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—Apaga las luces—Me dijo con cautela, le obedecí y seguí en medio de los enormes arboles de eucalipto ahora con las luces apagada no podía ver nada aún así confiaba el plan de la Umbra, lo que sea que el tuviera en mente no lo tenia yo.
No pude evitar volver a ver la pantalla del Computador y ver que estaba rastreando el celular de Valentina al pensar en ella muchas cosas pasaban por mi cabeza. Ella estaba en peligro.
Escuchamos el grito de una voz femenina que me parecía conocida, pero rápidamente fue callado por lo que al parecer era un tiro al aire, con este segundo acontecimiento la Umbra y yo nos miramos mutuamente y me dio una señal para parar el motor y luego me hizo otra señal para bajar del vehículo, era como si tuviéramos un lenguaje alternativo al hablar. Como si nos conociéramos desde hace mucho, le quite el seguro a la puerta para bajar pero antes mire la hora «10:25 PM» Ambos estábamos ya afuera del Vehículo, La Umbra saco un revólver trader calibre 38, recargo y lo tenia entre sus dos manos.
—¿Eh y yo ?— pregunte de brazos cruzados algo preocupado porque no sabía que iba a hacer y mucho menos lo que el iba hacer. Frank es un tipo Predecible pero la Umbra no lo es tanto. —Cúbreme la espalda — me dijo mientras me daba un puñal. —¿Un cuchillo eh?, super útil — le dije de forma sarcástica, la Umbra no respondió solo avanzo hacia nuestro objetivo, de donde muy probablemente había producido un disparo.
El problema con la Umbra es que casi nunca sonríe, ni siquiera cuando soy gracioso. Algún sere la Umbra y dire mejores chistes, Pensé y caí en cuenta que la Umbra se estaba convirtiendo en poco tiempo en mi modelo a seguir.
Avanzamos y a continuación la Umbra entro en medio de un arbusto de un arbol y vio algo del otro lado del bosque, Pensé que hubiese sido útil mis binoculares en estos momentos, debí aprender a temprana edad que los binoculares sirve para mas que simplemente espiar a mis vecinos y a chicas. Yo estaba atrás de el y no podía ver nada el se volteo hacía a mi. —Creo que no estamos equivocado, llegamos hasta donde es, eres un hacker hijo..— Me sentí respetado por mi nuevo modelo a seguir y sonreí, pero rápidamente se me borró la sonrisa al momento en que el hombre con mascara me dijo lo siguiente. —Pero me temo que tiene a tu chica o a lo que sea que sea de ti, si no nos movemos inteligentemente sera demasiado tarde— La sangré dentro de mi entro en calor, estaba tan caliente como un caldo, sus palabras me descontrolaron completamente que salte al arbustos y me tope frente a frente con dos estupidos ojos azules con un arma de fuego en una de sus manos y con la otra intentaba desvestir el vestido azul de la unica persona que me importaba en esos momentos, El que ahora sabía que era Ethan era para la Umbra tan solo el final de una ficha completa. Estaba al lado de un gran arbol en el suelo sobre Valentina intentando complacer sus bajos placer pero por Dios que mientras yo estuviera ahí no lo iba ha lograr solo pensaba en protegerla el corazón me late mas fuerte que nunca y no paro de gritar. —¡¡Deja en paz a Valentina, maldita escoria!! —mis gritos fueron suficientes para alarma al que era el mismo hombre que había estado en la cita con ella, hoy en la tarde. el hombre se levantó rápidamente le ató las manos a Valentina con un cuerda, se abrocho el pantalón, Valentina no paraba de llorar por un momento pensé en que se iba a desmayar.
La lluvia se hizo mas espesa.
El sucio hombre hizo un movimiento rápido y mientras yo me acercaba a el apretó el gatillo. Por un momento hubo silencio en mi mente y de un lado de mi hombro la sangré empezó a fluir libremente hacia a fuera por culpa del impacto en ese momento la Umbra eta mi sombra y entro hacia adelante con revólver apuntando hacia nuestro objetivo. —¡¡Oliver!!— grito Valentina. La Umbra estaba apuntando directo hacia Ethan, el viejo intentaba mantener de reén a Valentina. Ethan tenia entre sus asqueroso brazos a mi adorable Valentina, solo imaginé todo el miedo que sentía en esta situación a eso súmale la traición de Ethan el Cual creía que era una buena persona y como si fuesé poco ella le teme al bosque, puesto que que le trae muy malos recuerdos y aqui no habían mas que estúpidos árboles y una lluvia que ya lucia mas como tormenta. Ethan le gritaba a la Umbra que se largara o sinó Valentina perdería su vida, de la forma mas cruel posible. Pensé en que Valentina no merecía morir, pero sabia que a la Umbra no le importaba mas que el trabajo asi que veia mut difícil el que rindiera facil contra el ya macabro Ethan, Ethan era el Villano y la Umbra el héroe, frank tenia la oportunidad de su vida en encontrar lo que siempre habia querido, años atras un cazador también le había arrebatado a su hijo de 16 años de la forma mas cruel desde entonces, habia trabajado de forma individual e independiente para dar con el paradero de aquel maldito asesino.
La lluvia se hizo mas espesa y las gotas gruesas del cielo se empezaron a mezclar con el líquido delgado y rojo que salia de mi cuerpo, de los tejidos rotos de mi hombro. Sangre. Pero por alguna razón no sentia dolor, quizás pensaba en el dolor de Valentina y el mio se resume a la nada y menos que la nada.
—¡¡Suelta a la chica!!— grito la Umbra. —Jamas, Aléjate, no sabes quién soy — La Umbra se quito las mascara y la de caer al terreno Marrón de bosque y entonces salio frank al frio de lluvia nocturna. —Estas atrapado, querido — lo dijo con tanta serenidad que me sorprendió. —Yo nunca estoy atrapado siempre los dioses tienen un nuevo placer para mi.— Ethan dijo eso mientras mientras daba una sonrisa sadica. Frank sonrió y metió su mano dentro de su sudadera y dejo a la vista de todos una plateada y brillante placa de policía. De inmediato muchas sirenas se empezaron a escuchar y muchas patrullas de policía rodearon el bosque.
Policías bajaron de sus vehículos y el viejo Ethan no tuvo otra opción que rendirse. Un señor de la policía algo mayor se acercó a Valentina la cual lloraba en medio de la lluvia que estaba empezando a escapar. —¡Pa' fue horrible, fue horrible, fue espantoso..— — perdoname hijita, perdón por no haber estado para ti. Pero ya paso.— dijo el hombre a su hija Valentina. Yo sonreí de la felicidad a observar lo que estaba pasando y de repente un pulsadas en mi hombro, un dolor terrible. Como si el analgésico que me daba la adrenalina hubiese terminado y ahora hubiese un dolor terrible en mi.
Luego llegaron algunos paramédicos me vendaron la herida y me pusieron un analgésico para el dolor, los policías charlaban entre ellos de lo sucedido, frank se acercó a mi y me dijo: —Te dije que lo haríamos de forma inteligente, ¿ Porque perdiste la calma?, una mujer, ¿Cierto?— —No cualquier mujer— respondí un poco afectado por el dolor. —Buen trabajo, muchacho... Buen trabajo— me entrego en la mano de obsequio su mascara y luego de eso se marcho.
Aún estaba sobre una camilla con el hombro vendado cuando Valentina se acercó a mi, me dijo que era un buen hombre me pidió perdón por comportarse indiferente la última vez.
Y no se si sucedió o solo estaba delirando del dolor pero me dio un beso calido, Tal vez solo fue mi imaginación o tal vez si fué real, como sea fue mucho para mi.
Mire el reloj «11:00 PM» y luego de eso comenzo a llover nuevamente, iba a ser una noche muy larga.
