora quizá, o más. Sin darme cuenta el carro frena frente a un portón, cuando lo pasamos me quedo asombrada de al ver el palacio que tengo frente a mí.

Porque llamarla mansión me parece de lo más ofensivo.

Está iluminada, parece una miniciudad y eso que es de noche y no la puedo detallar como es.

¿A esta casa no se le irá la luz? ¿Quién limpiará este casonón?

Me llevan hasta un cuarto grandísimo y ahí encuentro ahí con muchas per... Muchos Countrys más.

Cónchale esto se me va a complicar un poco.

Alguno de ellos los puedo reconocer mientras que a los otros no. Y bueno todos tienen su vestimenta representativa, al menos no soy la única disfrazada acá.

Todos me miran, respiro profundo y me acerco a ellos intentando no aparentar nervios o miedo.

—Buenas —digo tratando de no temblar.

Venezuela, recuerda que no muchas van a entender.

Dios mío, por favor, que no sean Venezolanofóbicos.

—¿Vos sos Venezuela? —pregunta un chamo que si no me equivoco es Argentina.

Este chamo parece una jirafa, al lado mío me deja pequeñita. Su respectiva bandera en su rostro como si se tratara de un color natural de piel; azul con una franja blanca y en ella un sol. También tiene algunas cicatrices que parecen rupturas.

Bueno al menos no soy la única rota de acá

—Obvio, acá humildemente —respondo dejando los nervios de lado.

—Vos sos la única que faltaba —dice pasando su brazo por mis hombros—. Vamos para qué conozcas a los demás.

Ahora que me doy cuenta, ¿Argentina tiene puesto su uniforme de la selección de futbol?

—Pibes*, acá llegó la que faltaba, ya creo que nos van a sacar de aquí.

—¿Es que los tienen encerrados aquí? —cuestiono quitándome su brazo de encima.

Venezuela: La lucha por la libertad (Libro I)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora