Capítulo 5-El amor a pecar

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Mientras Evelyn observa con asombro el nuevo poder de Kyle, Vlad se debate desesperadamente por respirar, su mirada llena de terror. De repente, Kyle abre sus ojos y los dirige hacia Vlad, con una determinación siniestra en su mirada. "Te di una oportunidad de redimirte, Vlad, y la has desperdiciado", dice Kyle con voz fría. "Ahora, pagarás por tus crímenes". Con un último esfuerzo, Kyle aplasta la garganta de Vlad con su poder telepático, matándolo de una vez por todas. Evelyn se queda paralizada por el shock, sin creer lo que acaba de ver. Tras la muerte de Vlad, el trono del vampiro se abre de par en par, y miles de vampiros salen revoloteando, furiosos por la muerte de su líder. Evelyn, asustada, se esconde rápidamente detrás de Kyle, buscando protección en su poderío. 

Kyle se prepara para la batalla, con sus caninos afilados y su poder telepático a punto. Los vampiros lo rodean, pero él no se amedrenta. Sabe que debe proteger a Evelyn a toda costa. De repente, una voz ecoa en la sala, procedente de uno de los vampiros más antiguos y sabios del grupo. "¡Esperad! ¡No debemos pelear entre nosotros! ¡Debemos elegir un nuevo líder!". Kyle, con los sentidos en alerta, gruñe y escanea la sala en busca de la fuente de la voz que había hablado. Finalmente, su mirada se detiene en un vampiro alto y delgado, con cabello blanco y piel pálida. Este vampiro, que era conocido como el Consejero de Vlad, levanta su mano para llamar la atención de los presentes.  "¡Escuchadme, amigos! ¡No debemos olvidar que somos una familia! ¡Debemos unirnos, no dividirnos! ¡Debemos elegir un nuevo líder que nos guíe a la prosperidad y la paz!". Kyle siente una extraña conexión con el Consejero, como si hubiera encontrado en él una guía y un amigo. 

En medio de la tensión, Sam, el hermano menor de Kyle, hace su aparición con una expresión de ira en su rostro. A diferencia de Kyle, Sam no cree en la unión entre vampiros de diferentes clases. "¡Basta de esta tontería! ¡Los vampiros somos seres superiores, no amigos! ¡Debemos imponer nuestra voluntad sobre los débiles, no unirnos a ellos!". Sam se coloca delante de Kyle, con los puños apretados y una actitud desafiante. "¡Escucha bien, Kyle! ¡No confíes en esos engañosos vampiros! ¡Sólo contamos con nosotros mismos!". Evelyn mira con preocupación a Kyle, quien se enfrenta a su hermano Sam. Ella no sabe qué hacer o cómo intervenir.

"¿No ves que no puedes confiar en ellos, hermano? ¡Son unos engañosos y sólo quieren debilitarnos!". "Sam, por favor, escúchame. Necesitamos unirnos para protegernos a nosotros mismos y a los que amamos. ¡No podemos vivir en guerra constante!". Sam se ríe con desprecio. "¡Necesitamos un líder fuerte, no un débil sentimental! ¡Yo debería ser el nuevo rey de los vampiros!". Kyle mira con desprecio a su hermano Sam, quien siempre ha sido conocido por su crueldad, su apatía y su estupidez. Sam siempre se ha creído especial por su frialdad y su estoicismo, pero para Kyle es sólo un idiota redomado. "¿Tú? ¡No eres más que un tonto que no sabe lo que significa ser un verdadero vampiro!".

Sam se enfurece y se lanza sobre Kyle, tratando de golpearlo. Kyle lo esquiva con facilidad y lo empuja al suelo. "¡Basta ya, Sam! ¡No quiero pelear contigo! ¡Sé que puedes ser mejor que esto!". Sam, enfurecido por la derrota, comienza a insultar a Kyle por estar enamorado de Evelyn. Para Sam, Evelyn es sólo una simple "perra callejera" que no merece la atención de un vampiro como Kyle. "¡No puedo creer que estés enamorado de esa perra callejera! ¡Eres una vergüenza para nuestra raza!". Kyle trata de contenerse, pero la ira lo invade. "¡Cierra el pico, Sam! ¡Evelyn es más valiente y leal que tú jamás serás!". Sam se ríe una vez más y se prepara para atacar de nuevo. Kyle suspira, ya harto del comportamiento de su hermano. Sabe que no puede permitir que Sam siga actuando de esa manera. Decide darle una fuerte cachetada para hacerle recapacitar. "¡Basta ya, Sam! ¡Eres mi hermano, pero no puedes seguir comportándote así! ¡Recapacita y piensa en lo que estás diciendo!". La cachetada sorprende a Sam, quien queda aturdido por un momento. Finalmente, baja la mirada y se tranquiliza. "¿Qué pasa, hermanito? ¿Tienes miedo de pelear conmigo?",

