-Fernando, tenemos los ingredientes, vengan, los esperamos temprano.
Fernando se baña y se viste con un hermoso vestido floral. Llama a Faby.
-Faby, ven por mí para ir a casa de Liliana.
-En 10 minutos estoy ahí.le dice Faby
Fernando se pone sus pantaletas que hace un tiempo dejaron de molestarle, mientras escucha BTS.
¿Por qué nos llama Liliana ahora? - dice Fer ,Tengo un examen muy importante para el martes, debo estudiar historia universal.
Mientras tanto, Faby se cambia, se pone sus jeans, sus Nike y una camisa de Megadeth. Su cuarto aún apesta a espíritu adolescente, ayer se desveló viendo videos en una página, y jugando en línea.
Faby va por Fernando a casa de Faby, mientras en su celular escucha algo de Falling in Reverse.
Llega por Fernando que aún está en su antiguo cuerpo de Faby.
¿Cómo te sientes, amor?
-Bien, aunque tengo un examen el martes . Y si pasa lo que creemos, tú lo harás por mí.
-Bueno, ya veremos ,dice Faby
Oye Fer, -¿quieres volver a tu cuerpo?
-Pues, si me lo hubieras preguntado hace un mes, te diría que sí sin dudarlo. Pero no sé, algo cambió y ahora me siento perfecta en tu cuerpo.
- A mí me pasa lo mismo.-dice Fernando Y bueno, ya pronto será la graduación y hasta me había probado el traje. Me veía guapísimo.
- Jajajaja , Faby se rie
-Y yo pensaba llevar un vestido largo - dice Fernando y ¿por qué no? Por primera vez usaré tacones altos. Ya he estado practicando y créeme que me siento como pez en el agua.
Bueno, ya llegamos con Lili. Dice Faby¿Aún quieres hacer esto?
-Está bien, hagámoslo. Dice Fernando No sé por qué, pero debemos regresar.
Liliana los recibe.
-Hola muchachos, les dice faby cómo han crecido en estos 9 meses que llevo conociéndolos. -¿Cómo va ese bigote, Faby?
-Ahí va, aunque en cuanto pueda me dejaré crecer la barba.
-Muy bien, y tú, Fernando, vaya que has crecido. Te veo más alta y bueno, hay algo que resalta cada día más.
Sí, Liliana, cada día me desarrollo más como mujer dice Fer -y me gusta el proceso.
Ok, les dice liliana-espero no se hayan encariñado mucho con esos cuerpos. Azeneth, son todos tuyos.
-Muy bien muchachos, siéntense uno al lado del otro, tómense de las manos y cierren sus ojos.
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Azeneth les pide que se sienten uno al lado del otro, se tomen de las manos y cierren los ojos. Liliana observa mientras Azeneth realiza el ritual. La energía es más intensa esta vez, haciendo estremecer a Faby y Fernando.
Un minuto después, todo termina. Liliana intenta despertar a Faby: -Faby, Fabiola, Fabiolita, despierta.
Faby abre los ojos y pregunta: -¿Ya todo terminó?
-Sí, Faby, ya todo terminó -responde Liliana.
-No lo creo -dice Faby con incertidumbre.
-¿Por qué? -pregunta Liliana, confundida.
-Porque no soy Faby. Aún soy Fernando.
-¿Qué? -exclama Liliana, sorprendida por el giro inesperado de los eventos.
-¿Qué pasó aquí, Azeneth? -pregunta Liliana, alarmada.
-Nada ha pasado, todo está de acuerdo al plan -responde Azeneth con calma.
-¿Y cuál es ese plan, si se puede saber? -insiste Liliana.
-Pregunta a ellos por sus gustos ahora, primero a Faby y luego a Fernando -sugiere Azeneth.
Liliana sigue la instrucción y se dirige a Faby: -Faby, ¿cuáles son tus gustos ahora?
Faby responde: -Soy fanática del K-pop, de los postres, las fresas con crema y las matemáticas.
Luego, Liliana pregunta a Fernando: -¿Y tú, Fernando?
Fernando contesta: -Soy fanático del rock pesado, me gustan mucho los deportes de contacto y beber mucho líquido, es por salud.
-Sí, pero están intercambiados -observa Liliana, confundida.
-Azeneth, haz algo -dice Liliana desesperada.
-Ya lo hice -responde Azeneth con tranquilidad-. Alineé sus almas, ahora debo alinear sus cuerpos. Solo que para eso tendremos que esperar.
-¿Cuánto? -pregunta Liliana.
-Un año, amiga -contesta Azeneth-. Si no esperamos ese tiempo, ambos pueden volverse locos al revolverse sus almas y confundirse eternamente.
-Ok, chicos, ya oyeron -dice Liliana, dirigiéndose a Faby y Fernando-. Ahora, por lo menos sus gustos no cambiarán. Tú, Faby, serás Fernando, pero por dentro serás Faby y seguirás con los mismos gustos. Igual para ti, Fernando: tendrás que ser Faby un año más.
-Ni modo -dice Fernando, resignado-. No iré de traje a mi graduación.
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