-Me imaginaba la aldea de Sasuke más pequeña que todo esto -Mencionó Kiba con un silbido al final, al vislumbrar las extensas calles residenciales que parecían cobrar vida conforme el sol avanzaba.
-El Uchiha debió tener mucho tiempo para planear todo esto -Le siguió Neji, mirando todo con suspicacia.
-Sasuke-kun no construyó todo esto solo, tuvo la ayuda de todas estas personas que confían en él -Respondió Hinata con tranquilidad, sabía que sus amigos y familiares estaban curiosos por saber acerca del lugar en el que ahora vivía- Sigamos por aquí, estamos cerca del campamento que preparamos para ustedes, lamentablemente no tenemos posadas dentro de la aldea porque no se recibían visitas. Supongo que ahora tendremos que pensar en construirlas.
-Veo que te integras en todo ese proyecto, Hinata. Te has adaptado muy bien en tan solo una semana -Las palabras de su padre le hicieron enrojecer. Era cierto, había asumido su papel con rapidez debido al estrés de Sasuke con toda esa condición impuesta de tener que abrir sus puertas para las demás aldeas. No tuvo mucho tiempo de dudarlo, cuando ya había cientos de personas llamándola señora.
Prefirió no responder, y guiarlos al sitio en el que se quedarían por los siguientes días. Era un campamento, eso era un hecho, pero habían logrado conseguir tiendas lo suficientemente grandes para que pudiesen dormir seis personas dentro de ellas. Eran espaciosas y se podía caminar dentro. Además, se lograron construir cinco cabañas para los Kages gracias a algunos jutsus especiales que tenían algunos ninjas. No eran ostentosas ni muy grandes, pero sí cómodas y Hinata se había encargado de volverlas cálidas y agradables.
-Es un bonito lugar -Sakura se acercó a la joven de ojos perla, mientras Naruto daba vueltas por el sitio, admirando todo el paisaje- Es fresco y tenemos una bonita vista de la aldea.
Así era, se encontraban sobre una colina en el noreste de la aldea. Hinata había elegido ese lugar por una razón, y era la vista que tenían. En un futuro se podría construir un hotel en ese sitio y estaba segura de que quienes lo visitaran se enamorarían del Sonido así como lo había hecho ella.
-Me aseguraré de que estén cómodos durante los días que estén aquí Sakura-san. Sé que no es lo ideal, pero no tuvimos mucho tiempo para preparar algo más.
-No te preocupes Hinata, es perfecto así. Además, los Kages no le dieron mucho tiempo a Sasuke.
-Sí... -Sonrió un poco al pensar en su pareja, cómo estaría en ese momento reunido con las autoridades que no le tenían tanta confianza.
-¿En dónde te estás quedado tú, Nee-sama? -Se acercó Hanabi, curiosa.
-C-con Sasuke-kun -Respondió tímidamente, cabizbaja, para luego señalar hacia donde quedaba su casa. Un poco más allá de la Base Principal del Otokage.
-¡Qué suerte tienes, Hinata! No solo tienes de novio a uno de los ninjas más atractivos de toda la nación del fuego, sino que vives en un lugar precioso -Hanabi hizo un puchero gracioso, ganándose unas palmaditas en la cabeza por parte de su padre- ¿Cuándo conseguiré yo mi ninja vengador?
-Todavía no es momento para que pienses en eso, concéntrate en tu entrenamiento -Respondió Hiashi, no muy de acuerdo con ver partir todavía a su segunda hija, cuando era tan reciente la mudanza de Hinata.
-Además, Konohamaru no es un ninja vengador -Lo dicho por Naruto cuando llegó junto al grupo hizo que Hiashi lo mirara de mala manera y Hanabi enrojeciera. Sakura por su parte negó divertida y se llevó a su prometido antes de que soltara otra tontería.
Hinata dejó a su padre y hermana conversando acerca de Konohamaru, para acercarse a donde estaba su querido primo con Kiba y Shino.
-¿Cómo ha estado Hinata-sama? ¿El Uchiha la ha tratado bien?
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La Sombra del Sonido
FanfictionSus corazones se hallaron, bajo la sombra del sonido. . . Después de la guerra, a pesar de haber decidido regresar a la aldea de La Hoja, Sasuke no se sentía a gusto ni bien recibido. Era de esperarse pues había cometido muchos errores durante su vi...