En 2038, todo el estado de Detroit ya estaba repleto de androides. Cada ciudadano ya tenía al suyo, aunque no todos estaban de acuerdo con el uso de estas maquinas. A estos se le llamaban anti androides.
A Lexie, una chica con las ideas claras que...
-pensaba que ibas a tardar más en descubrirlo- se giró para que agarrara la silla- ¿cómo lo averiguaste?- empecé a llevarlo hacia el salón
-fui a casa de mis padres- Carl echó el freno de mano- ¿qué pasa?- me sorprendí
-¿por qué hiciste tal cosa? Sabes que no eres bienvenida allí- soltó con tristeza. Lo giré hacia a mi
-fui con el teniente Anderson a casa de Kamski. Quería averiguar una forma para convertir a Connor en divergente. No nos ayudó y tuve que recurrir a su antiguo mejor amigo: Mark Robinson
-¿Mark y el señor Kamski se conocían?- preguntó interesado
-y ahí le copió la idea de Cyberlife- le terminé de explicar- y claro, le hablé de Connor y no supo de que le estaba hablando
-ahora supongo que querrás saber porque lo hice, ¿verdad?- retomé el paso. Yo asentí aunque no me viera- los odiabas tanto que creía que era la única forma para que cambiaras de idea. Pero nunca imaginé que tendría este desenlace
-necesito hacerlo libre, abuelo. Además, estoy segura que él también tiene esa necesidad. Lo veo en sus ojos- por fin entramos a su estudio. Markus estaba admirando el gran cuadro que había colgado
-pero, ¿a qué viene esa preocupación tan repentina para que sea libre?- preguntó mientras él solo se acercaba a Markus
-¿no te lo ha contado? Es digno de escuchar- sonrió Markus. Me quedé callada durante un momento
-bueno...resulta que...en fin...- titubeé
-que se ha enamorado de Connor- soltó Markus
-¡Markus!- le grité indignada acercándome- lo tenía que contar yo
-vaya, vaya. Así que enamorada del androide que al principio no querías- empezó a acercarse a un cuadro- debe ser difícil amar a alguien y saber que es muy complicado que ese amor tenga un final casi imposible
-no sabes cuanto- respondí apoyando mi cabeza en el hombro de Markus
-¿sabes? Hace un tiempo imité un cuadro que explica completamente tu situación- destapó uno que tenía con una sábana- mira
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Abrí mi boca asombrada cuando vi aquel cuadro. Describía totalmente mi relación Connor. La necesidad de estar juntos pero la imposibilidad de ello
-¿cómo llamarías a este cuadro, Lexie?- me preguntó mirándome con atención. Lo pensé un momento hasta que encontré el nombre ideal
-obsesión accidentada. Muestra la obsesión de esos dos cuerpos por juntarse, pero hay algo que los frena por ambas partes- expliqué acercándome al cuadro
-¿quiénes son?- volvió a preguntar Carl
-Amanda y...¿quién me tira hacia atrás a mi?- miré a Carl quien solo me miraba serio
