Capitulo 6 - ¿Eres mi nueva niñera?

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Wei Ying despertó, su cabeza dolía, no debió beber tanto, se acomodó de lado para poder dormir un poco más y vio a Lan Zhan mirarlo - Lan Zhan.

- Mnh

- ¿Qué haces aquí?

- Esta es mi habitación.

Wei Ying se sentó y se sintió un poco mareado así que se recargó en la cabecera, Lan Zhan le dio un suero – Ling lo dejó para ti y un analgésico, ¿lo quieres?

- Si por favor.

Lan Zhan le dio una sonrisa malvada – pídelo de nuevo.

- Oh gran Lan Zhan ¿puedes darme el analgésico por favor?

El otro le dio una sonrisa burlona y se lo dio – ¿a donde fuiste?

- A cenar con tu hermano, le pedí que me pague más, das mucho trabajo.

Lan Zhan le frunció el ceño – mnh.

- ¿Como terminé aquí?

- Viniste a darme mi medicina, te robaste mi dulce y te dormiste.

- Si, eso suena como yo – vio a Lan Zhan mirarlo con impaciencia – ¿que?

- Aun no he desayunado y Ling está afuera esperando que salgas para poder entrar.

Wei Ying lo miro avergonzado, incluso se puso rojo – bien – se levantó y salió, se había bebido todo el suero.

Lan Zhan sonrió, recordó lo que Wei Ying dijo el día anterior, Wei Ying no podía mentir estando borracho, lo sabía, así que le creería, solo un poco, dejaría pasar un pequeño rayo de esperanza en esta oscuridad que era su vida, descubriría a qué se referiría, solo tenía que hacerlo beber de nuevo.

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Esa semana transcurrió sin problemas, de verdad sin problemas, Lan Zhan lo dejó curar sus heridas, comenzaron con más ejercicios para fortalecer sus brazos, incluso pasaron de las pinzas a usar ligas y a unas pequeñas pesas de medio kilo cada una, Lan Zhan decía que podía con más pero no quería forzarlo, su herida de la espalda estaba cada vez mejor y era mucho más pequeña, acababa de hacer la curación – ¿cómo está?

- Estará bien en una semana y podremos iniciar con los ejercicios en la piscina.

- Mnh

Lo cubrió y lo dejó ponerse boca arriba, Ling lo ayudó a subir a la silla de ruedas que habían arreglado para que no lo lastimara y fueron a cenar a la mesa.

El viernes por la mañana después de que Ling lo ayudó a asearse Wei Ying entró con unas tijeras – cortare tu cabello - Lan Zhan lo miro – no es que no me guste como se ve, te ves muy guapo con el cabello largo, pero esta todo disparejo.

Lan Zhan sintió ese latido fuerte de su corazón pero no dijo nada, se puso frente al tocador para que Wei Ying pudiera cortar su cabello, lo vio ir por una toalla y ponerla sobre sus hombros, tomó un peine, traía unas pinzas colgadas en su camisa con las que acomodó su cabello por partes y comenzó a cortarlo, su cabello crecío en su estancia en terapia intensiva y el simplemente lo dejó así, solía amarrarlo en una coleta baja, recordó que Wei Ying le dijo una vez que se vería bien con el cabello largo así que no lo corto, esperando que Wei Ying regresara, esperando que le dijera que lo amaba, que se arrepentía de aceptar el dinero de su tío, pero eso nunca pasó, era tan patético.

Wei Ying noto la mirada de Lan Zhan, ya había terminado y peino su cabello, se agacho y levantó su mentón para que lo mirara – ¿no te gusta?.

- Me gusta.

Tu eres mi cura. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora