En otra vida

Capitulo 3: Amadeo.

Termina el baile y lo primero que hago es quitarme el corset y el armador gigante.

Quedó completamente desnuda.

En ese momento, entra Amadeo

-- Mi lady, su padre me ha dicho que esta será nuestra habi... ¡Oh por Dios! Lamento interrumpir su privacidad.

Narra Amadeo

Conozco a la princesa Eleanor desde que teníamos 5 años. Era una niña muy amable y sencilla, ella me a gustado desde entonces.

Su padre me dijo que dormiría con ella, lo cual me puso un poco nervioso, ya que yo nunca estuve con alguien de esa manera, además mi padre me enseñó a respetar mucho a las mujeres, sería incapaz de hacerle daño a una.

Cuando vi a Eleanor desnuda... Una emoción en mi despertó que yo ni tenía idea de su existencia.

Simplemente no podía dejar de mirarla. Ella es... Tan... Hermosa... Si piel es tan blanca con el papel... Sus ojos azules intensos como el océano... Y su cabello rizado... Es hipnotizante. Simplemente perfecta.

Pero ya volviendo a la realidad.

-- Mi lady, esperaré afuera... Mientras... Usted... Ya sabe.

Expreso tímido.

-- Amadeo, tranquilo no tienes porque asustarte no voy a matarte. El algún momento lo tendrías que ver.

Expresa ella un poco insegura, y trago grueso, asiento y me retiro de la habitación por unos minutos.

Mi intensión con alguna mujer, sería estar con ella cuando me necesite, apoyarla en todo y esas cosas... Pero no en la intimidad. Además las relaciones se tienen luego de casarse es otra tradición de mi familia.
...

Luego vuelvo a entrar y ella ya estaba vestida y había preparado mi lado de la cama para dormir.

Narra Eleanor.

Estaba lista para dormir, me esperaba un largo día mañana.

Además tenía que pensar como iba a dormir con Amadeo... No sabía si abrazarlo... O besarlo.

El procede a acostarse y voltea viéndome directamente a los ojos. Procedo a hacer lo mismo.

-- Nunca te lo había dicho... Pero eres hermosa, con las rosas rojas. Hermosas y delicadas

Comenta este.

Dicho comentario hace que me sonroje mucho.

-- Gracias, tus ojos son hermosos y tu eres una persona... Increíble... Amo que quieras el bien de tu pueblo.

Nos quedamos viendo por un segundo. Hasta que

-- Al diablo

Comenta Amadeo antes de estampa sus suaves y perfectos labios contra los mios.

Eran un beso tierno y delicado. Ya que ambos somos un poco tímidos en ese sentido.

Luego, me jala así el, haciendo que nuestros cuerpos queden completamente juntos.

...

Nos separamos luego de un rato de besarnos... Yo me acurruco en su atlético cuerpo y nos quedamos dormidos.

Eso fue... Increíble, jamás había besado a alguien... Mucho menos sentir un cuerpo tan cerca de mi.
...
Amaneció y debía levantarme temprano para mis clases de princesa y Amadeo también ya que por unos meses se quedaría aquí.

Abrí mis ojos y lo ví... Es tan tierno dormido. Observé detalladamente su definida mandíbula, sus largas pestañas, no podía creer que un hombre tenía las pestañas más largas que yo.