CASUALIDADES DEL AMOR ♡

Cap:15

Me desvestí y opte por ponerme un short de pijama rosa, una camiseta de tirantes blanca y las zapatillas. No tenía sueño, pero tampoco tenía nada que hacer ahí, simplemente mirar las vistas de la ciudad.

Salí de la habitación y llegué a la puerta de la suite de Jisoo, llamando a la puerta. Tras unos segundos, Jisoo abrió.Llevaba la camisa blanca a medio abotonar, y esbozaba una sonrisa.

Jisoo: ¿Qué haces aquí? - Preguntó abriendo la puerta para que yo entrase.Pase a su habitación y tenía muchos papeles encima de la mesa, un bolígrafo y dos móviles.

Rosé: Me aburría allí sola - Respondí simplemente, girandome hacia ella - ¿Qué hacías?

Jisoo: Contratos - Respondió, se la notaba tensa - Es demasiado trabajo, ¿Sabes? - Río y asenti, pero ella seguía mirando los papeles con un suspiro largo.

Tiré de su mano para atraerla hacia mi, rodeando su cuello con las manos. Sus manos fueron directas a mi cintura, y sus ojos a mis labios

Jisoo: ¿Puedo besarte ?- Preguntó en vozbaja, y asenti con una sonrisa

Rosé: Si- Jisoo inclinó la cabeza y presionó sus labios con los míos.Atrapó mi labio inferior con los suyos y me dejé llevar. Me besaba lento, suave, algo cálido y dulce.Mis manos se colaron bajo su pelo y el cuello de su camisa, apretando un poco la piel en su nuca. Jisoo trazó una línea con la lengua entre mis labios y abrí la boca dejando que su lengua se colase entre estos, y tocó la mia. Era húmedo y excitante.Nuestras lenguas se veían a separarnos del beso y fundirnos en otro aún más pasional, sintiendo las manos de Jisoo apretar mi culo contra ella con fuerza, lo que que provocó un gemido contra su boca y una sonrisa satisfactoria en sus labios tras aquel beso.

Jisoo: Mierda - Susurro ella con una sonrisa

Rosé: ¿Qué? - Pregunte separandome con el mismo gesto sonriente

Jisoo: Que además besas genial

La semana entera había sido un caos. Miles de operaciones, consultas y un montón de papeles por rellenar. Todo había pasado lento, tanto que miraba el reloj y cuando creía que habían pasado veinte minutos, pasaba dos.

Eran la una y media de la tarde y estaba desesperada por llegar a aquella última
consulta.Tras despedir al último paciente, abrí la puerta y me topé con aquellos ojos negros a los que había estado esperando toda la mañana . Jisoo llevaba la chaqueta del traje en la mano y vestía con una camisa blanca desabrochada por el escote.

Rosé: Pasa - Le hice un gesto con la cabeza, entrando a la consulta con ella. Se sentó en la camilla sin que yo le dijese nada.

Jisoo: No me acostumbraré nunca a verte así vestida .Es... - Se quedó en silencio mientras yo sonreía, cogiendo la caja de guantes de látex y lo necesario para curar, mirándola de nuevo cuando me puse delante.

Rosé:¿Es ? - Pregunte para que terminase la frase, quitándole la venda de la mano lentamente

Jisoo: Eres sexy - Respondió ella, y aunque me moría de ganas de responderle que ella aún más, estábamos en una consulta y ella era mi paciente.

Rosé:No se que sentido tendrás del atractivo, pero obviamente piensas mal- Dije sentandome en la silla, cogiendo un algodón y mojandolo en agua oxigenada.

Jisoo:Me da igual lo que pienses sobre eso. Me parece rematadamente sexy cuando haces tu trabajo - La mire a los ojos pasando el algodón por encima de los puntos, bajando de nuevo la mirada a su mano

Rosé: Tu herida va bien, aún está muy blanda la cicatriz así que lo dejaremos una semana más - Cogí un poco de yodo y loesparcí, sintiendo como su mirada se clavaba en mi. Jisoo se quedó en silencio mientras que yo vendaba su mano con una venda limpia, aprentadola de forma firme para que no se soltara. Cuando me puse de pie, sus ojos miraban los míos de una forma que casi hizo sentir cosas que no debería en una consulta.

Jisoo levantó de la camilla pero siguió apoyada en ella, con las piernas un poco abiertas por lo que yo había quedado en ella.

Jisoo: Yo siempre tengo el control de todo, Rosé - Susurro con la voz más ronca que podía tener.-Tengo el control de lo que como, tengo el control de lo que hago a cada minuto del día, puedo controlarlo todo...Menos a ti -- Susurro escuchando como sus manos apretaban el acolchado de la camilla - Y eso me hace pensar en ti, todo el día. Y pensar en cuando volveré a besarte.

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