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Los ojos de su nuevo jefe son redondos, con un toque de frialdad en ese color almendra con manchones negros. Tiene el cabello de color rubio casi tirando a platinado y una piel de color caramelo que hace un contraste precioso. Es guapo, demasiado guapo con facciones muy masculinas y marcadas, es de esos hombres que poseen una belleza única y diferente. De esos que nunca vez en tu país.
Tiene un aura intimidante, pero no llega a ser lo suficientemente frío y temerario como cierto hombre de rostro inexpresivo y ojos afilados que le gusta mucho al pelirosa.
Bajó la mirada a su nuevo contrato de laboral; un horario de lunes a viernes, desde las 7:00 a.m. hasta las 5:00 p.m. El típico horario de oficina.

—¿Por qué tengo que estar todos los días?— El jefe podía verse intimidante pero no logra nada en Jimin. Ya se acostumbró a convivir con Yoongi, con él es suficiente temor y nervios— Es mi forma de trabajar. Entienda joven Park que el antiguo jefe ya no está aquí y esta empresa está bajo mi cargo. Usted es la cabeza principal de los diseños. Lo necesitamos aquí todo el tiempo.

La verdad... No tiene muchas opciones. Jimin fue desechado por su propia familia cuando cumplió la mayoría de edad e ingresó a una de las mejores universidades privadas de Seúl. Sus padres y dos hermanas se mudaron a Reino Unido. Para ser más exactos en London, el pelirosa no tuvo las intenciones de seguirlos y ellos de insistir en que se fuera a London.
A muy temprana edad Jimin entendió que era un obstáculo para su familia, lo único que generaba en ellos era asco y rechazo. Jamás aceptarían quien era, lo que le gustaba y la forma en que amaba a otros.
Su padre siempre expresaba su desprecio por él, aclarando que no deseaba que sus compañeros de trabajo conocieran a su único hijo hombre siendo gay, afeminado y aparentando ser una chica. Jamás serviría para los negocios, por eso cuando se quedó solo en Corea, olvidado por su propia familia comenzó a ser él mismo y estudió lo que se le pegó en gana.
Al inicio recibía una "pensión", supuso que era por parte de su madre que sentía pena por él y apenas pudo sobrevivir a la universidad con eso. Poco a poco ese dinero comenzó a llegar en pocas cantidades para convertirse en nada, su padre solo pagó la universidad y departamento donde vive. Lo demás se resume en: Olvido y abandono.

—Bien señor Kim— Dejó su preciosa firma en el contrato para devolverlo. La idea no le gusta, en realidad la odia pero no tiene muchas opciones... Él jamás permitiría que Romerito se quedé sin sus wiskas.

—Gracias joven Park. Vaya con la secretaria, ella le va a asignar su propia oficina— El pelirosa se levantó de la silla, hoy trae el cabello suelto, como siempre se ve sedoso con un brillo natural aunque tenga ese tinte rosa pastel que le hace ver tan hermoso, hoy se hizo ondulaciones por que tenía ganas de hacerse algo diferente. Igual su ropa, eligió un pantalón estilo cargo bastante ancho del mismo tono que su cabello y un croptop blanco de mangas largas con detalles de encaje y unas plataformas del mismo color que su croptop. Femenino y bonito.

Kim Taehyung (su nuevo jefe) le miró el trasero de la forma más descarada posible, bajando hasta su abdomen y subiendo hasta la clavícula donde no vio nada más que tela blanca cubriendo la piel pálida de Jimin. Existen miles de formas para demostrar interés en una persona, pero hay gente estúpida como Taehyung que no sabe ni una sola y dice cualquier estupidez.

—Sería genial que cambie su aspecto físico. En esta empresa tenemos una etiqueta en cuánto a vestuario y cabello que debemos seguir... Quitar ese color tan infantil y cortarlo corto sería mejor— Park se quedó impactado al escuchar eso, juntó ambas cejas sintiéndose indignado por el comentario. Su nuevo jefe parece ser un imbécil de primera y cuando abrió la boca para responder la puerta principal comenzó abrirse creando un sonido de crujido.

La secretaria Yeon apareció toda sonrojada y nerviosa. Jimin notó como tragó grueso a raíz de los propios nervios que la atacan.

—Y-ya llegó... El inversionista—Taehyung hizo un gesto con la mano permitiendo que pasara mientras rueda los ojos demostrando lo egocéntrico y molesto que es.
Park vio esa acción y aunque es muy tranquilo, de verdad quiso darle un golpe en la cara por que se ve tan estúpido. No lo soporta, lo odia con el alma es un imbécil.

Chubby Boy ~ YoonMin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora