𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒 ━━ jujutsu kaisen.

15. Inumaki Toge

Te encuentras junto a Inumaki, Maki, y Panda en el campo de entrenamiento. Éste está dividido en parejas. A ti te ha tocado con Toge, con quien apenas has tenido encuentros en los años en los que lleváis juntos.

Vuestra relación es simplemente profesional, apenas y le hablas solo para cosas de la academia.

—Bien, Inumaki —dices, poniéndote en posición. Tus ojos rápidamente se tornan negros, y tu cuerpo comienza a alzarse en el aire a unos centímetros del suelo—; ¿Listo para el entrenamiento?

Él asiente levemente.

Sin perder ni un segundo más comienzas a tirarle lo que tú llamas como "Tiras del abismo", cosa que significa un pequeño agujero negro que, si toca alguna parte del cuerpo de alguien, éste sentirá como algo comienza a apoderarse de él, haciendo que estuviese totalmente a tu merced.

Inumaki esquiva todos tus ataques, teniendo cuidado de no tropezar con alguno de sus otros compañeros.

—¿Quieres que vaya enserio? —dices, al ver que ninguno de tus ataques le daba a tu objetivo.

Éste asiente, quitando su boca de su sudadera.

Te alzas un poco más en el aire y sigues lanzándole sin cesar tus Tiras del Abismo. Te encuentras totalmente seria, sin indicios de querer darle la victoria.

Él se encuentra igual. Esquiva todos tus ataques mientras piensa algún ataque...

—¿No piensas atacarme? —preguntas, dejando de tirarle tus ataques. Él sonríe levemente.

"¡Al suelo!" Cuando oyes su orden, tu cuerpo inmediatamente cae el suelo. Todo tu cuerpo se queda pegado en la superficie. Toge se acerca a ti, con una sonrisa victoriosa mientras se acaricia levemente la garganta.

Tú solo puedes mirarlo mal mientras intentas zafarte del suelo. Sin embargo, es imposible. Suspiras y dejas de mirar a tu contrincante.

No obstante, lo que no espera Inumaki es que una de las Tiras del Abismo que habías lanzado antes había quedado suspendida en el aire y, tras controlarla mediante el hilo invisible que os une, ésta choca contra la espalda de Inumaki.

El mencionado se queda anonadado ante el reciente ataque, no se lo esperaba para nada.

Pronto los ojos de Inumaki se tornan de un color negro, exactamente del mismo color que los tuyos.

—Toge Inumaki, suéltame —dices, mirándolo directamente a los ojos. Éste asiente y, tras susurrar un suave "Ponte en pie", tu cuerpo pronto se pudo zafar del suelo.

Desactivas tu poder del cuerpo de Inumaki, haciendo que este despierte de su trance.

—¿Te gustó ese pequeño trance? —sonríes, burlonamente. Él niega, totalmente serio—. Oh, vamos, ¿No vas a sonreír ni aunque sea un poco?

Inumaki parece querer decir algo, pero tal parece que le da algo de corte decirlo.

—Venga, quita esa cara de serio, y pelea —dices, acercándote a él. Sin embargo, lo que no te esperas es que Maki te empujara, haciendo que tu cuerpo choque bruscamente con el de Inumaki. Lo miras levemente sonrojada— ¡Maki! —gritas, sonrojada.

De fondo se escuchan las risas de Panda y Maki.

—Ahí hay una tensión que se puede cortar con un cuchillo, T/n —te dice Panda—. Anda, pídele ir a por un helado luego.

Oyes las palabras de Panda y miras a Inumaki, tragando saliva.

Inumaki te ayuda a recobrar postura.

—¿Cómo que tensión, Panda?

—Tensión, T/n. Parece que en cualquier momento os ibais a besar.

—Solo estábamos entrenando.

—¿Y?

Ruedas los ojos con una sonrisa.

—Inumaki, para que éstos dejen de molestar, ¿Quieres ir a tomar un helado conmigo luego?

Dices, mirándolo. Éste se sonroja levemente y se tapa nuevamente su boca con la sudadera, asintiendo levemente.

—Apuesto a que se harán pareja en menos de un mes —oyes que dice Panda a lo lejos.

Te sonrojas levemente.

¿Y a éstos que les pasa?

Sin embargo, algo que tú no sabes, es que Inumaki les había dicho mediante cartas a los demás hechiceros lo que sentía por ti, y les había pedido ayuda.

A decir verdad, no se esperaba que te empujaran hacia él.

Pero no sé quejaba. Ahora tendría una cita con la chica que le gusta...