CASUALIDADES DEL AMOR ♡

Cap:36

• Jisoo

Yo no solía beber. De hecho lo único que tomaba eran aquellas copas de vino en las comidas, o quizás, si estaba estresada un poco de whisky y quizá un cigarrillo .Y así es como estaba ahora, apoyada en el borde del escritorio de mi despacho, con un vaso de whisky en la mano y devanandome la cabeza. Moví un poco el vaso mirando como el líquido anaranjado, dorado y marrón se pegaba al vaso y volvía a su sitio, pero yo ni siquiera tenía tiempo para pensar en aquello.

Mire una vez más los papeles encima de la mesa y ladeé la cabeza, dándole un trago al vaso, que bajaba por mi garganta casi quemándome, pero en aquel momento no importaba.

XXX:¿ Jisoo ? - Escuché la voz de la nueva secretaria en la puerta y me di la vuelta con una mano apoyada en la mesa, mirandola de forma seria y impasible - ¿Tienes alguna solución?

Jisoo: No - Respondí. Apreté la mandíbula
viendo como volvía a salir y volví a mirar la ciudad por la ventana . Era de noche, y las luces de los edificios se mezclaban entre las sombras que dejaban estos mismos, creando así un efecto que provocaba perderse en ellos.

De un trago me acabe el vaso, cogí la botella de whisky y volví a echar un poco en el vaso. ¿Cómo ahorrar millones de dólares sin pérdidas?.

Esa era la pregunta que no podía resolver. Hasta ahora, todo iba bien. Los ingresos eran abundantes y aún más los beneficios, sin desmerecer a los clientes. Pero habíamos llegado a un punto que las deudas se estaban comiendo los beneficios y casi no tenía margen de ganancias.

XXX:¿Puedo entrar ? - Una voz me hizo despertar de mis pensamientos. Me giré con el vaso en la mano y sonreí al ver a Rosé, sonreí por primera vez en todo el día.

Jisoo: Puedes - Respondí dejando el vaso en la mesa. Me acerqué a ella y nos fundimos en un abrazo. Sus manos acariciaban mi espalda y mi cara estaba escondida en el hueco de su cuello, buscando algún refugio en ella

Rosé:¿Estás bien, cariño? - Se separó de mi y me cogió la cara entre las manos y yo asentí con una sonrisa.

Jisoo: Saturada de trabajo - Me separé un poco y me senté en el sillón, tirando de su mano para sentarla entre mis piernas. Rosé rodeó mi cuello con los brazos y miro los papeles frunciendo el ceño.

Rosé: No entiendo nada - Río levemente y me miro mordiendose el labio - ¿Qué tienes que hacer?

Jisoo: Básicamente son cuentas . Y tengo que hacer que, con un cambio ganemos dinero.Y no se que cambio hacer, porque ya está todo bien hecho - Me frote la cara con las manos y suspiré, apretando mis sienes con los dedos.

Rosé:¿Dónde compráis las verduras, carnes, frutas ...? - Rosé fruncio el ceño y miro los papeles.

Jisoo: Una empresa - Dije enseñándole el papel de los alimentos, kilos y precios.

Rosé: ¿Por que no se las compras directamente a los agricultores y ganaderos ? Cobran muy poco por todo, y sólo con que les pagues un poco más que las empresas multinacionales te lo venderán directamente a ti - Entreabrí los labios y señale a Rosé, si poder creer lo que me acaba de decir.

Jisoo: ¡ Dios ¡ ¡ Claro que si ! ¡ Eres un genio! - Dije levantandome de la silla.Cogí el teléfono y marque el número- Soy Jisoo.Tenéis que romper el contrato con la empresa que nos vende la carne y la verdura - Me movía por el despacho con el móvil en la mano, mientras veía a Rosé jugar con unos de los bolígrafos, que aunque ella no lo sabía podía costar unos cien dólares - Lo se .Si lo sé.Pero tenemos que hacerlo - Suspiré girando de nuevo la mirada hacia Rosé,
girando de nuevo la mirada hacia Rosé que miraba, que miraba el despacho que era bastante grande - Lo haremos, porque soy la dueña de esto. Y se hará porque se que las cosas saldrán bien.¿ Tienes jefe ? Pues soy la jefa de tu jefe, y del jefe de tu jefe . Así que anula el puto contrato y paga la cláusula que tengas con la empresa, ahora. - Suspiré mientras Rosé jugaba con sus manos Gracias Colgué y deje el móvil en la mesa, acercandome a Rosé.

Rosé: Tu despacho es muy grande - Dijo con una pequeña sonrisa, mientras yo me senté de nuevo, y ella se colocó encima.

Jisoo: Llegas y soluciona todos mis problemas - Reí levemente y puse mi mano en su muslo, dándole un suave y lento beso en los labios

Rosé: No hice nada, lo tenías delante de ti - Ella río mientras negaba, dándome varios besos por los labios - Y te mereces descansar Tras eso, nos levantamos y salimos del edificio, mientras aún Rosé observaba todo con una sonrisa.

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