Culpable (Leonardo Luna x Rin Itoshi)

Capítulo 10

Hola de nuevo ahora les lanzo un nuevo Capítulo para recompensar mi ausencia de todo este tiempo que tuve que estar presente para su entretenimiento.

Espero que disfruten.

-

-

-

-

-

-

-No tenía opción - dije - pero eso no significa que no te ame es solo que si no jugaba estaría en un aprieto más grande -

Leonardo solo me miro con sorpresa al inicio, pero luego su expresión cambio a una sonrisa muy cálida y tranquila por lo cual eso me hizo que me relajara.

- Espero que la decisión que hayas tomado sea la correcta porque yo siempre te apoyare en todo lo que tu decidas - me dijo para luego darme un cálido y gentil beso en mis labios - ya extraño tu dulce olor a caramelo de limón - 

- Ya quiero que nos volvamos a encontrar - dije sonriendo

- Muy pronto - dijo Leonardo - Rin, creo que es momento de despertar - 

- Te amo - dije cerrando mis ojos lentamente pero no sin antes de ver por última vez el rostro de mi amado.

-

-

De pronto todo se volvió oscuro, entonces escuche el llanto de mi bebé, me levante asustado para ver si mi bebé no le había pasado algo.

- Cariño ¿qué tienes? - dije al verlo llorar, no sé muy bien que se tiene que hacer en estos casos, soy nuevo en estas cosas del bebé- Debes tener hambre-

Iba directo a la puerta para ir por leche, pero recordé que mi hermano me encerró y que no podía salir por un tiempo.

- Mierda ¿ahora que hago? - dije, pero recordé que biológicamente los Donceles al tener bebés pueden producir leche en su cuerpo. Me sonroje por vergüenza ante la idea de producir leche, pero no tenía nada que perder con intentarlo.

Agarre a mi bebé entre mis brazos, me quite la playera que tenía puesta y acerque el rostro de mi bebé a mi pecho izquierdo, aunque al principio pensé que era una tontería, pero de pronto sentí que salía algo de mi pecho y vaya sorpresa que mi bebé dejo de llorar porque estaba ocupado bebiendo la leche que yo naturalmente producía.

Dure un rato con la sensación de mi bebé tomando leche de mi pecho hasta que cayo profundamente dormido, me impresiono aquel acto de mi hijo, pero yo lo amaba y además no estaba enfrente de nadie así que no tenía pena.

- Eres igual de caprichoso como tu padre - dije riendo y acariciando su mejilla.

Mi bebé solo sonrió como si hubiera entendido mis palabras.

- ¡SAE NO PUEDES ENCERRALO! - oí la voz de Sendou atreves de mi puerta - ¡Tal vez tengas en tus manos la custodia de Rin, pero eso no te da derecho exiliarlo de la sociedad! - 

- Es mi hermano y yo sé cómo cuidarlo, además ¿quién eres tú para decirme que hacer con Rin? - oí a Sae decirle a Sendou.

- Talvez no sea mi familia, pero si asimilamos el hecho de quien es el que apoya más a Rin - dijo con un tono serio - ese sería yo.

Al escuchar eso tuve que admitir que tenía razón Sendou, si amo a mi hermano, pero no estuvo todo el tiempo para apoyarme cuando más lo necesitaba y eso me dolía aceptarlo.

- ¡Chicos dejen de pelar o Rin se va a preocupar! - intervino Oliver

- Esto va para los dos, aunque sean mis amigos no tiene derecho a decirme como encargarme de Rin - dijo Sae