El Chico Que No Me Quería

Adiós y Wow

* Asia*

Ésa noche no dormí hasta muy tarde. Su comportamiento me había descolocado por completo. Un día quería llevarme a la cama y al otro decía que era algo impulsivo.
Los hombres dicen que no pueden comprender el comportamiento femenino, pero¿ Qué hay de ellos? En ocasiones resultan indescifrables. Yo quería hacerlo y quería que sucediera así,de forma espontánea,sin forzar la situación. Pensé mucho y llegué a la conclusión de que quizá no traía preservativos o yo qué sé. Sólo le daba vueltas y vueltas y no me complacía ninguna de las excusas que podía encontrar. Siempre me había molestado que un chico pasara de darme un beso a proponerme obscenidades. Con él enloquecía por hacer mil cosas que ni siquiera sabía cómo se sentirían. Porque con él me atrevía a ir hacia lo desconocido. El sexo era algo nuevo en mi vida y en algún momento del futuro tendría que experimentarlo, así que decidí que sería con él porque era el único que no había hecho que nuestra relación girara en torno a éso. Decidí antes de quedarme dormida que fijaría una fecha para la ocasión, así no me diría que estaba siendo impulsiva,de hecho creo que en mucho tiempo no había sopesado tanto una decisión. Era impulsiva; sí, pero ahora no lo estaba siendo. Pasó una semana y creí que volveríamos a alejarnos pero no sucedió.
Me dije que hablaría con él claramente, pero en cuanto lo ví con ésa sonrisa que me hacía derretirme toda olvidé todo lo que había estado planeando. Me besó y fue tan tierno que me hacía preguntarme de cuántas maneras posibles podía hacerme suya.
Pasamos la tarde viendo televisión mientras mi madre cocinaba para nosotros. Duncan vendría a comer con nosotros así que no podíamos escabullirnos,al menos por un rato más. Cuando terminamos de comer mi mamá me tenía una noticia. Duncan se mudaría con nosotras. No me sorprendió para nada puesto que nos visitaba mucho. Los felicitamos y nos invitaron a pasear pero me negué alegando que estarían mejor solos ( en realidad pensaba en mi e Ian). Creo que le asustó estar a solas conmigo porque en cuanto mi madre y su novio salieron se quedó en silencio y pensativo.
Me acerqué a él y empecé a besarlo, me correspondió pero con renuencia. Ése era el momento de decirle lo que había decidido.
- no quiero que pienses que estoy siendo impulsiva, así que pensé que podía elegir un día para estar solos y que todo salga bien,sin presión quiero decir- no lo miré a los ojos porque aún no podía dejar de sentirme arrastrada al abismo cuando me miraba fijamente.
- la verdad yo había pensado lo mismo- me sonrió tan lindo que quería lanzarme hacia él y dejar que el mundo ardiese.
- en unos días es el cumpleaños de mi madre y Duncan la va a llevar a un retiro romántico o algo así todo el fin de semana- le lancé una sonrisa seductora.
Me sonrió malicioso en respuesta y noté que no había visto ese comportamiento en él antes.
- mientras ,podemos practicar los preliminares- me rodeó con sus brazos y juraría que me rozó el trasero descaradamente. ¡Wow! No se estaba cortando y a mí me había empezado a gustar el rumbo que había tomado nuestra relación.¿ Desde cuándo era tan atrevida?
Nos besamos una y otra vez hasta terminar jadeando y sonriendo. Era agradable poder disfrutarnos sin sentirnos incómodos. No sé cuál de los dos lamentaba más la despedida. No podía despegarme de él y a él parecía no molestarle en lo absoluto.

La semana siguiente me reuní con las chicas. Tristemente Susan y Scott habían terminado, al parecer hubo otra chica involucrada. No quería hablar del tema y nosotras no la molestaríamos . La novedad de la reunión fue Bety. Llevaba casi dos meses saliendo con Landon,un chico de último año de su universidad. Para ella éso era un récord y al parecer iban en serio porque ya ni siquiera perseguía a Marcos.
Las cosas entre Aiden y Rain se estaban enfriando un poco, él estaba en tercer año de universidad y Rain todavía iba en preparatoria. Por otro lado Rachel y Randy  iban bien, pero al verlos juntos parecían dos amigos más que una pareja. Les conté de mi pequeño plan y todas estaban asombradas de saber que estaba planeando por fin tener sexo. Sólo Rachel y yo seguíamos siendo vírgenes y al menos Rachel ni siquiera se planteaba dar el paso. Tonteamos toda la tarde. Era bueno pasar tiempo con ellas y distraerme de las clases que me estresaban demasiado. Ése fin de semana Ian no vino y aunque lo extrañé me alegraba haber estado con las chicas. A mediados de semana me mandaron un trabajo en clase que consistía en hacer una investigación sobre medidas administrativas aplicadas a una compañía pesquera después de un proceso legal. La sobrina de unos vecinos estudiaba administración de empresas y venía a visitarlos todos los viernes. Así que pensé en encontrarme con ella y pedirle un poco de ayuda . Ésa semana era un caos. Mi mamá se fue de viaje viernes al mediodía y mis planes con Ian eran para el sábado, así que entre el trabajo de clase que debía entregar el lunes y los nervios por mi encuentro con Ian,estaba más estresada que nunca. Lisa me ayudó con la investigación, pero hubo una conversación cuando terminamos que no podía creer, que no quería creer, quizá se había confundido, después de todo no estaba segura de nada .
Resulta que una amiga suya que iba en último año era vecina de Ian. Hasta ahí todo bien, pero lo que no estaba bien era que Ian me había mentido diciendo que no había tenido novia antes. Irene que fue su novia por un año y que todavía frecuentaba su casa preferiblemente cuando estaba a solas era la prueba irrefutable de sus mentiras. No quise demostrar que me estaba derrumbando poco a poco así que sólo me hice la desentendida. No pude evitar preguntarle cómo era la chica. ERROR era mejor no saberlo. La chica era alta,delgada, pelirroja, encantadora y su familia era amiga de la de Ian. Parecía que las pelirrojas habían llegado al mundo para incomodarme. Lo peor es que ella presumía de que pronto volverían a estar juntos ya que últimamente no habían dejado de tener sexo. Fue un balde de agua fría que necesitaba para despertar. Aquello me estremeció de tal manera que sólo contaba los minutos para salir de allí e ir a mi casa para llorar con libertad sin que nadie en este mundo pudiese verme. Era mi destino que los hombres en mi vida se calentaran conmigo para luego ir a revolcarse con otras. Siempre supe que Ian había sido un capullo, pero fui una idiota al pensar que cambiaría por mí y sería sincero. Lo tenía merecido por enterrar mi conciencia cuando ésta me gritaba que saldría lastimada. El sexo,el maldito sexo que se colaba por cualquier grieta y lo destruía todo.¿ Por qué los hombres pensaban con el pene? ¿ Acaso la irrigación sanguínea no podía llegar al cerebro?