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Pasan los días, no has tenido contacto con ellos,  comienzas a sentir una sensación extraña en tu estómago. A lo largo de los últimos días, has estado experimentando náuseas y fatiga. Sin embargo, hoy es diferente: una oleada de náusea te envuelve repentinamente, obligándote a detenerte y apoyarte contra una pared para no perder el equilibrio.

Mientras recuperas el aliento, una inquietante idea cruza por tu mente: ¿y si estuvieras embarazada? La posibilidad te deja atónita y llena de ansiedad. Los recuerdos de tus momentos íntimos con Aizawa y Shinso vuelven a ti, y la incertidumbre sobre quién podría ser el padre te abruma.

Decides que necesitas un lugar tranquilo para pensar y procesar esta posibilidad. Intentando mantener la calma mientras las preguntas y preocupaciones se agolpan en tu mente. Una vez allí, te sientas en el sofá y tomas algunas respiraciones profundas.

La idea de estar embarazada te asusta, el hecho de no saber con certeza que pasa te llena de temor. No puedes evitar pensar en cómo cambiaría tu vida y en las conversaciones difíciles que tendrías que tener con Aizawa y Shinso. El simple hecho de no saber quién podría ser el padre complica aún más la situación.

Escuchas un golpe en la puerta. Te levantas, un poco sorprendida, y al abrirla, te encuentras con Shinso. Su presencia te trae una mezcla de consuelo y nerviosismo.

— Hola— dice con una sonrisa. —Pensé en pasar a verte. ¿Está bien?—

— Claro— respondes, tratando de sonar relajada mientras lo invitas a entrar. "Siempre es bueno verte."

Shinso se acomoda en el sofá y comienzan a charlar. Hablan de cosas triviales, evitando temas profundos, y aunque aprecias su compañía, sientes que la tensión dentro de ti crece. De repente, una fuerte oleada de náuseas te golpea, obligándote a levantarte rápidamente.

Perdona — dices con urgencia cubriendo tu boca, y corres al baño antes de que Shinso pueda responder.

Te arrodillas frente al inodoro, vomitando mientras intentas mantener la calma. Sabes que Shinso está en la sala, probablemente preocupado, y no quieres alarmarlo. Sin embargo, el hecho de estar enferma delante de él hace que la situación sea aún más real y aterradora.

Después de unos minutos, te enjuagas la boca y te miras en el espejo, tratando de recomponerte. Tomas algunas respiraciones profundas antes de salir del baño y regresar al salón, donde Shinso te espera con una expresión de preocupación.

¿Estás bien?— pregunta, levantándose del sofá y acercándose a ti.

Asientes, aunque te sientes débil y vulnerable. —Sí, solo... algo que comí, supongo.—

Shinso te observa con escepticismo, pero no presiona. —Si necesitas descansar, no quiero molestarte. Solo quería asegurarme de que estabas bien.—

—No te preocupes— respondes, tratando de sonreír. Aprecio que hayas venido.—

Se quedan en silencio, el parecía analizar la situación de pies a cabeza mientras te veía muy concentrado

— No quiero presionarte, pero... ¿estás embarazada?

La cara de shinso ante esa pregunta se iluminó, aunque también estaba lleno de miedos, ser padre a los 20, lo llenaba de inquietudes

El nudo en tu garganta se aprieta mientras lo miras. Sus ojos están llenos de preocupación y ternura. Decides que no puedes mentirle.

No lo sé! Estoy tan...confundida— dices mientras cubres tu cara y comienzas a llorar, no sería un problema para ti si supieras quien es el padre

Shinso toma un momento para procesar la noticia. Luego, toma tu mano con suavidad. —No tienes que enfrentar esto sola— dice, su voz firme pero reconfortante. —Estoy aquí para ti, pase lo que pase.

Las lágrimas comienzan a caer de nuevo, pero esta vez no son solo de miedo, sino también de alivio. La comprensión y el apoyo en las palabras de Shinso te brindan una fuerza que no sabías que necesitabas.

Gracias— susurras, sintiendo cómo el peso de la incertidumbre empieza a aligerarse un poco, el se acerca y te da un abrazo

Estaremos bien— dice en un tono de voz suave, acariciandote en ese abrazo

Sabes que todavía hay muchas decisiones por tomar y conversaciones difíciles por delante, especialmente con Aizawa.

Le dirás a Shota?— dijo el peliazul

No lo se, debo de decirle, los dos bien sabemos que el hijo es de uno de los dos, todo paso esa noche donde estuvimos los tres, estoy segura— decías en un tono de preocupación, estabas aún preocupada

No hay alguna probabilidad... de que sea solo mio? Digo, hemos estado juntos solo tu y yo y— lo interrumpen

No, estoy segura que fue de aquella noche, no digo que sea o no tuyo, si es que estoy embarazada, deberíamos llamar a Shota— decías secando tus lágrimas

Hazlo, llámalo, estoy seguro que estas embarazada, por mi parte, estaré contigo y si tu quieres... no me importa si el niño es mio o no, yo me haré cargo— decía el peliazul con un brillo en sus ojos— tengo un pendiente en la agencia, me llamas cuando Shota llegué— decía seguido a eso, te da un ligero beso en los labios mientras salía del departamento

Con todo el valor del mundo, diste un respiro profundo y seguido llamaste a Aizawa.
Shota, necesitamos hablar— decías con la voz temblorosa en el teléfono

Shota? Quien eres? El esta ocupado— decía una voz que no te resultaba familiar, era la voz de una mujer, te llenaste de celos y coraje.

Quien eres? Su secretaria?, no importa, si tan ocupado está, dile que ESTOY EMBARAZADA, que lo espero en el departamento, gracias— seguido a eso colgaste

Estabas llena de enojo, y solo esperaste a que el "segundo papá" se apareciera en tu puerta.







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@/morganincognita
subo animaciones de bnha, adiós bonitas♡

Lurk  | Aizawa | ShinsoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora