El secreto mejor guardado

Nuevo Amanecer: Un Cachorro Especial

Kartein notó que algo estaba mal; la comida le provocaba náuseas. Un día,mientras desayunaba con Kayden, el alfa le entregó su té favorito. Alolfatearlo, Kartein sintió una repentina oleada de náuseas. Sin decir nada, selevantó rápidamente y corrió al baño. Kayden, preocupado, lo siguió, peroKartein cerró la puerta antes de que pudiera alcanzarlo. El alfa, viendo lapuerta cerrada, tocó y preguntó:

—¿Kartein, estás bien? —preguntó con preocupación.

Sus palabras no fueron escuchadas, ya que Kartein estaba analizando lo quele ocurría. No podía creerlo: esos síntomas ya los había experimentado una vezantes. Se tocó el estómago y dijo:

—Realmente eres un ángel, ¿no es así, mi niño? —La posibilidad de queestuviera esperando un hijo de Kayden parecía imposible, dado el daño que habíasufrido, pero aquí estaba. Para asegurarse, realizó una inspección a su cuerpocon su poder y ahí estaba: un pequeño creciendo en su interior. Esto lo alegró,pero quería confirmarlo. Tomó una prueba de embarazo para omegas machos y elresultado fue positivo. Kartein lloraba de alegría; tendría un bebé, un hijo deél y su alfa. Quería abrazar a su esposo de inmediato.

Kayden, preocupado, notaba que Kartein no salía del baño y solo escuchabaque vomitaba. El omega se había desmayado esa mañana y Kayden temía perderlo oque estuviera gravemente herido. Pensaba que quizás otro alfa lo había dañadomientras él curaba a alguien, o que una reacción retardada a un ataque anteriorlo estaba afectando. La preocupación lo consumía, pensando en la posibilidad deque Kartein estuviera en grave peligro. Estaba tan perdido en sus pensamientosque no se dio cuenta cuando Kartein salió del baño y, con toda la alegría delmundo, saltó a sus brazos.

El movimiento fue tan rápido que Kayden solo vio un borrón antes deencontrarse tirado en el suelo, abrazado por su omega, quien escondía su caraen su pecho, irradiando felicidad. Kayden, asustado, preguntó:

—Cariño, ¿qué pasó? ¿Estás bien? ¿Te duele algo? ¿Quieres que te lleve alhospital?

Kartein, alegre, respondió:

—No, tonto. Solo me preguntas si estoy bien. Kayden, estoy más que bien, másalegre que todos en este mundo.

El alfa, confundido, intentaba levantarse mientras Kartein seguíaabrazándolo. Notó la expresión de felicidad en su omega, pero no entendía larazón. Sus pensamientos fueron interrumpidos cuando Kartein tomó su cara y ledio un gran beso en los labios.

Kayden, aún confundido, preguntó:

—no diré que no me gusto el beso pero ¿Qué es lo que pasa?

Kartein sacó la prueba de embarazo y se la mostró.

Kayden, al verla, estaba confundido y dijo:

—¿Qué es eso? Espera, ¿te estás muriendo? ¿Tienes alguna enfermedad, cáncer,algo?

El omega rodó los ojos y le explicó:

—No, idiota. Sabes 23 formas de dominar a un omega, pero no conoces laspruebas de embarazo? —Mostrando mejor el dispositivo, continuó—. Mira, estamarca aquí dice que es positivo, lo que significa que estoy esperando un hijotuyo, Kayden.

El mundo de Kayden dio vueltas. Luego, su confusión se transformó en puraalegría. Al ver la cara de su alfa, Kartein se bajó de su regazo y se sentócerca de él, preocupado porque no reaccionaba. Pero el alfa, al no sentir a suesposo encima, se levantó de un tirón, tomó a Kartein en sus brazos y comenzó adar vueltas en círculo antes de bajarlo y darle un beso.

Kayden gritó:

—¡Seré padre! —daba brincos de felicidad.

Kartein, viéndolo, estaba emocionado. Sabía que Kayden sería todo un amorpara su hijo o hija. El omega, feliz, dijo: