EP08: El paquete

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Nadie relata

-¡Nos han robado! -Exclama Fabián con las manos en la cabeza.

-Llegamos muy tarde. -Suspira Ricki frustrado.

-Ay no, mi querida Volkswagen... ojalá no me la hayan rallado -lamenta Devora asustada revisando las puertas.

Todos se quedan atónitos por su acción tan materialista.

Pero lo que sorprende aquí es la cara de perplejidad de Fabián. Está con la boca entreabierta con la vista fija en el maletero.

Harold se le acerca dándole varias palmadas al hombro.

-Oye bro, solo fueron latas de carne, en una hora ya habremos llegado a Lane Hill. -Le tranquiliza.

-Marihuana... La marihuana, la marihuana, la marihuana. -balbucea Fabián acariciando sus antebrazos una y otra vez.

-¿Fabián, qué? -le interroga Star.

La ignora acercándose al maletero para examinarlo minuciosamente y comprobar que no queda ninguna jaba de nailon.

-No, no, no, no, no, no, no -farfulla para sentarse cabizbajo en una esquina del maletero-. Todo menos esto, mi mamá me va a descuartizar.

-No quiero ni imaginarme que haz traído droga. -dicta Harold furioso.

-Marihuana y droga son cosas diferentes. -Especifica Ricki para participar en un tema donde si tiene bastante dominio.

-¡¿Crees que me importa?! -pregunta Harold de mal humor-. Espera espera... ¿Tú sabías?

-Hey -levanta las manos en señal de rendición -yo no estaba enterado de que la había traído.

-Pero sí sabías que la fuma. -Contradice Harold.

En eso Fabián se levanta, aún angustiado para entrar
en la conversación.

-Por favor parad ya -se gira hacia Harold-. No es mía, bueno sí es mía, pero no para mí.

-¿Esperas que te crea? -le cuestiona.

-Pues sí, es que tengo... -Es interrumpido por Harold.

-Una adicción, ¿Eres adicto? ¿es eso?

-Que no tío, era para unos amigos que tengo en Lane Hill. -Confiesa.

Harold lo mira con una ceja enarcada, se da la vuelta aún con la cólera saliendo de sus poros y decide dirigirse hacia el tanque de combustible.

-Nos da y nos sobra para llegar -comunica Star.

-Subid -pide Harold.

-Sabes ¡No pienso llegar sin la marihuana a Lane Hill! -le grita Fabián.

-Mira, ya me he cansado -dice Harold muy cabreado -No es mi culpa que hayas traído la puta droga -da unas palmadas a una ventana de la furgoneta-. Estamos aquí por un objetivo; encontrar a mi hermano.

-Yo tampoco tengo la culpa de que tu hermano sea un maldito Cazafantasmas -ataca Fabián.

-¡No tenías que haber venido Fabián! -contraataca.

-¡Pues me quedo! -vocifera Fabián iracundo.

Se siente un disparo al aire.

Ricki acaba de disparar, va bajando la mano lentamente. Tiene un arma.

-Aquí nadie regresa a ninguna parte. -Exclama.

Todos se quedan fríos.

-¿De dónde has sacado eso Rick? -quiso saber Harold.

¿A DÓNDE VAN LOS DESAPARECIDOS? ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora