Mi hermano ha decidido hacer la fiesta de cumpleaños de JooKyung, una verdadera fiesta. Con eso me refiero a que más que un cumpleaños su casa ya parece una discoteca, no me quejo, desde que me fui de Corea descubrí que me gustan bastantes las fiestas, eso sí, sin beber mucho.Observo a mi alrededor mientras Kethia habla de que quiere a alguien como a SuHoo, y me fijo en un hombre que me suena de más... ¿De qué? No sé. Segundos después me pilla mirándolo, y me da una sonrisa tan bonita que me sorprende. Es muy guapo. No más que SeoJun. Por Dios, tengo que dejar de pensar en él.
—¿Ese no es con el qué bailaste la otra vez? —dice mi amiga, mirando la misma dirección que yo.
Exacto.
—Sí. —asiento con la cabeza.
—Y allá esta SeoJun. —vuelve a hablar, y mis ojos siguen la misma dirección que ella—. Te está mirando... Saluda, EunJi.
—Que me salude él, si quiere. —contesto, sin más.
Luego de unos segundos bastantes largos, en los que parecemos estar en una clase de pelea de miradas, SeoJun me sonríe; le devuelvo la sonrisa y me vuelvo hacía el chico de antes.
Ahora nos cuesta saludarnos, cuando antes lo que nos costaba era despedirnos.
—Kethia, ¿qué hora es?
—Las una, ¿por?
—Necesito ir al baño.
Y con ello, salgo de ahí lo más rápido que puedo, yendo directo a la habitación de mi hermano. Cierro la puerta tras de mi cuando llego, y me siento en la cama, sacando mi teléfono del bolsillo.
—¿Soy una idiota por esperar una disculpa? —pregunto, cuando sé que me ha agarrado el teléfono.
—¿Qué?... EunJi, si no me especificas, no voy a entender nada.
La voz de Dylan logra relajarme un poquito, haber estado cinco años junto a él nos ha hecho ser muy buenos amigos.
—Hablo de SeoJun. —le hago saber— Solo espero una disculpa, Dylan, y siento como si pidiera mucho.
—No estas pidiendo mucho, linda.
Hay unos segundos de silencio, en los cual deseo estar con Dylan en California de nuevo, en vez de aquí.
—¿Lo sigues queriendo? —pregunta, por fin.
—Mucho. —me confieso— Creo que no voy a querer a nadie más que a él.
—Pues, deja que la cosa fluya y la disculpa que esperas, llegará sola.
—Vale. —murmuro, asintiendo con la cabeza aunque no me vea.
—Vas a estar bien, EunJi.
—Eso espero.
—Te quiero, ¿si?
Eso me hace sonreír:— Yo también, bobo.
—Bien. Tengo que colgar ya.
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² Unforgettable ✔
Fanfiction"Ahora nos cuesta saludarnos, cuando lo que nos costaba era despedirnos". Segunda parte de "Don't let me go". Prohibida la copia o adaptación.