Epílogo

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El día era soleado, con un hermoso cielo azul sin nubes. Los árboles verdes llenos de vida que son acompañados por las flores coloridas del pastizal.

El día es magnífico.

Las personas ya se encuentran en el gran patio escolar donde se lleva acabo el festival de fin de año.

En el lugar hay varios juegos como también puestos de comida. También, había un gran escenario donde se anunciarían bastantes cosas por parte de directivos y para una banda que tocaría.

Rose, que no había querido ir en un principio, ahora se encontraba un poco emocionado por el echo de que Izzy le había informado que Kurt haría una presentación.

Por lo que, ahora, buscaba al chico con la mirada.

Izzy negaba levemente con la cabeza. Se le hacia tan extraño que de pasar de ser completamente desconocidos, ahora no podían estar sin el otro por más de cinco minutos. Era raro, gracioso y lindo.

Buscó junto a su amigo al chico. No tardaron tanto en visualizarlo junto a sus amigos que parecían tener una divertida pelea de pareja.

Axl se acercó, casi corriendo, al rubio. Entre tanta gente se le hizo un poco difícil, pero lo logró.

-Hey, Ax.- Kurt saludo.

-Hola, Kurt.- Sonrió.

Se quedaron mirando a los ojos más de lo normal.

Dave tosió falsamente para que les prestarán atención.

-Aun seguimos aquí, tortolos.

Ambos se sonrojaron fuertemente.

-Eh, ah, yo...- Axl no sabía que decir.

-¿Por qué no nos presentas, Kurt?- Propuso Krist para quitar aquel momento tan incómodo.

-Eh, si. Bueno, Axl, ellos son Dave y Krist. Y bueno, ellos ya saben quien eres.

Los chicos saludaron al colorado, Axl les regaló una sonrisa. Ellos habían sido una pieza importante para que el y Kurt empezarán a hablar.

-Será mejor que vayamos por un helado.- Le dijo Dave a su novio. Esté solo asintió. Alejándose de la escena.

-¿Quieres ir a jugar algo?- Kurt intenta que el momento no se vuelva incómodo.

-Si, vamos.

Ambos chicos caminan entre los puestos, hasta que paran en juego donde hay que reventar globos para ganar un peluche.

-Intentemos este.- Propone Rose. El rubio asiente.

El primero en intentar ganar algo es Kurt que, debido a su muy mala puntería, falla al reventar los globos necesarios para ganar algo.

Axl ríe de él. Pero, a Kurt no le molesta. En cambio, le parece algo lindo.

Rose pará de reir para ser el siguiente en intentar reventar los globos. El no posee mala puntería, sin embargo, falla algunos globos. Pero, rompe los suficiente para ganar un peluche.

-Quiero ese.- Señaló un peluche mediano de Stitch.

El chico que atendía muy amablemente se lo dió.

-¿Stitch? Que lindo.- Dijo Kurt al ver el peluche que había escogido.

Siguieron probando más juegos en los que, con mucha suerte, Kurt solía ganar algo. También, habían probado un poco de la comida que se vendían en algunos puestos, como las banderillas.

Sin embargo, Steven interrumpió su momento.

-Lamento interrumpir, pero, Kurt, te presentarás en cinco minutos. Así que, te lo robó Axl.- Jugó. Axl solo negó divertido, permitiendo que se llevarán al chico.

Cuando Kurt se fue, llegó Izzy. Lo tomó con fuerza y lo dirigió al escenario. Entre la multitud de jóvenes intentaron llegar hasta el frente. Cosa que lograron.

-Vendria a verlo de todas maneras no tenías que...

-Ya sé, mejor solo escucha.- Dijo callando a su amigo.

En el escenario se podía ver a Kurt sentado en una silla, en sus piernas recargaba una guitarra acústica eléctrica y tenía un micrófono.

Él estaba nervioso. Inhalaba y exhalaba con lentitud para poder relajarse. Cuando estuvo lo suficiente bien, tomó valor para hablar por el micrófono.

-La canción que interpretare es Can't take my eyes off you de Frankie Valli. Y, se la quiero dedicar a alguien que ni siquiera sabe que iba a hacer esto.- Rió suavemente.- Pero, que, sabe que está canción es para él.- Miró entre la multitud visualizando al colorado. Sonrió.- Te amo, mi dulce niño.

Axl estaba completamente sorprendido por lo dicho hace solo unos segundos. Así que, solo pudo sonreír.

Kurt posó sus manos en las cuerdas del instrumento, las movía en suaves cordinación para crear la dulce melodía que había estado practicando desde hace tiempo.

Recordó aquellos suaves versos, mientras no despegaba su vista del chico que se encontraba entre la multitud.

-I love you, baby. Trust in me when I say it's okay. Oh, pretty baby. Don't bring me down a pray.

Las palabras que canta son dulces, a Axl le encantan.

Cuando la canción a finalizado, Axl corre atrás del escenario. Sabe perfectamente que hacer. Aunque, la multitud lo detiene por momentos, atravesando se en su camino. Logra llegar ahí. Espera a que Kurt baje.

Kurt baja las pequeñas escaleras que separan el escenario del suelo. Ahí ve a Axl, que espera que baje completamente.

-¿Te...

Axl no lo deja terminar de hablar. Lo toma de las mejillas y junta sus labios con los de él. Kurt se sorprende, pero rápidamente corresponde el beso. Es suave y lento. Pone sus manos encima de las del colorado.

Se separan con una gran sonrisa y un fuerte sonrojo.

-Yo también te amo.- Musita Rose.- Y me encantaría estar contigo.

-Entonces, eso significa que...- Deja que Axl diga los demás.

-¡Seamos novios!

Con esas palabras, Kurt lo vuelve a besar. No ha soltado las manos de Axl, por lo que, está vez, entrelazan sus dedos.

Sus sentimientos están más que claros y han sido revelados.

Ese día han comenzado una nueva historia. Además, Kurt ya no tendrá que mandar poemas a su enamorado. Porque ya a logrado su cometido.

Cobain a cumplido su promesa; enamorar a Axl Rose.




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¿Qué les pareció la historia?

¿Les gustó el final?

¿Le cambiaron algo?

𝘗𝘰𝘦𝘮𝘴 𝘧𝘰𝘳 𝘮𝘺 𝘣𝘦𝘭𝘰𝘷𝘦𝘥 ·𝘒𝘶𝘳𝘵𝘢𝘹𝘭·Donde viven las historias. Descúbrelo ahora