/ Irene /
Sus ojos miraron el cielo basto y azul, el despertar por las mañanas era lo mejor para ella, estiró un poco su cuerpo sintiendo los brazos de su esposo rodear su cintura, Irene se movió un poco intentando no despertarlo, miro como su compañera ya debe haberse levantado.
Se levantó y fue en busca de su esposa, los pies de Irene sintieron la tierra fría sobre las plantas de sus pies, sonrió un poco y se encamino en su camino para encontrarla, aún con su cuerpo desnudo Irene se movió entre las habitaciones de su cabaña, hasta que llegó a la sala principal.
Vio a Selene desnuda dándole la espalda, siempre era un placer ver sus atributos desnudos, sonrió con malicia y Irene la rodeo por detrás apretando con una de sus palmas el seno de Selene, está al sentir la mano de Irene gimió un poco, pues Irene estaba jugando con su pezón.
- Buenos días mi reina - dijo Selene intentando controlar sus gemidos al sentir como los dedos de Irene jugaban con su botón rosado.
- Me levanté y no te vi en la cama - dijo como si la estuviera acusando, Irene no espero y dejo su seno para palmear su nalga.
- Solo tenía hambre - gimió Selene al sentir su nalga roja, ella se movió un poco mas y sus nalgas chocaron contra Irene.
- Bien.... pero debemos cambiarnos si Natsu nos ve así no haremos nada en todo el día - Irene comento sabiendo del lívido de su marido.
- Por mi no hay problema el puede hacer lo que quiera con nosotras - Selene gustaba del sexo rudo y realmente no quería hacer nada hoy.
- Aun debemos encargarnos de Elefseria y de los otros dragones del continente - recordó Irene alejándose un poco, en tanto suspiraba.-Esta bien hay que terminar con esto rapido - dijo Selene mas cansada en solo pensar en los otros dragones del continente.
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Irene y Selene estaban cansadas, durante las ultimas décadas ellas y Natsu se habían encargado de luchar las guerras que en el continente se libraban constantemente, tantas batallas despues de la caída del reino de los elfos oscuros.Mercuphobia había perdido en la guerra y había huido con la cola entre las patas, los humanos y su codicia insaciable había roto la paz de Glitena, Natsu no quería verse envuelto en todo esto, ellas tampoco pero al ser el mas fuerte en el Continente las demás razas acudieron a el.
Sabían que Natsu era un Dios dragón... el único Dragón que estaba por encima de todos, de Dioses, Demonios y del mismo Acnologia, pero era bien sabido que su Natsu era un dragón de paz, era justo y misericordioso, esto los hizo recurrir a su marido.
Con la muerte de la reina Glaryn y su única hija sobreviviente la princesa Samihy llevo literal a los últimos de su pueblo a ellos, los ultimos elfos oscuros, aquellos que una vez su marido los protegió una vez mas buscaban su resguardo.
Samihy ofreció su cuerpo incluso con tal de ser aceptada, al inicio claro que a ella y a Selene no les gusto en lo absoluto, pero al final ellas mismas reconocían que llegar a ese nivel de auto humillación arrodillarse y besar los pies de su marido requería mas que valor.
Natsu termino doblegado por su determinación, Samihy al final fue aceptada y se volvió en una de sus damas de compañía, su pueblo termino bajo el refugio del ala del único ser que aterraba a los hombres de todos los continentes....
La noticia no tardo en esparcirse por todo el continente, todos los seres mágicos que eran perseguidos por los hombres se pusieron en marcha, aquellos que en persecución lograron llegar a sus tierras encontraron refugio.
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Reconstruyendo 400 años del pasado.
FanfictionMira que esto es como si fuera un sueño, jajaja parece un sueño... después de que busco a mi padre por mucho tiempo... de el no hay rastro alguno y esto empieza ser cansado. La única razón por la que me había unido a Fairy tail era para encontrarlo...