En medio de la discusión, Jade, el amor platónico de Sam, aparece de repente en la escena. Está ebria y parece completamente desorientada. Jade cree que se encuentra en una fiesta de disfraces y que Kyle, Sam y el resto de vampiros son sólo personas disfrazadas, sin darse cuenta de que en realidad son vampiros de verdad. "¡Hola, chicos! ¿Qué tal va la fiesta? ¡Me encanta vuestros disfraces! ¿Quién os ha hecho la maquillaje?". Sam se encoge de hombros y se aleja de Jade, mientras Kyle trata de explicarle la situación. "Jade, esto no es una fiesta de disfraces. ¡Somos vampiros reales! ¡Tienes que irte de aquí antes de que algo malo te suceda!". Jade escucha las palabras de Kyle y se ríe aún más fuerte, con el rostro sonrojado por la embriaguez. "¡Jajaja! ¡Sí, claro, vampiros reales! ¡Qué buena broma, Kyle! ¿Me ayudas a encontrar más bebida?". Kyle se da cuenta de que no hay forma de convencer a Jade de la gravedad de la situación mientras esté tan ebria. 

"Jade, por favor, escúchame. ¡Tienes que irte de aquí ahora mismo! ¡No es seguro para ti!". Jade continúa ignorando a Kyle y se dirige hacia la multitud de vampiros, buscando más alcohol. Kyle suspira al ver que Jade se aleja, completamente inconsciente del peligro que corre. Los vampiros antiguos, con sus instintos depredadores, ven a Jade como una presa fácil para alimentarse. Comienzan a cerrarle el cerco, acercándose lenta y siniestramente. Kyle se da cuenta del peligro inminente y grita a Jade. "¡Jade! ¡Corre! ¡Tienes que escapar!". Pero Jade no le hace caso y sigue avanzando hacia los vampiros, sin percibir el peligro que la rodea.

A pesar de su personalidad estoica y fría, el lado protector de Sam aparece en ese momento. Incapaz de dejar que Jade se convierta en víctima de los vampiros, se lanza hacia ella para protegerla. "¡Sam! ¿Qué estás haciendo?" pregunta Kyle con incredulidad. "¡No puedo dejar que la maten, Kyle! ¡Ella es mi amiga!". Sam se enfrenta a los vampiros que rodean a Jade, dispuesto a defenderla con todas sus fuerzas. Sam se enfrenta a los vampiros con una mirada que nadie había visto antes, ni siquiera Kyle. Sus ojos se llenan de una intensa y fría determinación, y el poder de su mirada hace que los vampiros retrocedan temerosos.

Kyle se queda sorprendido al ver la fuerza y el control que Sam muestra en ese momento. No puede evitar sentirse impresionado por el valor de su hermano y su determinación para proteger a Jade. "¿Ves lo que estás haciendo, Sam? ¡Estás poniendo en peligro tu vida por una humana!" le grita Kyle. Pero Sam no responde. Se limita a levantar a Jade en sus brazos y alejarse del lugar, ignorando las advertencias de Kyle.

Mientras Sam se aleja con Jade en sus brazos, Kyle se siente envuelto en una tormenta de emociones contradictorias. Al ver a su hermano proteger a Jade, una humana, Kyle se da cuenta de la ironía de la situación. Él mismo había sido criticado por su relación con Evelyn, también una humana. "¿Qué estás haciendo, Sam? ¿Acaso no ves que estás haciendo lo mismo que yo?" grita Kyle con frustración. "¡No es lo mismo, Kyle! ¡Jade necesita mi ayuda! ¡Tú sólo estabas siendo egoísta!" responde Sam, alejándose con Jade. Kyle queda aturdido, incapaz de responder a la acusación de su hermano. Kyle se vuelve hacia Evelyn, quien aún estaba detrás de él, temerosa por la situación. En ese momento, Kyle no puede evitar reírse con una amarga ironía. La situación era tan absurda que era imposible tomarla en serio. "¿Ves, Evelyn? ¡Mi hermano, el vampiro más estoico y frío de todos, rompiendo su propia regla por una humana! ¡Qué ridículo!".

Evelyn no responde. Sigue mirando a Kyle con una mezcla de miedo y confusión. "No te preocupes, Evelyn. Sam no te hará daño. ¡Su único interés ahora es proteger a su amiga humana!" dice Kyle con sarcasmo. A pesar de las palabras tranquilizadoras de Kyle, Evelyn sigue sintiéndose insegura y nerviosa ante la idea de que Sam pueda hacerle daño. Sin embargo, el miedo no es lo único que siente. También hay una profunda preocupación por Kyle, su protector y amor.

En un arrebato de emociones, Evelyn se levanta y abraza a Kyle con fuerza, buscando refugio en sus brazos. "¡Gracias por protegerme, Kyle! ¡No sé qué haría sin ti!" dice Evelyn con voz temblorosa.  Kyle la abraza con firmeza, tratando de transmitirle seguridad y protección. "No te preocupes, Evelyn. Estoy aquí para protegerte. ¡Nada malo te pasará mientras yo esté contigo!" 


Sangre y PecadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora