Margot Taylor. capítulo 9

1 1 0
                                    


Camilo de la Fuente se encontró a si mismo buscando afanado a Margot en la fiesta. Una condesa casi lo había ahogado lanzándose encima. Las inglesas a la hora de hacerse notar no eran nada tímidas. Otra lo comprometió casi a punta de pistola a acompañarla a la próxima cacería del zorro.

El hombre se refugió en Harrignton.

El anciano sonrío al ver al acosado amigo refugiarse en él.

--Definitivamente eres una caja de sorpresas. Tienes la hija más bella que he visto nunca , me encanta verte tan feliz en medio de esas damas tan interesadas. Pero la belleza de esa misteriosa lady inglesa es notoria e indica el sinónimo de nuestra belleza británica. No has perdido el toque. Cuando estabas más joven eras famoso en Londres.

--Hasta que Margareth Emily me metió en cintura—recordó Camilo.

--Es evidente que muy pronto estarás en cintura nuevamente. --Profetizó Harrignton tomando distendidamente dos copas para ambos.

--Es de la familia—contestó De la Fuente para evitar comentarios sospechosos bebiendo un largo sorbo...

--¿Habrá boda?. Dime. Me muero de curiosidad.

Camilo vio a Harrignton y una sonrisa lo traicionó. Por muchas millas Margot Taylor era tan bella como Emily. Era evidente que el interés de Harrignton no era mezquino. Quería verlo casado antes de morir y si era con una Inglesa más todavía, así fuese pobre. Esa alegría no habría sido igual con una española o francesa, pero ni de lejos.

Capítulo. III

Semanas después del glamoroso baile...Margot abrazó fuertemente a su hermana. Había estado afuera más de un mes. Estaba llegando inmersa en una gran culpa. Se había divertido, se había codeado con la crema y nata, se había enamorado, mientras su hermana estaba vestida de harapos, comiendo lo que la Sra. Stockton llevaba uno que otro domingo.

--Ya pague toda la renta atrasada, pero nos iremos pronto de aquí. Te he traído más ropa y alimentos. --anunció a su hermana, quien no salía de su asombro de ver a su hermana vestida como una lady.

--Hermana. ¡Cómo has cambiado¡ ¿Qué te han hecho los salvajes?. Eres más bella que cualquier aristócrata—exclamó Mary sin salir de su asombro al ver el bello y sobrio traje de la otra junto a su radiante aspecto.

--Y tú no vas a pasar ninguna privación más nunca, de paso vas a estudiar—dijo contundentemente la otra.

--No quiero estudiar—dijo la joven repentinamente seria—La Señora Bucks me ha ofrecido limpiar pisos por 8 libras al mes.

--Pues precisamente eso es lo que no vas a hacer. He traído carbón y lumbre para calentar agua y bañarte—dijo Margot a la aterrada joven. -- tengo que consentirte por todas esas malas noches que te di. Finalizó la joven abrazando a su hermana.

I

Spencer no tenía resultados. Catalina se le había evadido. Le envio cartas que le fueron devueltas sin abrir... La muchacha andaba permanentemente con la otra joven, que a pesar de su belleza y ropas, era evidente que era de baja cuna, pues nadie sabía quién era. Era la embaucadora sin duda.

E--s una influencia maligna—le explicó el Sr Brown.

--Debo quitar ese estorbo, para poder allanar el camino al corazón de la chica—planificó Spencer, a sabiendas que había un tren de jóvenes más apuestos, con más que ofrecer con el mismo propósito.

Seguí a su acompañante—explicó días después Spencer a Brown.--- su casa es una pocilga de décima categoría. Se ve que es una arribista.

--Mi Srta. Catalina la viste, alimenta y consiente más de lo que es posible soportar. Ahora le da 1400 libras al mes.—completo angustiado Brown – temo lo peor para mis amos

CONDESA Tamara Del Calvario del RioWhere stories live. Discover now