24

100 14 0
                                    

Jungkook's pov

No he querido darle importancia, de hecho por un momento sentí que era lo mejor, que me estaba quitando un peso de encima, que no tenía que luchar contra mis deseos porque, finalmente, él estaba del otro lado y no hay manera que nos encontremos, no hay forma de que nos vayamos a ver. A menos que le pase algo que de urgencia requiera atención médica, mas sin embargo, sé que Taehyung no llegará a eso, porque por lo poco que lo conozco, sé que provocara caos total, no va a darse por vencido.

Y Dios, es lo mejor que me ha podido pasar, porque desde la primera vez que me he besado con él, las pesadillas con la muerte de Yoongi lo han incluido. De repente no es solo Min atado a esa silla del demonio, Taehyung está detrás, observándolo todo, esperando porque sea su turno, mientras yo estoy allí, inmóvil, siendo un espectador, sufriendo absolutamente nada más que el arrepentimiento por no aprender de mis errores.

Supongo que mis sueños son visiones del futuro, o así los interpreto en mi desesperación.

Pero debo ser sincero conmigo mismo, y finalmente he captado que lo extraño, extraño ir a esa habitación y encontrarlo, con su expresión de malos amigos, siendo recibido por sus insultos y que esconda con ellos su atracción hacia mí.

Kim Taehyung me ha jodido, no puedo dejar de pensar en él, no puedo dejar de desear volver a verlo, no puedo... simplemente no puedo, y no puedo con tanto que siento.

No sé siquiera lo que es. No sé si nuevamente me estoy dejando llevar por mi necesidad de amar y ser amado, o por mi deseante pasión por el romanticismo, tan trágico y desesperante, pero realmente quiero verlo, quiero estar con él, seguirle su juego, quiero seguir con eso que me hace sentir tan mal y tan bien a la vez.

Por más mal que esté, por más inmoral que sea. No puedo evitarlo y me molesta que así sea, porque no estoy aceptado lo que el destino me está dictando; "no puede ser".

Y me justifico con el hecho de que, según yo, es involuntario, pero me hallo pensando como diablos llegar al otro lado, qué funcionalidades podría tener yo allí sin levantar sospechas, sin que mi padre piense que quiero "pecar" nuevamente.

Aunque es lo único en lo que pienso, en continuar marcando mi camino al infierno.

Y aun así, no me esperaba que la respuesta me haya llegado representa como una tentación misma, como una elección que sé que es incorrecta, que sé perfectamente que debo dejar pasar, que no debería tomar.

Me he dejado llevar por mis deseos y he utilizado a mi hermanita menor para esto, y como siempre, me trago el sentimiento de culpa y dejo que me consuma mientra realizo lo que me está matando por dentro.

Por eso estoy aquí, frente a la enorme puerta de la oficina del mismísimo demonio, esperando porque me de permiso de entrar y mandar a la mierda mi cordura y autocontrol.

Pasa.

Su voz desde adentro hace un eco en mi cabeza que me eriza la piel. Siento que voy a vomitar antes de siquiera girar la perilla. Odio esta sensación.

Entré en la oficina, él revisaba algunos papeles y se veía serio. Su cabello canoso y sus arrugas acentuadas, pero su cuerpo aun se veía fuerte, aun podía dejarme inconsciente de una cachetada.

Y eso, me aterró.

— Papá.

— ¿Qué quieres? Estoy muy ocupado para escuchar tus quejas.

Paradise in hell | Kookv Donde viven las historias. Descúbrelo ahora