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Cuando Jisung regresó con los demás estos lo vieron preocupados. Todos preguntaron donde estaba, pero el respondió con un "Estaba en el baño", todos le creyeron y siguieron con sus cosas.

Cuando regresaron al salón Jisung se perdió en sus pensamientos, quería olvidar a Minho, pero le era imposible.

Creyó que sería una buena idea ignorarlo, pero el menor parecía molestarse con eso. Todo el tiempo estuvo mirando un punto fijo, su pierna izquierda se movía de arriba hacia abajo con ansiedad, todos prestaban atención a la clase sin percatarse del chico que parecía estar por tener una crisis de nuevo.

No lo soportó más y se levantó de golpe. Todos le miraron confundidos, incluso el profesor, quién lo miraba esperando una explicación.

─Y-yo... Nesesito ir al baño─dijo tratando de justificar su extraño comportamiento.

─Puedes salir.

Jisung suspiró y salió del salón, corrió hacia el baño y al llegar se encerró en uno de los baños.

Su respiración era acelerada, se sentó en la taza del baño para no perder el equilibrio. Sus piernas temblaban con fuerza, cada vez veía más borroso y cada vez se quedaba sin aire.

Intentaba respirar pero no podía, sus pulmones parecían haberse bloqueado, intentó levantarse pero sus pies le hicieron una mala jugada haciendolo caer al suelo. Las lágrimas amenazaban con caer pero eso era lo que menos le importaba.

Lo que más quería era respirar.

Pronto el aire ya no entraba, intentaba hacerlo pero no entraba el aire, empezó a temblar y sintió que las esperanzas iban desapareciendo hasta que escuchó a alguien entrar al baño.

No habló, pero el sonido de sus jadeos forzados lo hizo encontrarlo.

Intentó abrir la puerta, Jisung se estaba quedando sin fuerzas, escuchó a la persona empujando la puerta en un intento de abrirla. Después de un rato la abrió y logró ver al pelirosa quien luchaba por vivir.

─¡Ji!─gritó el pelirrojo acercandose a él. El pelirosa estaba llorando, hecho bolita en el suelo.

─N-no puedo respirar J-jinnie─intentó decir, Hyunjin le entendió y se agachó frente a él.

─Está bien Ji, solo sigueme.

Jisung asintió y miró a Hyunjin esperando una indicación.

─Inhala─dijo tomando aire, Jisung trató de imitarlo con dificultad─Exhala─soltó todo el aire.

Jisung imitaba sus movimientos, el aire empezaba a regresar pero era escaso.

Hyunjin estaba desesperado, Jisung lo miraba con esperanza, siguió guiandolo hasta que poco a poco el aire regresaba a sus pulmones. Después de unos diez minutos logró respirar con normalidad.

Pero aún el temblor seguía presente.

Hyunjin lo abrazó y acomodó la cabeza de Jisung en su hombro. El menor lo abrazó de vuelta, acomodó mejor su cabeza entre el hombro y el cuello del pelirrojo y se quedó ahí.

Hyunjin trataba de no hacer algo al sentir el aliento caliente del menor el su cuello.

Solo lo abrazó con más fuerza, El cuerpo de Jisung era un poco más pequeño que el suyo, Hyunjin estaba pensando en hacer algo.

Traía en cuenta las posibles consecuencias, pero aún así lo iba a hacer. Esperó un poco más, mientras los temblores del pelirosa disminuian.

─Hyunjin... No te vayas─pidió el menor, Hyunjin solo suspiró.

─No lo haré, me quedaré contigo si me lo pides.

─Entonces quédate─Hyunjin se separó y Jisung lo miró.

El mayor tomó la barbilla del menor con suavidad y alzó su rostro, ahora ambos se miraban a los ojos. Los ojos negros de Hyunjin miraban con dulzura a las orbes color castaño del menor. Su miraba viajó a sus labios. Grandes y brillantes.

Acercó su rostro poco a poco hasta que sus respiraciones se juntaron.

─¿Me darías el permiso de besarte?─preguntó el pelirrojo rozando los labios de Jisung.

Este solo lo miró antes de decir:

─Lo puedes hacer, si es que así lo quieres─Hyunjin sonrió y acercó sus labios hasta chocar con los del menor.

El beso era suave, la mano de Hyunjin acunó la cara del pelirosa, este solo se dejaba llevar entre el suave toque.

Hyunjin sentó al pelirosa y se colocó encima de él con la intención de subir de intensidad el beso. Jisung separó sus piernas para que el pelirrojo se metiera entre ellas y tuviera mejor acceso a él, la mano desocupada del mayor se posó en la cintura del menor, dando un leve apretón.

Se separaron cuando el aire comenzaba a faltar. Hyunjin se quedó hipnotizado al ver al pelirosa. Sus mejillas estaban sonrojadas, sus labios húmedos e hinchados y su mirada inocente.

─Jisung, nunca te dejaré solo─dijo antes de volver a besarlo, un beso más intenso que el anterior. Jisung se recargo en la pared y cerró los ojos.

Había algo en este beso que le gustaba. No, no le gustaba, le encantaba. No eran como los de Minho, eran diferentes, dulces, como si quisiera demostrarle su cariño a través de estos.

Pasó sus brazos por detrás del cuello del mayor y con una de sus manos enterró sus dedos en el cabello de Hyunjin. El mayor bajó sus besos a la clavícula de Jisung, donde empezaba a dejar besos húmedos por todas partes. El pelirosa jadeo al sentir los labios de Hyunjin besar con pasión su cuello.

Recordó a las veces que Minho besaba y mordia esa zona en el sexo, las veces que besaba su cuello llegaron de golpe haciendolo sacar un pequeño gemido.

Hyunjin sonrió ante tal sonido, no sabía la razón, y suponía que era por él.

Luego recobró la consciencia y se separó lentamente del pelirosa quién aún tenía los ojos cerrados.

Su cuello tenía marcas rojas que el mismo hizo, la respiración irregular del menor y su cabello desordenado lo hacían lucir perfecto.

─Es hora de irnos, la clase seguramente ya terminó─Jisung asintió y se levantó con la ayuda del pelirrojo.

Ambos caminaron juntos al salón y en efecto, otra maestra estaba ahí.

Entraron luego de pedir permiso y se sentaron en sus lugares.

Hyunjin les explicó todo a sus amigos, omitiendo la parte de la intensa besuqueada que se dieron ahí.

Jisung aún no procesaba todo, todo había pasado muy rápido como para detenerse a pensar en ese mismo momento.

Jealous | Hanknow/Hyunsung Donde viven las historias. Descúbrelo ahora